Vestul quedó largo rato parado, simplemente mirando la pared. Era muy consciente de que acaba de librarse de la muerte y aún no sabía muy bien cómo les habían descubierto ni por qué no le habían metido a él también en el saco de los culpables, descubriéndole junto con Tajto. No se estaba quejando de que eso no pasara, por supuesto. Era solo que, una vez pasada la sorpresa y congoja iniciales, ahora le asaltaban los motivos ocultos. Daba gracias a la Madre porque le hubiese metido aquellas dudas y escrúpulos en la cabeza durante las últimas noches y que habían hecho que no intentase matar a Loira. Tenía muy claro que, si le pillaban, Tajto daría un paso atrás y se desentendería de él. Era muy amigo de sus amigos siempre que esos amigos le sirvieran para algo; si eran un lastre, no le interesaban y dejaban de existir. Durante estas noches de atrás, había estado seguro de que le usaba como peón, a modo de chivo expiatorio. Él mataba a la Reina y, si le cogían, era solo culpa suya porque Taj se lavaría las manos.
Dudaba que Elster tuviese la información desde hacía mucho tiempo porque, si no, habría ido a hablar con él hacía noches y no ahora. Sin embargo, no era capaz de saber quién más podría estar informado de esos planes en palacio. Él se había mantenido callado y dudaba mucho que Tajto hubiese hablado con nadie más al respecto. Lo averiguaría, ya solo por curiosidad. De momento, al no saber quién estaba detrás de la filtración, no sabía si había sido obra de Elster que, por su cuenta, había decidido sacarle de la ecuación y apartarle. Pero eso también le sorprendía porque sabía que no le caía muy bien, así que no le debía de estar protegiendo. A ella, o a quien fuera, le interesaba salvarle y que se alejase de Tajto. Y lo haría, por supuesto. Si antes no quería hacerlo, ahora, que conocían sus planes, aún menos.
De todas formas, Elster le había dejado muy claro lo que debía hacer y no lo iba a demorar. Si el plan era pillar a Taj intentando asesinar a Loira, lo mejor era que pasase del tema cuanto antes y, para eso, le tenía que dejar claro que él no la iba a matar. No le iba a delatar, pero ya era todo cosa suya. Si la quería muerta debería hacerlo él o encontrar a otra persona.
Con toda su determinación fue en busca de Tajto. No tenía claro dónde estaba, aunque la ciudad no era muy grande, así que no tardaría en dar con él. Miró en la biblioteca, no estaba; miró en el gran comedor, tampoco estaba. Dudaba que hubiese salido fuera de palacio, así que debía estar cerca. Le sorprendió encontrarle en el patio interior, sentado, leyendo tranquilamente un libro, como si no estuviese pendiente de un asesinato. Mostró una gran sonrisa al verle que se tornó en preocupación al ver el gesto de Vestul.
— Tengo que hablar contigo —dijo susurrando mientras comenzaba a pasarse la mano derecha por el dorso de la mano izquierda. Miró en derredor para asegurarse que no había más personas en el amplio patio antes de continuar—. No puedo hacerlo. No voy a hacerlo, Tajto. Me retiro de esto.
— ¡No puede ser! —contestó el diplomático entre dientes, entrecerrando los ojos y mirándole con furia— Te comprometiste a hacerlo y debes cumplir con tu parte. Esto ha sido idea tuya. Tú te acercaste a mí, ¿recuerdas?
— No des la vuelta a las cosas para hacerme sentir culpable o que sienta obligación —Vestul se sentía con algo más de confianza ahora que se sabía respaldado por Elster y que no tenía por qué pagar por algo que no era suyo—. Sabes de sobra que yo hablé contigo para que contactaras con el Rey del Sol y ver si se podía lograr un mestizaje. Yo no buscaba en ningún caso matar a Loira. Eso ha sido tu granito de arena, no el mío. O quizá ha sido idea de los del Sol, ni lo sé ni me importa. Esto se me ha ido de las manos. Pretendes acciones que no me identifican y por eso me retiro. Cualquier plan que tengas con el Sol, o tuyo propio, deberás llevarlo a cabo tú mismo.
— ¿Y piensas delatarme también? —Vestul sabía que Tajto buscaba con esa pregunta que le confirmase que no iba a delatarte. Que solo se apartaba por moral, no porque no estuviese del todo de acuerdo con lo que iba a hacer.
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La Profecía Incumplida I
Science FictionPrimer libro de la trilogía "La Profecía Incumplida". Dos civilizaciones supervivientes luchando por evitar que la especie humana se extinga. Dos reinos obligados a entenderse para sobrevivir, tan diferentes como la noche y el día eternos en el que...