Spider-Man and Scarlet Witch: Secret Wars

Colmillos y Arañas

La Familia Parker se encontraba reunida en su penthouse, descansando después de todos los acontecimientos recientes con el Duende Verde y de haber regresado del funeral de la mamá de Miles, quien decidio dejar un rato el manto de Spider-Boy para recuperarse de sus heridas emocionales causadas por la muerte de su madre. Pietro y Lorna tambien se encontraban allí. Pietro junto con Peter se encontraban trabajando en las reparaciones de las ventanas del penthouse destrozadas por el ataque inesperado del Duende Verde, mientras que los niños jugaban con su hermanito Tommy, y  Wanda, Teresa y Lorna charlaban entre si.

-Es la segunda vez en el mes que atacan la compañia.-Se quejaba Peter, mientras que seguía reparando las ventanas del penthouse.-Sin duda alguna que voy a demandar a todo aquel que vuelva a atacar la compañía con una multa de una cantidad de dinero increíble.

-Sin duda alguna que tienes una mala suerte con tu compañía.-Dijo Pietro con una pequeña sonrisa en su rostro, al mismo tiempo que terminaba de reparar una de las ventanas del penthouse, al mismo tiempo que Peter lo hacia con otra y suspiraba levemente.-La suerte Parker en su mayor expresión, sin duda alguna que tu suerte es una mierda.

-Pietro....-Regaño Teresa, al mismo tiempo que le daba un codazo en el hombro a su novio. Pietro se encogio de hombros levemente, al mismo tiempo que dejaba el martillo en la mesa.-Pero en algo tienes razón, es demasiada mala suerte para que en apenas un mes, el Penthouse haya sido atacado en dos ocasiones, sin duda alguna hay que mejorar la seguridad del lugar. 

-Si, comenzare a trabajar en ello.-Dijo Peter, terminando de reparar la ventana por completo y dejando la herramienta en la mesa y luego volviendo a reunirse con su familia.-Debo mejorar la seguridad del penthouse para que ninguno de los ataques ocurridos vuelva a pasar.

-Si, creo que es bueno que papá mejore la seguridad de casa.-Dijo Ben, el niño se veía más recuperado de la pierna y en mejor estado de forma. A su lado se encontraba Tommy, que seguía usando la máscara de lana de Spider-Man y jugaba con sus peluches alegremente.-Después de todo lo que ha pasado, es mejor tener mucha más seguridad para ese tipo de casos.

-Si, mi amor, tu padre va a trabajar muy duro para hacer más seguro el Penthouse y evitar más ataques, además de que tambien tendre que poner lo mejor de mi para que eso no vuelva a pasar.-Dijo Wanda, mientras le daba una pequeña sonrisa a su hijo. Peter asintio con la cabeza.

-No tienes que preocuparte de eso sola, mamá, ya hemos superado experiencias más fuertes, aunque no queremos que le pase algo a la familia.-Dijo Ben con una pequeña sonrisa, diciéndole a su madre que no lidiaria con eso sola y que lo harian todos juntos como familia. 

-Sinceramente, lamento que Pietro y yo no hayamos estado con ustedes.-Dijo Lorna. 

-Fue desafortunado que esa misión ocurriera y que en el mismo momento en el que nos encontrabamos haciendola, atacara ese tipo.-Dijo Pietro.

-No tienen que preocuparse.-Dijo Mayday con una pequeña sonrisa de oreja a oreja en su rostro.-Hubieran visto como al otro tipo.

-Bueno.. ¿y que hacemos ahora?.-Dijo Teresa a toda la familia, quienes se quedaron pensativos, ya que por los momentos no sabian que hacer y pensaban en que podrían hacer para pasar tiempo en familia.-Yo digo que deberíamos hacer algo para pasar tiempo en familia o algo así, después de todo lo que ha pasado, sera mejor aprovechar los momentos de paz que tengamos, porque con nuestra suerte ,en cualquier momento tendremos que enfrentar a un nuevo enemigo o algo así, así que hay que aprovechar la tranquilidad y paz que logremos tener. 

En algo tenía razón Teresa y era que tenian que aprovechar los momentos en paz y tranquilidad que pudieran pasar como familia, porque en cualquier momento aparecería una nueva amenaza a la que tendrian que enfrentar y su tiempo de paz se acabaria, era por eso que tenían que pasar tiempo en familia lo máximo posible para aprovecharlo antes de que una nueva amenaza apareciera y impidiese que pasaran tiempo en familia como se debía y como les gustaría pasar a a ellos. Todos le dieron la razón a Teresa.