UNFACTION

CAPITULO 14. Ser Divergente

*Selen*

Aun estoy consternada por la información que me suministra Brad, es claro que no apoya el sistema de las facciones, lo ve como un molde en el que intentan encajarnos a la fuerza de tal manera que el que no logre adaptarse lo desechan vilmente al vertedero, esterilizándolos y controlando los al servicio de la ciudad en trabajos menores mal remunerados. Brad solo es el camarero que ofrece un menú amplio de sustancias para auto engañarse y resistir la mediocridad de sus vidas.

¿Quizá por ello acepté ayudar a Theo de confidente? Prefiero ser medio Osada aunque sea en cubierta que estar desubicada en este cajón desastre llamado Sin Facción.

Debería investigar más afondo este asunto tan sucio que me dejó atisbar Brad. Quizá si colaboro con él en más ocasiones, logre averiguar quién es su fuente en Erudición y a su vez quién está urdiendo el supuesto complot para esquilmar la población de Abandonados.

Si apoyo sus teorías confiará en mí y me mostrará más de su mundo imperfecto y defectuoso.

Repaso al moreno una vez más, es algo que nunca me cansaré de hacer, aunque sé que no tengo posibilidad alguna con él. En el bar de Joe me rechazó claramente, no sé porque pensé que la atracción que siento por él podría ser mutua, pensé que un clavo podría sacar otro clavo, pero nada más lejos de la realidad golpeándome de nuevo con su crudeza. Decido que por hoy tuve demasiada acción y quiero descansar en mi habitación, todo mi mundo estaba tranquilo y seguro a las 3 de la tarde y dos horas más tarde es como si todo se hubiera puesto del revés.

-Brad pensaré en lo que me dijiste.- Me mira fijamente al sentir su nombre en mis labios.

- Solo quiero que sepas que estoy para ti cuando necesites, no hace falta que te deba nada. ¿De acuerdo?- Se sorprende por mis palabras y sus ojos me analizan medio en rendija.

- Está bien, cuento contigo. Pero si te vuelvo a necesitar cobraras tu parte, esto no es Cordialidad. Nadie hace nada por nada.- su tono frío y grave sentencia como una ley física que estoy segura se cumple a rajatabla en esta zona de la ciudad.

Se levanta cuan alto es y me invita a salir por la puerta de su habitación, con gran indiferencia se revisa una mochila negra, preparándola con más material como si se dispusiera de nuevo a salir.

***

Cuando despierto de mi pequeña siesta de 30 minutos, escucho remover cosas por el cuarto y visualizo a Tina ordenando su armario, algo que me preocupa pues solo lo ordena cuando necesita poner en orden su mente.

- ¿Qué ocurre Tina?- cuestiono preocupada.

- Perdona por despertarte.- contesta con algo de congoja, aunque realmente la veo desesperada.

- No te preocupes, solo descansaba un rato.- La intento tranquilizar.

- Es que estoy muy enfadada con Kevin. Tuvimos una discusión y se largo echando chispas.- Sus ojos brillosos denotan que está muy afectada.

- ¡Vaya! Lo siento. Seguro que se le pasa.- Ya sé que los ánimos no sirven de mucho en esta ocasiones, pero que puedo decir, la noto abatida.

- Esta vez no será tan sencillo.- Musita derrotada.

- ¿Tan grave fue?- Cuestiono ya con gran curiosidad pues Tina está angustiada en un gesto que no había percibido en el poco tiempo que la conozco.

- Estoy embarazada Selen.- Confiesa como si fuese la peor condena que se le puede lanzar a una persona. Se sienta a mi lado en la cama y yo me incorporo más para llegar hasta su altura.