Past Lives: Destiny || Hopev «Omegaverse»

XVI

Miraba a Hoseok perplejo, mis ojos abiertos como nunca antes, era la sorpresa que me recorría como si de una serpiente se tratara, deslizándose goretescamente por todo mi cuerpo a la espera de poder decir algo, responder a aquello que acababa de escuchar de su propia boca. Negaba con mi cabeza una y otra vez porque esto era malditamente surrealista y difícil de creer. Cualquiera pensaría que es una historia de algún libro antiguo lo que estaba narrando con tanta familiaridad.

Quizás alguno de sus cuentos, sólo que estos eran de terror o algo por el estilo. Cualquiera pensaría que es una locura, que no tiene sentido ni razón de ser... No hay fundamentos ni nada que los respalde... Yo no podía creer semejante historia... Nadie podría hacerlo.

Si no fuera por las emociones que estaba sintiendo con fuerza en este mismo instante.

Emociones que no eran mías en lo absoluto. Yo no estaba sintiendo esta pena, rabia, impotencia... Yo no estaba sintiendo esta soledad o incluso el deseo vivido de una venganza por algo injusto que hicieron hacía mi. No, no era yo.

Ese era Hoseok.

¿Cómo era posible? ¿Estaba sintiendo lo mismo que Hoseok?

Él se mantenía neutro y sereno en su posición, no había un rastro de expresión en su rostro o algún movimiento de su cuerpo que me dijera que era lo que estaba sintiendo pero yo parecía entenderlo a la perfección, casi como si sus emociones fueran mías también.

Y el tiempo se nos iba como agua entre los dedos en cada confesión que ambos nos hemos hecho, porque el silencio y el miedo nos arrebataba cualquier ápice de tiempo. Porque somos incapaces de reaccionar con naturalidad frente al otro.

Hoseok me miraba casi por la necesidad de hacerlo, no emitiría palabra y tampoco sentía la necesidad de escuchar las mías y en mi caso... Yo solo procesaba toda esa información que Hoseok me transmitió minutos atrás... Él me habló con detalles como había sido ese día y esa noche... Esa última noche en que lo ví. Y todo parecía fresco en mi memoria.

Quería no creerle porque era increíble... Pero dentro de mi corazón algo me gritaba que él me decía la verdad. Y que estaba siendo sincero.

He vivido toda mi vida con mis padres... Y nunca he podido llegar a imaginarlos de esa manera... Pero cada cosa en mi mente se unía como un rompecabezas... Mi padre tratando con furia y descontento a Hoseok y llamándolo traidor.

Pero incluso así... ¿Por qué?

—¿C-Como se supone... Que debo reaccionar a esto?— Pregunté con nerviosismo inundando mis palabras, estaba hasta ligeramente atontado— E-Esto... Lo que te... Hicieron.

Hoseok frente a mi solo era capaz de mirarme con aquellos ojos oscurecidos por la mezcla de emociones y yo seguía negando con la cabeza... ¿Que era todo esto? ¿Cuantas bromas del destino voy a tener que vivir?

—Dime algo Hoseok...— Supliqué en un hilo de voz— ¿Que es todo esto...?

—Es la verdad... La triste verdad detrás de mi huida— Dijo cuando me vió completamente nervioso— ¿Recuerdas ese día? Te dije que volvería... Incluso que te llevaría conmigo porque estaba dispuesto a hacerlo si ellos no me escuchaban...

Entonces empecé a recordar todo muy claramente... Nunca lo iba a olvidar, cuando mi padre me preguntó por qué Hoseok se había ido... Yo no podía decir nada porque le había prometido que no diría nada pero ellos me dijeron que ya sabían donde estaba, que él mismo les había dicho que lo fueran a buscar porque se estaba haciendo oscuro y de noche y él solo estaban curioso por saber por qué se había ido, y yo le creí porque era mi padre... Él me preguntó muchas cosas y yo las respondí creyendo que Hoseok regresaría con la seguridad de mis padres. Regresaría a mi como cada noche.