II

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Ya habíamos terminado de desayunar y a pedido de mi padre, el rey alfa subió a la habitación de descanso a tomar una breve siesta, por último para recuperar las fuerzas que perdió después de una noche en vela cubriendo asuntos reales. Estaba ayudando a lavar lo que ocupamos y a limpiar un poco el castillo. Desde hace ya un buen tiempo en que estoy ayudando a la persona de la limpieza con estas cosas... Es parte de mi enseñanza como omega de la realeza.

No me molesta de todos modos, me gusta ayudar en la casa, en todo lo que pueda, así que decidí terminar lo que estaba haciendo, para luego salir a despejarme. Cerré la llave del agua y sequé mis manos.

-Padre... ¿Puedo ir a dar un paseo por el pueblo?- Pedí con una sonrisa cuando vi que todo estaba en orden- Así aprovecho de ir a buscar las manzanas.

-¿Con quién irás?- Consultó de manera protectora mientras me daba una atenta mirada- Sabes que no me gusta que estés en el pueblo solo.

Fruncí el ceño en respuesta, el pueblo era un lugar seguro, bastante diría yo... Sobre todo para los hijos del rey.

-Sabes que el pueblo es un lugar seguro, papá...- Le respondí mientras me cruzaba de brazos- He andado solo por los alrededores con frecuencia... Y ya no hay enemistad con los reinos vecinos como para necesitar protección.

-Uno nunca sabe...

Dejé escapar un leve suspiro y corrí a los brazos de mi padre quien sin dudar me atrapó, sentí su aroma tan característico... Vainilla y arándanos... Que se complementaba tan bien con el olor a chocolate y menta del rey.

-No pasará nada... Lo prometo- Dije mientras dejaba un beso en la mejilla del omega mayor- Iré y volveré rápido.

Mi padre me miró un poco con desconfianza y podía sentir como lo pensaba con lujo de detalles pero al fin y al cabo asintió.

-Si no vuelves en tres horas... Le diré a tu hermano que te busque- Fue su última advertencia.

Asentí efusivamente con mi cabeza mientras iba dando pequeños saltitos a la sala en donde busqué mi pequeña capa de paseo y me la enganche por alrededor de mí cuello.

Con rapidez busqué también aquella cesta de mimbre tan bonita que Jimin me había regalado con tanto esmero. Él mismo la había hecho con sus propias manos, él sabía que me gustaba ir a sacar manzanas, así que aprecié mucho aquel regalo.

La sostuve en mi antebrazo con amor y fui corriendo a la salida, no sin antes despedirme con un fuerte grito de mi padre, quién me regañó por los modales. Reí divertido.

Crucé el extenso camino antes de llegar a las grandes puertas hacía la entrada del castillo... Creo que lo único tedioso de vivir en un castillo tan grande, son los extensos caminos que hay que recorrer para llegar de un lugar otro... Pero siendo el pequeño omega más ágil y veloz del lugar, eso no era un problema para mi y rápidamente llegué al portón real donde muchos hombres subordinados del rey me saludaron con una gran sonrisa.

-Joven, Taehyung ¿Va en busca de frutas nuevamente?- Preguntó uno quien traía consigo una gran espada, quizás él estaba haciendo guardia.

-¡Si!- Contesté animado- Iré a buscar manzanas... Papá me dijo que aquellos manzanos ya dieron frutos.

Escuché los vitoreos animados de todos los presentes quienes también aplaudían con gozo ante lo que yo había dicho, reí una vez más.

-Eso solo quiere decir una cosa- Comentó otro de ellos- ¿Vamos a tener alguna probadita de su receta secreta del pie de manzana?

-¡Les prepararé uno especial para que puedan comer todos ustedes!- Celebré animado- Han trabajado duro el día de hoy.

-¡Como se esperaba del joven príncipe!- Celebraron todos

Past Lives: Destiny || Hopev «Omegaverse» Donde viven las historias. Descúbrelo ahora