Reencarné como la hermana de un idiota

Capitulo 24: Rosa de sangre (1)

Mi tío y yo nos sentamos en el pasto. Mi tío me sonreía animadamente dándome una pequeña palmada en mi espalda.

- Tu madre era mi hermana mayor, era mayor que yo por dos años—comenzó mi tío—ambos éramos hijos del Emperador del Imperio Soliel... y de su quinta concubina

- Pff

¿Qué? ¿Quinta?

De haber estado bebiendo algo, es posible que lo escupiese todo y casi me ahogaría...

- ¿Sorprendida?—pregunto mi tío con una sonrisa—mi progenitor tenía seis concubinas, algunas murieron y otras estaban por ahí... cof—mi tío soltó una pequeña tos fingida—continuemos...

«Mi madre pertenecía a la misma tribu nómada que la madre del primer Emperador de Soliel, y dado que mi progenitor deseaba una mujer de esa tribu para tener un hijo "del mismo calibre" que el primer Emperador... ella se convirtió en su concubina. No era una sangre pura de la tribu, pero era respetada. Ella decidió proteger a su gente de esa manera»

«Tiempo después, mi querida hermana mayor nació... Roux Amelie de Soliel, la tercera hija del Emperador de Soliel y la séptima de sus hijos. Dos años después, nací yo, Marcel Dungas de Soliel... el noveno hijo del Emperador, y sexto varón. Nuestra madre nos dio un nombre y nuestro padre el otro. Esos dias eran divertidos y sin preocupaciones. Ambos éramos bastante mimados... nuestra madre nos cuidó y educó... hasta el día de su muerte, siguió amándonos...»

«Y mi estupido progenitor enfermó dejando a la Emperatriz a cargo...»

«Mi hermana me envió junto a la gente de nuestra tribu un tiempo hasta que fuese lo suficientemente fuerte... o al menos eso hubiese querido, tres años después, mi padre murió y me ordenaron regresar. Cuando regresé, mi hermana ya no sonreía ni tenía esa brillante mirada... era como si toda su vida se hubiese esfumado...»

«"Baja la cabeza, no sobresalgas... finge ser menos inteligente y capaz que los hijos de la Emperatriz"...»

«Las palabras de mi hermana me habían confundido, ella que siempre me había pedido resaltar junto a ella para ganar el favor de nuestro padre hacia nuestra madre... pero obedecí sin dudar ni un solo segundo. Entonces mi hermana me enseñó todo lo que ella había aprendido en el tiempo que estuvimos alejados... ella aprendió a espiar, aprendió a fabricar venenos y sus curas... aprendió a asesinar sin siquiera dudarlo»

Ahogué un grito mientras cubría mi boca. Mi madre... la madre que yo conocí había sido muy amable, demasiado gentil y linda.

¿En verdad hablaba de la misma persona?

«Decía que debía de cuidarme la espalda y no confiar en nadie más que en ella... y así lo hice»

«Mi hermana fue tratada como un soldado. Mi madre nos había enseñado a defendernos cuando éramos niños, nuestra gente tiene talento para el manejo de las espadas y, afortunadamente, nosotros lo heredamos. Así que, mi hermana sobrevivió a aquello... hasta ese día...»

Mi tío me observó antes de dar un suspiro. Era como si estuviese un poco preocupado de hacer enojar a mi madre pese a que ella ya no estaba.

«Mi hermana, tu madre, regresó al castillo victoriosa después de derrotar una pequeña rebelión contra el Imperio... y el príncipe heredero decidió llevarla con él a la casa de campo. Éramos medios hermanos, pero eso no le parecía a Berja... él nos trataba como simples plebeyos»

Mi tío soltó una risita sarcástica antes de sonreír.

«Mi hermana solo tenía que resguardar su seguridad... pero ese día tal vez ella ya estaba de mal humor. Estaba cansada y odiaba todo... había asesinado a tantos que dejó de llevar la cuenta. Y entonces... escuchó unos gritos desde el interior de la habitación del príncipe heredero, quien sería coronado Emperador en una semana. Ella entró sin siquiera tocar y vio una escena tan desagradable...»