Dracula quiere una novia

Capitulo: 50.

-Sentencia-

Kilian ¿Tú realmente me esperaste todos estos siglos? Realmente eres una persona con la que se puede contar.

—Disculpen—Dracula golpeo la puerta suavemente.

La expresión de alegría que tenía en su cara se desvaneció y fue sustituida por una de irritación.

—Se va a enterar de quien soy...—mientras se dirigía a la puerta quiso decir algo más pero sujete la manga de su saco y la sostuve con fuerza, él se giro mirando mi mano y sonrió— ¿Dígame?

—Quiero hablar contigo y no puede pasar de hoy.

—Por supuesto.

Lo solté, llego hasta la puerta y sin esperar a nada su mano impacto en la cara de Dracula... mis ojos se abrieron y quede atónita, Dracula cayó al suelo y tenía toda la palma de su mano cubriendo se la cara con los dedos abiertos, era evidente que le dolía.

—No creo haberte educado tan mal como para que te atrevieras a interrumpirme mientras estoy hablando con alguien—Kilian quien luce como mínimo diez años menor que Dracula lo sujeto del cuello de la camisa, sus colmillos son visibles y Dracula parece no tener expresión alguna para su padre—¿Ves? No eres más que una molestia, gracias por dirigir todo hasta ahora pero ya no te necesito, espero con ansias el día de tu sentencia.

Entonces recordé que ese era el tema principal para hablar con Kilian, moví las sabanas a un lado y puse mis pies en el suelo, cuando trate de levantarme mis piernas temblaron y al suelo, el lado derecho de mi cuerpo fue el que recibió el impacto.

—Ahh...—apoye mis palmas en el suelo y trata de levantarme pero no podía, estoy tan débil.

—Disculpe—vi la mano de Kilian—La ayudare a levantarse.

Cuando levante mi rostro pude ver su sonrisa, entiendo... en esto te convertiste por mi culpa, créeme que lo siento mucho. Golpee su mano apartándola y él pareció realmente confundido por un momento, su expresión se debatió entre la angustia y la sorpresa.

—Me gustaría que mi novio me ayudara a levantarme.

La feroz mirada de Kilian se dirigió a Dracula, él ya está parado junto a nosotros y con delicadeza tomo mi mano y paso su brazo por mi cintura ayudándome a levantarme.

—Gracias—me sentó en la cama.

—Padre venia a informarte de nuestra presencia, ya que dijiste que no deseabas esperarnos pensé que te complacería saber el momento de nuestra llegada.

Un extremadamente cortes Dracula, eso es algo que no puedo ver.

—Bien, lo has hecho ahora solo retirare.

Paso una mirada por mí, luego miro a su padre y asintió. No tardo en irse cerrando la puerta detrás de sí.

—Kilian ¿Por qué vas a matar al primer consejo? Ellos fueron quien han mantenido el orden hasta ahora ¿No te parece que eso es demasiado arrogante de tu parte? Yo no recuerdo que Kilian fuera así de desagradecido.

Kilian se arrodillo y como si quisiera jurar su lealtad hacia mí se puso una mano en el pecho, su sonrisa galante apareció una vez más.

—Ellos no son importantes mi princesa, cada uno tiene algo que complementa el equipo precisamente fueron escogidos por sus singulares características, para poder establecer un gobierno apto hasta que el verdadero gobernante pudiera hacerlo—su ojos se enfocaron en mi—Usted por supuesto.

— ¿Yo? —Mi voz se escucho como si estuviera burlándome de él.

—Por supuesto usted princesa Irina, el señor Mile y yo le prometimos que la haríamos la reina más grande de todas—luce bastante complacido con sus declaraciones—Es por eso que necesitábamos el mejor equipo pero ahora que está aquí no son importantes, piense en ellos como los peones en un tablero de ajedrez.