Dracula quiere una novia

Capitulo 31.

-El tercer chico en esta vida-

(Esa canción es la que utilice para escribir el capitulo espero que les guste)

Una bruja... que se llama Mile ¿Podría ser que mi antepasado tuviera esas inclinaciones? ¡¡No!! El Mile de mis sueños es un hombre ¡Yo lo vi! Aun que nunca muestra su cara.

¿Qué voy a hacer? No tengo idea de dónde empezar a buscar ¡Un momento! El demonio, si el debe de saber dónde diablos encontrar a esa bruja, si es tan poderoso como dice tiene que saberlo, es imposible que no lo sepa.

— ¿Y si lose? —Esto es tan ridículo que ya no me sorprende.

—Tenias razón Jane va a morir—solo tuve que parpadear y él estaba delante de mí.

—Por supuesto, yo nunca me equivoco. —Comenzó a observar la cara de Jane.

—Esta vez sí, hay otra posibilidad de salvarla además de transfórmala. —Creo que mi tono es más egocéntrico de lo que parece.

—No, no la hay. —Me aseguro.

— ¡Sí! Una bruja llamada Mile podría salvarla.

Él me miro divertido y cubrió su boca para evitar reírse.

—Tonta e ingenua chica, no recuerdo que fueras tan crédula. —Ahora está delante de mí, iba a tocarme, vi claramente como su mano intento delinear el contorno de mi rostro... pero extrañamente solo la alejo.

— ¿Co-comó estas tan seguro de eso? —Me siento muy incómoda, mire sus ojos. La ausencia de algún otro color en ellos es tan atrapante, casi hipnotizante ¿Cómo es posible que sean completamente negros?

—Así son los ojos de los demonios, ¿Tú no crees que puedes conocer a una persona por ellos? Bueno espero que te quede claro lo que hay en mi interior—una de las comisuras de sus labios se curvo. —Y sobre la bruja, ella no te ayudara. Es mi hermana y detesta a Irina. Qué problema—se mofo de mí.

— ¡Entonces si sabes cómo encontrarla! —En ese momento no me importaron sus afirmaciones o algo parecido, me sentía completa al saber que podía ver a esa bruja, tenía la primera parte del rompecabezas hecha.

—Tan terca...—apoyo una mano en su frente y negó con la cabeza—Esa parte tuya nunca cambiara—hablo con seguridad—Bien, te diré donde buscarla pero quiero algo a cambio, la ultima vez te di una llave y aun no buscas a donde pertenece, desprecias mucho mis regalos, por lo que esta vez quiero una recompensa. —Me giño un ojo.

— ¿Qué es lo que quieres? —pregunte levantando la cabeza para ver como el brillo en sus ojos aumentaba, es extraño para que en ellos prevalezca el negro aun así tienen brillo.

—Un beso de la princesa Irina. —Ladeo la cabeza a un lado y relamió sus labios.

Quede en shock unos segundos, su mirada incandescente me mantuvo paralizada, busque los vestigios de una mana broma en su mirar o rasgos pero no fue así, hablaba completamente en serio, respire profundo, una extraña sensación invadió mi estomago ¿Fueron nervios? No estoy segura pero unos segundos después mis pómulos se sintieron acalorados.

—Solo es un beso—aseguro.

Mi cuerpo, mi ser se sentían casi expectantes por eso ¿Qué era lo que trataban de conseguir? No lo sé ya que mi cabeza se negaba rotundamente a esa idea y sin embargo mis manos temblaban de la emoción.

—Veo que tú cuerpo me recuerda—puede que suene estúpido pero hasta el momento tenía mis dudas de si él era el Mile de mis sueños o no pero con esa frase disipo todas mis dudas, hasta el momento había pensado que quizá él era uno de sus amigos. — ¡Diablos! —Hizo un fingido movimiento de frustración con su mano—Arruine la sorpresa, pero es bueno que te des cuenta, yo no iba a decirte, me alegra que te dieras cuenta por ti misma.