Habían pasado algunos meses. Me llevaba bastante bien con el príncipe Corvus, aunque él no paraba de hablar acerca de su hermano mayor.
El hermano de Corvus, el príncipe Jakob, era mayor que él por cinco años. Tal vez tenía alrededor de la edad de Koshar y Adler, o un poco mayor.
Aunque Corvus no paraba de decir que haría de su hermano un rey.
En este tiempo había comprendido una cosa: Corvus odia a su padre.
Podría decir que el rey del Norte no era una buena persona, ¿se lo merecía? Tal vez...
Corvus me había demostrado que no era del tipo que guardaba rencor por nada, había comenzado a llevarse bien con Adler a pesar de que él casi le arranca sus brazos en una de sus lecciones.
Finch y Robin también parecían entusiasmados con las clases que Corvus les daba. Y aunque Adler lo negase, él también parecía entusiasmado con las clases de Corvus.
Bueno, al menos eso me daba una idea. Algo que haría realidad una vez que tuviese mi propio territorio en el Imperio.
Ahora mismo estaba en la casa de Cristal, veía como mi pequeño hermano practicaba la espada junto a Landre Jr.
- ¿Cree que podré ser igual de bueno que usted?—preguntó Robb a Landre
- Si te esfuerzas, tal vez incluso logres superarme—sonrió Landre—trata de ser mejor que yo, la princesa necesitará protección...
No necesito protección, pero decidí sonreír en lugar de decir eso.
- Oh, ser protegida por mi hermano menor sería todo un honor—sonreí al pequeño Robb
La sonrisa de Robb brillaba cuando dije aquello. Y no pude evitar sonreír.
Cuando ambos terminaron, se acercaron a nosotros a tomar agua. Adler volvía en su versión ave mientras Robin servía agua para todos y Finch terminaba de servir bocadillos.
- Princesa, ¿Hay alguien que llame su atención?—preguntó mi nana
- ¿A qué se refiere, nana?—pregunté
- Bueno, pronto cumplirá cierta edad donde los chicos comenzarán a parecerle... atractivos—sonrió mi nana
Ya sabía a lo que se refería. Aunque mi edad mental era bastante elevada a mi edad biológica, me interesaban los hombres. Aunque las hormonas de mi cuerpo aún no aparecían para hacerme pensar en ellos.
Además, a mi nana no le atraían los hombres... ¿o si?
- ¿Lo dice por que debo casarme a cierta edad?—cuestioné
- Lo digo porque usted sabe que los nobles están proponiendo a sus hijos como candidatos a un compromiso—sonrió mi nana mientras cepillaba mi cabello
Si, estaba al tanto de ello. Algunos nobles insinuaban a su hijo o a su sobrino para volverlo mi prometido, supongo que era una manera de conseguir el favor de mi padre.
- ¿Prometido?—preguntó Robb
- Significa que la princesa algún día se casará—sonrió mi nana
- Pero... eso significa que ya no estaremos juntos—dijo Robb con un rostro lleno de angustia—no pueden... ¡No pueden llevarse a mi hermana!
- Robb, ya te he dicho que la princesa no es tu hermana—suspiró nana Sophia
- Esta bien, nana. Robb puede seguir llamándome de esa forma—reí
- Nadie es digno de mi hermana—siguió Robb
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Reencarné como la hermana de un idiota
FanficSiempre había leído historias de reencarnación. Y tengo una imaginación bastante loca con respecto a las historias que leo. Sobre todo cuando me siento frustrada de un personaje, tengo ganas de entrar a un libro y golpearlo yo misma. Mi novela favor...