Como te imaginé

Atentado

Thais y Rafael salieron corriendo, cuando abrieron la puerta asustados allí estaba Fernando en el suelo con la niña en brazos, cubriéndola con todo su cuerpo, Rafael se agachó hacia su amigo:

- ¿Estáis bien?

Fernando se levantó a simple vista no tenía nada:

- Alguien disparó.

Thais agarró a la niña con fuerza,casi arrebatándose la de los brazos a Fernando:

- La niña está bien Thais, no nos ha llegado a dar.

- Pero... ¿Quién ha sido?

Rafael intentó tranquilizar la situación:

- Tranquilos, vamos a pasar dentro.

Cuando ya estaban dentro de la casa, Thais llevó a la niña a la cuna, mientras Rafael y Fernando se quedaron a solas:

- No quise decir nada delante de Thais para no preocuparla, pero...

- Se lo que vas ha decir... ha sido Henrique.

- Está loco ese hombre, tenías a la niña en los brazos.

- No creo que haya sido él, es muy cobarde, pero creo saber a quien se lo ha podido mandar.

Samuel y Henrique pararon en un descampado alejado de la casa de Fernando. Cuando frenaron Samuel miró a su jefe, este tenía el semblante tranquilo, Samuel no entendía nada:

- ¿Qué acaba de pasar?

- ¿Crees que me voy a manchar las manos por una persona sin validez?

- Pero...me dijo que...

- Mira, si te dije que lo mataras no era para otra cosa que no fuese probar tu lealtad, no estoy tan loco, se que al primero que buscarían sería a mí.

- Pensé que ...

- No pienses- Soltó una risa burlona- Los voy ha hacer sufrir, van a pagar todo lo que me han hecho, pero de momento no los voy a matar.

Jessica seguía pensando en su cuarto:

- ¿Por qué Samuel le es tan leal a Henrique?, ¿Qué es lo que sabe Henrique de él?, ?Y a quién protege?, tengo que averiguar, tal vez esa sea la única manera de que Gisela se salve de estar con Henrique.

Llegó la noche, mientras cenaban en casa de Fernando, este no paraba de mirar el móvil. Thais hablaba pero Fernando no hacía mucho caso, así que esta cogió su móvil, Fernando la miró, no tenía cara de muchos amigos.

- ¿Me vas ha hacer caso?

- Dame el teléfono, estoy en otras cosas Thais.

- Estamos en la mesa.

- No empieces, no eres mi madre, no eres nadie y tengo muchas cosas en la cabeza como para estar pendiente de tus tonterías.

Fernando la arrebató el móvil de las manos y se fue a su cuarto de malas, cerró la puerta de un portazo. Thais no sabía que decir.

- Te lo dije, déjalo, que tiene muchas cosas en la cabeza, que no está para tonterías, pero tu nada.

- Estás feliz, se te ve, pero no pienses que porque él no me haga caso voy a ir a tus brazos, porque no va a ser así.

- No te quiero cerca, puedes estar tranquila.

Rafael se levantó y se fue a terminar de cenar a la cocina, Thais de mala gana tiró el tenedor al plato:

- Vas a ser mío lo se.

Fernando en su cuarto no sabía que hacer:

- Seguro que has sido tú el del disparo, no me puedo presentar allí, pero mas te vale que ni te la acerques, porque ahí si que te las vas a ver conmigo. Gisela, no puedo estar separado de ti, ahora mas que nunca te necesito aquí.