Miró a su alrededor y los pequeños rayos que lograban colarse a traves de la cortina le hicieron saber que un día nuevo acababa de comenzar.
Notó a YoonGi a su lado y el mayor estaba sin camisa, sonrió y con suma delicadeza pasó sus dedos por la piel palida que era presa de su admiración...
Se subió sobre el mayor y dejó pequeños besos en el hombro de este, provocando pequeñas cosquillas que iban sacando del mundo de los sueños a YoonGi.
- Que haces bebé?- preguntó con su voz ronca dejando escapar un pequeño suspiro
- Quiero un beso antes de ir a clases- dijo el menor mientras besaba el cuello del mayor fugazmente
YoonGi sonrió y de un momento a otro Jimin se encontraba bajo su cuerpo...
- Te daré mas de uno...- respondió el mayor haciendolo reír, ambos se encontraban de buen humor, a pesar que el día anterior fue un poco dificil pues sus emociones los traicionaron revelando sus miedos, angustias, preocupaciones y tristezas. Algo que dejaba claro que no querían perder al contrario...
Jimin rió por las cosquillas que provocaban los labios del mayor en su piel, haciendo que el mismo YoonGi sonriera estampando sus sonrisas en la piel del menor de manera invisible pero permanente.
Amaban despertar así, y un pequeños sonrojo se apoderó de ambos cuando se dieron cuenta que la camisa del menor se encontraba fuera..
Ambos con los torsos desnudos llenandose de caricias sutiles, rozando la piel contraria sintiendo sus dedos picar por la sensación que esos pequeños toques provocaban...
Nunca habían contemplado al contrario de esa forma tan especial e intima para ellos mismos, eran sensaciones nuevas y les gustaba demasiado estar así, tan juntos, para muchos esos roces eran insignificantes o comunes para ellos era tener enfrente una pieza de arte, la cual ambos querían contemplar siempre...
No una hora...
No un día...
Querían sentirse así de abrumados por el amor que ambos sentían toda una vida...
- Debo ir a clases...- dijo Jimin en medio de suspiros y con su voz suave- Pero no quiero...
- Tienes que cariño...- sonrió YoonGi, el mayor aún no olvidaba los pequeños berrinches que Jimin hacían cuando estaban en su habitación y se tenían que levantar en la mañana...
Con pequeños besos y sonrisas confidentes Jimin se levantó listo para ir a la escuela...
Se despidieron en la sala, Jimin recibió varios besos de parte del mayor antes de irse justo como se lo prometió al momento de despertar...
