Capitulo.20.

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Ya era la hora. Ni más ni menos. Tana está lista hacia una hora. Tenía un bonito yukata que su madre le había preparado y un peinado sencillo pero encantador.
- En serio me dejara plantada...- Murmuró ella.
- Parece que si...- Canturreo Baji sentando en el sofá acariciando uno de sus tantos gatos.
- ¡Kei!- Regaño la mamá.- No te preocupes Tana-chan. Seguro se retraso unos minutos.
- Si...eso espero.- En eso escucho su teléfono sonar.- ¿Será él?
Sin más la chica fue a su celular y contesto sin mirar.
- ¿Hola?
- ¡Amiga!- Definitivamente no era Sanzu.- Voy camino a tu casa para enseñarte...
- Vicky...- Llamo Tana.- Lo siento pero tengo un compromiso en...- Pero la chica no paraba de hablar de cierto invento, maqueta...o de todo a la vez. Tana no le prestaba mucha atención.
- ¡Tana-chan!- Escucho el grito de su mamá.- Te buscan...
- Vicky hablamos en un ratico...¿ok?- Sin más colgó.
Aún guardaba las esperanzas de que fuera su cita. Y así fue. El albino estaba en la puerta de su casa esperándola. Mientras su hermano parecía pasarle una lista de reglas que debía de seguir.
-¡Kei! Deja al pobre chico de una vez.- Volvió a regañar la mayor.
- El viejo me autorizo.- Se defendió el chico.
Tana decidió no perder más tiempo. Tomo al albino del brazo y lo arrastró lejos de la casa.
- Perdón por eso...- Dijo avergonzada al llegar a la moto del chico.
-No hay problema.-.Dijo extendiendole un casco. Era difícil reconocer las expresiones del chico, después de todo tenía medio rostro oculto. Pero Tana juraría que estaba nervioso igual que ella. Por lo que se sintió más a gusto.
Sin más espera emprendieron camino hacia la feria. Ambos estaban nerviosos y algo avergonzados, pero a gustos uno con el otro.
Al llegar los colores y luces sobresalían del lugar del evento. Tana había ido muy pocas veces a este tipo de festivales. Si bien le llamaban la atención por ser extranjera, nunca se había animado a ir.
- ¿Adónde vamos ahora?- Pregunto Tana emocionada.
- Pues...no se... Es mi primera vez.- Admitió el chico avergonzado.
- Igual yo.- Dijo Tana.- Ven... Veamos que hay por aquí.
Sin más se internaron entre las personas. Habían muchos juegos, comida y atracciones.
- Probemos aquí...- Dijo Tana viendo un juego de disparar.
- Mm... ¿Cuál te gusta?- Pregunto el chico refiriéndose a los peluches.
- ... El tigre...- Dijo señalando un juguete en específico.
- Bien...
Sanzu pago por una ronda, pero nada. Tana quería decirle que era un tiro fácil y ella podía darle sin problema. Pero conociendo el ego de muchos chicos sabía que podía herir a su cita si hacía eso. Así que opto por otra cosa.
- Mira... Mantén nos ojos abiertos y aguanta la respiración en el momento que dispares- Explico ella, y ante la mirada dudosa del chico acato su pedido.
- Wow...¿sabes disparar?- Exclamó al ver el resultado. El cuidador del local le dio el premio escogido.
- Más o menos.- Dijo ella restándole importancia.- Gracia.- Dijo sonriendo cuando el chico le dio el peluche.-¿Quieres un algodón?
Ambos siguieron caminando por el festival viendo los diferentes puestos y atracciones. Aún cuando a penas se conocían se sentían bien en compañía del otro.
- Tengo una duda.- Pregunto el chico viendo como la chica comía un poco del algodón de azúcar que ambos compartían. Ella lo miró esperando que hablara.- Tu...¿Conoces a la familia Akashi?
-Mmm...no mucho.- Respondió ella.- Se que mi papá tiene un hermano, y probablemente él tenga hijos. Pero no los conozco. Mi padre no habla mucho de ello.- Hizo un momento de silencio y miro a la gente que caminaba.- Creo que no les gustó mucho que mi papá se casará con una extranjera. Así que me da igual.
- ¿Extranjera?
- ¡¡Sip!!- Dijo ella orgullosa.- Nací en Latinoamérica, mi mamá era de allí, pero vine muy pequeña para acá.- Después miro al chico.- ¿No te importa o si?- El chico no le respondió, le resto importancia.- Toma o terminaré comiendo yo sola.
El chico nego. No quería retirar su mascarilla.
- Ya veo...¿Es por el cubre-bocas?- El chico asintio y se levantó.
- ¿Y si seguimos caminando?- Propuso.
- No...quiero compartir el dulce contigo... Aunque tenga que cubrirme los ojos.- El chico la miró extrañado y miro a las personas que caminaban.- Bueno...puedo intentar vendarle los ojos a ellos también.- Dijo riendo.- Solo si me vas a buscar a la estación después. Capaz que me acusen de secuestro masivo.
Ambos compartieron una carcajada. No sabia si serian una buena pareja. Pero amigos, seguro que si.

Hola. Capitulo largo el de hoy. Que les pareció? Se acerca una pelea... Que creen que suceda?
Espero que el capítulo y la historia sea de vuestro agrado. Cuídense mucho. Hasta pronto.

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