Cree(r) en ti

Capítulo 36

Habia decidido ir de compras, solamente iria por lo poco que hacia falta en casa y unos cuantos aparetivos para cuando Corey fuera de visita, se suponia que seria algo breve y rapido, algo que no tendria inconvenientes.
Y de todas las personas que podia encontrarme en la calle, de todas las personas que viven en Portland Oregón tenia que encontrarme a Dallas Coxx quien hacia fila detrás de mí en el enorme supermercado que contaba con mas de 17 cajas registradoras. La vida me detestaba.
Durante las ultimas semanas había vuelto a estar consciente de su existencia debido a que Corey me habia mencionado que su hermano seguía insistiendo en que permaneciera lejos de él y eso era tan irritante para mí, Dallas no tenia el derecho de opinar en tal caso y de ser asi no podia prohibirme a no tener a su hermano como mi amigo.
Escuche el sonido de mi teléfono notificando un mensaje, lo saque de mi bolso para leer el mensaje de Corey indicando que iría a mi hogar a comer debido a que se encontraba solo en casa y que Bao había salido fuera. Otra cosa interesante que habia aprendido de Corey es que era una persona que no le gustaba la soledad, le gustaba la compañía de las personas para hacer casi todo, le bastaba con saber que habia alguien en su hogar para no sentirse solo y eso me hizo pensar en muchas cosas, me hizo pensar en los motivos que lo llevarona a detestar la soledad de un hogar y es que desde que había llegado a Londres desde un inició él experimento lo que era estar sólo por lo que siempre termino buscando la compañía de las personas convirtiendolo en lo que es ahora, aquel miedo a la soledad lo llevo a ser una grandiosa persona y de un momento a otro mi mente divago en la persona que se encontraba a mis espaldas, por lo poco que conocía sabia que la madre de Corey era alguien que trataba estar siempre presente durante todo el tiempo posible, alguien que trataba de nunca de descuidar sus deberes como madre pero su padre era otro punto y aparte.
A veces la soledad puede ser aterradora. Era algo que habia escuchado decirle a mi madre antes que llegara a la cocina para que bruscamente cambiara de conversación y sin importar cuanto lo intentara, sin importar lo mucho que me esforzara por cambiar de pensamiento mi mente seguía pensando en el chico que se encontraba a mis espaldas.
Giré al oír el llanto de una pequeña que se encontraba sola, mire alrededor observando a las personas que pasaban de largo ignorando a la pequeña que lloraba en el pasillo, hice a un lado mi cesto con las cosas y sali de la fila para dirigirme hacia la pequeña, pasar tanto tiempo con Corey Coxx me hacía tratar de imitarlo.

─¿Sucede algo pequeña? ¿Te perdiste? ─pregunte mientras me colocaba en cuclillas para observala asentir en afirmacion mientras limpiaba sus lágrimas ─. Bien, entonces vayamos a anuncios para avisarle a tus padres, ¿que te parece?

─Si ─respondió casi en un susurro.

─Bien, entonces andando ─mencione mientras me reincorporaba para tomar su mano y dirigirme a la sección de anuncios. A medio caminó observe a una mujer castaña quien miraba alrededor con panico mientras entre sus manos aun tenia a otro pequeño.

─Mami, mami ─mencionó la pequeña entusiasta mientras me soltaba la mano para acercarse a su madre.

─Evelyn ─mencionó aliviada la mujer mientras tomaba la mano de la pequeña ─¿donde te metiste? Te dije que no soltaras la mano de tu hermano.