Capitulo 5

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~Si el conde te muerde...Estas maldita~

Luego de que ese extraño muchacho de ojos completamente negros me diera la llave la observe... No entiendo que es lo que pasa... Él me llamo Irina, y dijo que yo sabía para qué era esta llave, ahora mismo lo único que se me ocurre es la puerta cerrada de la tercer planta, sin embargo no estoy del todo segura ¿Debería intentarlo?

— ¿Mamá? —La dulce voz de Jane me saco de mis pensamientos... No, no debería de tratar es un suicidio hacer eso y yo ahora mismo no puedo permitirme morir.

—Jane tengo que pedirte que nunca le digas a nadie sobre lo que acabas de ver, ¿Si? —Le pregunte con una sonrisa tranquilizadora, ella solo asintió enérgicamente.

El resto del día fue bastante tranquilo, observe las lecciones que Áurea le impartía a Jane, es una buena maestra, muy paciente y trata a Jane con mucha delicadeza.

Ellas están a unos metros de mi, de hecho estamos en el comedor ya que al parecer es más conveniente estudiar sobre esta mesa al ser más espaciosa, otro punto fuerte es que de esta manera no molestaremos a Dracula... Bien digamos que solo el segundo importa, daba lo mismo si ella estudiaba en el sótano o en el comedor siempre y cuando no molestemos a el conde.

—Ahora sigue su clase de baile—Dijo y me sobresalte, estaba tan ensimismada en su aspecto al impartir la clase de escritura que me quede embelesada por su belleza.

Áurea nos hizo una señal para seguirla, caminamos por el pasillo, más allá del comedor hasta llegar a otro lugar donde habían unas grandes puertas dobles, tan grandes como las de la entrada, Áurea las empujo y al entrar pude ver un hermoso salón de baile... Es perfecto, no tengo más que decir, desde las elegantes columnas hasta el suelo de mármol pulido en el cual puedo ver mi reflejo.

—Veo que llego a tiempo—Dijo Dracula detrás de nosotros, un escalofrió recorrió mi espalda, su voz masculina pero también suave es algo a lo que es difícil acostumbrarse— ¿Qué esperamos? Caminen—dijo y de inmediato las tres entramos al lugar, Dracula al estar dentro recorrió el lugar con la mirada—Ah pasado un tiempo...—Susurro para sí mismo aun que fue demasiado audible, luego miro a Áurea—Si eres tan amable—Dijo con cortesía aun que no comprendía a que se refería, sin embargo ella si pareció entender ya que de inmediato salió del lugar.

Segundos después un suave vals comenzó a sonar resonando por todo el lugar.

—Me permite—Pregunto el flamante conde extendiendo una de sus manos como todo un ilustre caballero, la tome y con delicadeza se acerco a mí, estúpido corazón deja de acelerarte cada vez que se acerca.

Rodeo mi cintura con uno de sus brazos, coloco mi mano derecha sobre su hombro y la izquierda  la entrelazo con la suya para después comenzar a movernos por el lugar.

—Si tu corazón late de esa manera me es difícil contener mi sed—Dijo mirándome a los ojos, tratando de buscar mi mirada, cosa que no le permitiré ya que cada vez que sus ojos se encuentran con los míos siento como si mi alma se quemara... Literalmente, él me asusta.

Jane nos mira con recelo, como si quisiera intervenir pero ella es más que consiente de su lugar.

—Tú... ¿Por qué no me miras? —Pregunto ahora algo molesto.

—No me gusta...—Lo mire a los ojos tal y como quiso—Su mirada... Es penetrante, siento como si no tuviera secretos cuando me ve eso para ser sincera... Me repugna.

Dracula detuvo nuestro baile, se alejo de mí y me examino de arriba abajo.

—Hacia ya mucho tiempo que nadie me habla de esa manera—Se acerco a mí tomando y mentón y levantándolo para que nuestros ojos se encuentren una vez más—Me gustas—Su rostro fue ocupado por una sonrisa sincera y alegre... ¿Qué es esa frase?

Dracula quiere una noviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora