Capítulo 93: Debut (3)

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Voltee a ver a la persona que me preguntaba. Las fracciones femeninas habían desaparecido por completo dando paso a un joven bastante apuesto, aunque un poco delgado.

-    Príncipe Corvus—saludé con una sonrisa ligera

-    Felicidades por su debut, princesa Brithania—dijo Corvus dando una reverencia—a mi hermano le hubiese encantado asistir, pero está algo ocupado.

-    Lo he de suponer, ser un rey debe ser agotador—dije—Robb, gracias por el baile. Ahora bailaré con Corvus...

-    Está bien, hermana—asintió Robb mientras entregaba mi mano a Corvus—por favor, asegúrese de no dejar en vergüenza a mi hermana

-    Lo haré—dijo Corvus—quiero decir, no haré nada para avergonzar a su hermana

Robb frunció el ceño, pero terminó por alejarse.

-    Creo que no le caigo bien a tu hermano—dijo Corvus mientras nos dirigíamos a la pista

-    Robb es un buen chico—dije con una sonrisa—no te preocupes, él no te lastimaría.

-    No por ahora, y dudo mucho que lo haga directamente—suspiró—tal vez ustedes dos no compartan sangre, pero él adaptó demasiado de tu familia. La mirada que tiene es la misma que la de tu padre y sus gestos se parecen a los de tus tíos.

-    ¿Eso crees?—dije con una sonrisa divertida

-    No tengo dudas de ello, Thania—dijo Corvus—mi hermano en verdad quería venir y presentar sus respetos tanto a ti como a tus tíos, en verdad nos ayudaron mucho.

-    Está bien—sonreí—gracias por venir a mi debut, Corvus.

-    ¿De qué otra manera demostraríamos la buena relación que tenemos?—preguntó Corvus—mi hermano o yo asistiremos a cada evento importante mientras tú estés presente, nuestra alianza es contigo, no con el príncipe Sovieshu.

Me quedé en silencio viendo a Corvus, puede que hayamos intentado utilizarnos el uno al otro.

Una suave sonrisa se asomó por mis labios.

-    Está bien—dije—no te culpo por lo que pasó. Aún duele que mi nana no esté, pero agradezco que intentes que tengamos una buena relación. Tenemos una alianza después de todo.

Corvus soltó un pequeño sollozo haciendo que yo riera.

-    No llores aquí, Corvus—dije con una sonrisa

-    No estoy llorando—dijo con una suave voz

Me limité a sonreír.

-    Sí, claro—susurré mientras veía una silenciosa lágrima deslizarse por la mejilla de Corvus

Cuando el baile terminó me guió directamente con tío Mark, quien me esperaba para poder bailar conmigo.

Corvus comenzó a hablar con tío Elijah mientras pude ver que presentaban a tia Franie.

-    Te ves contenta—dijo tío Mark—¿la estás pasando bien?

-    Bastante, tío—sonreí—no ha habido ningún inconveniente. No alguien amenazando mi vida, nadie intentando derramar una bebida en mi vestido. Se siente demasiado tranquilo que temo que haya algo preparado para mi.

-    Mientras estemos aquí no hay nada que temer—rió tío Mark— ¿Quién sería tan estúpido como para intentar algo? Quién se atreva a intentar algo en contra de ti simplemente puede morir gritando.

Reencarné como la hermana de un idiotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora