Arrogante

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El fuego oscuro de Khalil estaba quemando a todas las personas que estaban dentro del establecimiento, llamando la atención de los mercenarios.

– Entremos, mi instinto me dice que algo malo sucede aquí. –

Los tres aliados bajaron hasta el bar, encontrándose con las cenizas de muchos inocentes calcinados; Arachne avanzó para investigar, viendo a Khalil frente a un hombre trajeado que rogaba por piedad.

– ¡Perdóname! ¡Yo no hice nada! –

Faez terminó por atravesarle el corazón con magia de luz al hombre, haciendo que quedara inmóvil en el suelo.

– ¿Están viendo esto? –

– Sí, no puedo creer que él haga algo así. –

Sin esperar, las paredes fueron destrozadas por la fuerza bruta de un rinoceronte molesto, tomando a Khalil de la cara y corriendo con el cuerpo de Faez al frente, destruyendo el concreto con suma facilidad.

– ¡El verdadero Khalil no asesina inocentes! –

Sarvik terminó estrellando el cuerpo del impostor por todos lados, furioso y frustrado; el cuerpo de Faez empezó a desvanecerse por cada golpe que recibía, volviéndose una masa gelatinosa que escurría entre las manos del rinoceronte.

– ¿Qué? ¿Un Golem? –

El Cazador, sorprendido, se acercó de inmediato a la arcilla que había escurrido del cuerpo del Khalil impostor.

– ¿Qué es eso, jefe? –

– Parece vómito. –

El Cazador, sin decir una palabra, tocó los restos de arcilla, provocando náuseas a sus dos aliados; probando un poco de la arcilla, El Cazador sabía que algo extraño sucedía.

– Esto es hechicería de muy alto nivel. –

– ¿Cómo sabes eso? –

– Solo he visto Golems dos veces en mi vida, son el pináculo de la magia de Apoyo. –

– ¿Y qué son exactamente? –

– Normalmente son solo muñecos que toman la apariencia de personas, pero este incluso podía usar su magia. –

De repente, un ejército de Golems salieron del suelo, tomando por sorpresa a los aliados; todos los muñecos de arcilla tomaron la forma de un Nix que ellos no parecían conocer.

– ¿Por qué están estropeando mi plan, mercenarios? –

La figura de Qin Shi los hizo ponerse en alerta, sabiendo que algo no cuadraba.

– Estamos del mismo lado. –

– ¿De qué hablas? –

– De Khalil, por supuesto. –

– Pero eres un Nix, ¿no es así? ¿Por qué le meterías el pie a quien una vez lo fue? –

– Porque no lo soporto. –

Los Golems se reunieron en uno solo, dejando ver a una réplica realista del Nix de la arcilla.

– Es tan soberbio que se inscribió a las pruebas Bastet, ¡Sin siquiera ser un Nix! –

– Pero están abiertas a todo público, ¿No? –

– Sí, pero él no merece ser un Bastet, solo es un niño que quiere probar su fuerza. –

– Es lo mismo que pareces estar haciendo. –

Sarvik, defendiendo al hijo de Edward, se puso en contra de Qin Shi; sin embargo, Arachne lo detuvo antes de que atacara.

Sin lugar en ningún ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora