"Blancanieves"

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Acuerdense que en los fanfics uno se puede tomar la libertad de editar e imaginar situaciones factibles y no factibles. Entonces, acá digamosle que Camila no es como se nos ha mostrado, es decir, digamos que Camila hasta cierta edad es "fea"...
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Era el cumpleaños número 7 de la pequeña Camila, sus padres le habían armado un cumpleaños bonito, lleno de decoraciones de las princesas de Disney, las favoritas de Camila. Los nenes iban y venían, la comida era abundante y todo era un típico cumpleaños infantil. Cami, estaba disfrazada de Blancanieves, su princesa favorita, y Armando, a petición de su hija, se había disfrazado del príncipe azul, quien rescata a Blancanieves. Betty era la reina, pero según las palabras de Camila "era una reina buena y no mala".

Luego de unos minutos de empezar el cumpleaños, llegan los abuelos paternos, Margarita y Roberto. La pequeña al verlos se acerca entusiasmada.

-Abuelita! Abuelito! Que lindo que hayan venido!- les dijo alegre la pequeña.

-Cómo nos íbamos a perder de tu cumpleañitos?- le dice Roberto, dulce.

-Pero a ver, de quién estás disfrazada?- le dice Margarita jugando.

-De Blancanieves, mi princesa favorita, mi papi es mi príncipe y mi mami es la reina pero buena!- dice dando vueltas con su vestido de blancanieves.

-Más que de blancanieves, será negranieves- dice sin pensar Margarita. Roberto la miró mal y Cami se quedó fría, estática.

-Por qué me dices eso, abuelita?- le dice triste la niña.

-Es que...- fue interrumpida.

-Hola mamá, hola papá- los saluda Armando. Ve a su pequeña y la ve con los ojos aguados, se acerca y su niña pide upa.- Qué pasó? Ey mi niña, mi princesa qué pasa?- dijo sintiendo su cuello húmedo, ya que la pequeña lo había escondido ahí.

-La abuela dice que soy la negranieves- dijo hipando. Armando se voltea estupefacto y abrazando más fuerte a su pequeña le dice a su madre.

-No te permito que le digas así a mí hija, tú podrás ser mi madre, pero si le haces daño a los seres más importantes de mí vida, que son mi esposa y mi hija, me olvido que lo eres. No tienes ningún derecho de ofender y hacer llorar a mí hija, arruinandole la ilusión y su cumpleaños.- le dijo duramente Armando.

-Hijo...es que...- Margarita no sabía que decir.

-Es que nada. No te permito que te dirijas a ella. Si no les importa, les pido que se marchen, ya que mi hija debe disfrutar de su cumpleaños que con tanta ilusión esperó y deseó todo lo que hay aquí.- les abrió la puerta.

-Armando no creo que nos debas de echar- le dice Roberto mirándolo.

-Les dejo la puerta abierta. Ahora voy a la habitación de mi hija a tranquilizarla y cuando bajemos espero que no estén aquí. Buenas tardes.- y con su hija en brazos que seguía hipando en su cuello, subió las escaleras y se dirigió a la habitación de su niña. La dejó en su cama y vió como su carita estaba roja.-Pero princesa! No llores, aquí está tu príncipe que te ama para protegerte! No hay razón para llorar! Quiero que sepas que eres hermosa, una princesa, mi blancanieves, que nadie te haga dudar de eso, me escuchas? Y si te hacen dudar, dime y yo te voy a decir todo lo hermosa que eres...ya no llores- secándole las lágrimas con sus manos- hay que disfrutar del cumple!

-Papi, gracias por ser mí príncipe y por haberte disfrazado por mí petición- le dijo sacando una sonrisa.

-De nada princesa, y si tú me pides algo, yo lo hago! Yo soy capaz de hacer todo lo que tú me pidas jaja- le dijo besando su frente.

Luego de decirle eso, se abre la puerta, entrando la mamá reina.

-Ey, qué pasa para que estén aquí? Tus amiguitos preguntan por tí- le dice mientras le acomoda algunas mechas del peinado.

-Nada mi amor, luego te cuento. Ahora princesa vaya a jugar con sus amiguitos que con su mamá ya bajamos.- le dijo a la pequeña.

-Si papi!- los abraza y se va al jardín de su casa, dejando en la habitación a ambos padres.

-Qué sucedió?- le dijo mientras le peinaba el cabello a un costado.

-Mis padres fueron imprudentes y le dijeron algo feo a Cami, lloró y les pedí que se marchen, luego del cumple, en la noche te cuento bien... no quiero que te amargues- le dijo mientras le daba un beso agarrándola de la cintura- Mmm que reina más hermosa que tengo-

-Y yo que príncipe más guapo que tengo!- se besan, se mimosean y van al cumpleaños.

Más momentos, fotos, repartición de comidas, juegos de los pequeños, hasta que es el momento de la torta. La sientan en la punta de la mesa, y cada padre está en un lado de la pequeña, quien estaba alusinada viendo las velas, bengalas y la torta tan linda y grande que tenía. Al frente tenía el número 7, el número de su edad, arriba tenía su nombre en letra cursiva y la decoración era un castillo con todas las princesas de Disney.

 Al frente tenía el número 7, el número de su edad, arriba tenía su nombre en letra cursiva y la decoración era un castillo con todas las princesas de Disney

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Le cantan el feliz cumpleaños, pide los deseos y todos aplauden.

-Que bonita la torta mami!- le dijo la pequeña mientras la abrazaba.

-Sii, es muy bonita, pero quien tiene la mayor parte de los créditos es tu papá que se mató buscando a alguien que hiciese exactamente lo que querías.- le dice Betty

-Entonces gracias a ambos!- y dando un grito- Tengo a los mejores padres del mundo!- todos rieron y los padres la abrazaron.

-Te amamos mi princesa, feliz cumpleaños...eres lo más sagrado, junto a mamá, que tengo en mí vida.- le besa la cabeza mientras la apapacha.

El cumpleaños va transcurriendo normal hasta que finaliza. Cada uno se baña, se pone su pijama y acuestan a la niña.

-Gracias, ha sido el mejor día de mí vida! Los amo- les dice acurrucada en la cama, mientras sus ojos se van cerrando.

-Y nosotros te amamos a tí, descansa mi amor...- ambos le dan el beso de buenas noches y se van a su habitación.

Ya en la intimidad de su cama, Armando le cuenta lo sucedido, Betty se indigna pero Armando le aclaró que no la va a obligar ni a ella ni a Camila a relacionarse con ellos, cuando han sido imprudentes varias veces, para él, lo sagrado eran ellas, el resto no importaba, y si debía dejar de hablar con sus padres porque tratan mal a su familia, lo haría, porque las amaba.

FIN

𝓞𝓷𝓮 𝓢𝓱𝓸𝓽𝓼 𝓐𝓻𝓶𝓮𝓽𝓽𝔂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora