Amor Destructivo II (Disponible en físico & PDF) Links en bio.

46.

— ¿Tú hiciste esto? —Le preguntó a la decoradora, la cual se paró a su lado y observó todo con el ceño fruncido. —Me sorprendes —agregó nirvana, sonriendo.

—No, yo no lo hice —respondió ella, mirando el espectáculo con cara de sorpresa.

Lucía se le acercó con Sarah en brazos. — ¡Está hermoso! Todos se están divirtiendo —y al ver la cara de las dos mujeres, frunció el ceño. — ¿Qué pasa? ¿No les agrada el show?

—Yo no lo hice —respondió nirvana. 

Lucía alzó las cejas. — ¡Vaya! ¿Entonces quién lo hizo? —Preguntó, y antes de que nirvana pudiese responder, la música acabó y se escuchó el sonar de una copa. ——Brindo por ti, feliz cumpleaños —dijo Sonia, entrando a la fiesta con un vestido color blanco y el pelo suelto.

Todos levantaron sus copas y brindaron, luego siguieron viendo el espectáculo. Todos sonreían, excepto ella. Todos se divertían excepto ella. — ¿Qué? —Preguntó cuando pudo recuperar la voz. 

Sonia se acercó a ella y le sonrió. — ¿Qué pasa, Nirvana? ¿Tú no brindas por tu esposo? —Preguntó, alzando una ceja.

Ella estampó una falsa sonrisa en su rostro y cuando pensaba contestarle, vio a justin aparecer y sonreírle a todos, él claramente estaba en su propio mundo. — ¡Feliz cumpleaños! —Exclamó Sonia, abrasándolo, él le devolvió el abraso, y Nirvana no se pudo sentir peor.

— ¿Estás bien, preciosa? —Le preguntó justin.

Ella asintió y le tiró un beso, él le sonrió de vuelta y se regresó con los demás. 

—Siento mucho si te incomoda mi presencia, pero cuando recibí la invitación no pude negarme, créeme que traté, pero al final de cuentas justin y yo compartimos mucho tiempo juntos, no podía dejar pasar esto por alto —Dijo Sonia, sonriendo—Y si me disculpas, iré a disfrutar de esta fiesta. 

— ¿Quién la invitó? —Preguntó Nirvana al borde del colapso.

—Creo que Cristóbal lo hizo —respondió Lucía, con el ceño fruncido—. Escuché que el padre de justin conoce a Alonso, desde hace tiempo. 

Nirvana frunció el ceño. —Tú lo sabías ¿Verdad? Preguntó.

Lucía abrió la boca y luego la cerró. — Si —admitió finalmente—. Vi la lista de invitados, pero no pensé que ella vendrá porque su esposo está fuera del país. Lo siento... Pero no te preocupes, estás hermosa, Justin solo tiene ojos para ti y esta fiesta le ha encantado, no te amargues por ella.

Nirvana suspiró con cansancio. —Tienes razón, se lo debo a Justin —respondió lentamente.

El resto de la noche el papá de Justin lo pasó son Sarah, estaba emocionado porque era su primera nieta. Eso la hacía inmensamente feliz. Cuando se conocieron su relación fue mala, ella era la sirvienta y él era el padre que no quería que su hijo echara su futuro a perder por dejar a Sonia y casarse con una simple campesina. ¿Quién iba a decir que al final terminarían agradándose el uno al otro?

Ella y lucía se concentraron en tomar alcohol y reír a carcajadas al escuchar a las personas cantando, incluso la decoradora se unió a ellas, y otros chicas que rondaban entre los 24 o 26. 

No se pudo quejar, al final todo salió bien, Sonia se había juntado con las mujeres estiradas, y ella, ella había disfrutado igual o más que Justin de la fiesta. Cuando todos los invitados se fueron, observó que Sonia rondaba la casa lentamente.

—Creo que pasaré la noche aquí —le dijo al papá de justin, en presencia de todos los familiares que aún quedaban. 

—No hay habitaciones vacías —dijo nirvana demasiado pronto.

Sonia rió irónicamente. — ¿Le negarías pasar la noche a una mujer embarazada que no puede conducir a las tres de la mañana? ¿Tu odio llega hasta tanto? 

Todos miraron a nirvana. Maldijo internamente. Lo había hecho de nuevo. La había dejado como la mala del cuento.