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  Sintió la pérdida, cuando él se separó de ella y la observó. —Te amo —le dijo lentamente—. Sabes que estoy loco por ti, desde siempre.

Ella asintió y cerró los ojos. — Vamos a dormir.

Y aunque pareciera complicado de creer, durmieron. Simplemente eso, no hubo sexo, tampoco hizo falta, un vínculo más fuerte los unía. Y si no era amor... Entonces debía ser algo muy próximo a eso, porque ella sentía que volaba.

Cuando nirvana abrió los ojos notó dos cosas: La primera, que Justin la estaba rodeando con sus brazos, y la segunda, que Sarah estaba acurrucada contra ella. Eran un sándwich, pero un lindo sándwich.

La niña alzó la vista y nirvana le indicó que se parara de la cama, ambas se alistaron, antes de salir de la casa Nirvana observó que Justin aún seguía dormido, desactivó su despertador, dormir dos o tres horas más le harían bien. Se acercó a él y le dio un beso en la mejilla.

Sarah no dejaba de mirarla, aun cuando estaban en casa, la niña no le quitaba los ojos de encima. — ¿Qué? —Preguntó Nirvana mirándola—. ¿Qué pasa?

Sarah tapó su boca. —Le diste un beso a papá —dijo con una sonrisita.

Nirvana se alarmó. Si ella mencionaba algo de eso y Chris lo escuchaba... ni siquiera lo quería imaginar. —Bebé —dijo lentamente—. No puedes decir nada de esto, Chris no se puede enterar.

La niña asintió. —Está bien —aceptó con una sonrisa.

Esa noche estaban cenando juntos, Chris había regresado y le había traído regalos. — ¿Y qué hiciste en mi ausencia? —Preguntó él, acariciando su mano—. ¿Salieron a algún lado?

—No —respondió la niña—. Nos quedamos en casa.
Nirvana se sorprendió por su agilidad. Chris observó a la niña con el ceño fruncido pero lo dejó pasar.

Dos meses habían pasado desde el encuentro con Justin, estaban en pleno Junio. Las cosas estaban cambiando. Se había enterado por Lucía que Laura había regresado a la empresa, eso la había hecho sentir más tranquila, porque suponía que Justin estaba más tranquilo.

Chris viajaba más de lo normal, en serio, comprendía que daba conferencias, y participaba en seminarios, pero no era normal que una persona viajara más de cinco veces al mes al interior del país, y también a otros países.

Pero algo mucho más escalofriante la tenía inquieta. Observó lentamente la prueba que tenía en las manos y no sabía porqué pero sus lágrimas se resbalaban por sus ojos.

Estaba embarazada.

Quería contárselo a Chris, pero ni siquiera lo veía. Respiró hondo, se había estado sintiendo mal, pensó que era cualquier cosa, pero luego que su periodo de atrasara, supo que algo no estaba bien.

Estar embarazada le traía muchos recuerdos, malos y buenos, porque una vez estuvo embarazada de Sarah y estaba feliz de tenerla, pero malos, porque su ultimo embarazo había sido fracaso y el detonante de su relación con Justin. A raíz de ese fallido embarazo toda su vida había cambiado, y tenía pánico.... Terror de que las cosas volvieran a cambiar drásticamente.   

Amor Destructivo II (Disponible en físico & PDF) Links en bio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora