- A donde vamos?- preguntó Jimin divertido siendo jaloneado por el pálido, quien lo llevaba de la mano.
- Es un...- rió y miró al menor- Algo... no sé cómo explicarlo, simplemente es algo...- y siguió caminando.
Luego de cenar junto a la familia Min y de hablar con YoonGi, el mayor le dijo que quería llevarlo a un lugar, que era un secreto o algo así, le había dicho. Jimin solo pudo seguirlo, sin preguntar más, sabía y había aprendido que YoonGi era transparente con sus palabras solo debía ser paciente y esperar.
Sonrió siguiendo a su novio, a pesar que era un poco tarde, sin embargo aún se podían ver parejas, niños y familias alrededor, veía grupos de amigos pasear, de estudiantes, y ellos... YoonGi y él...
La brisa se encontraba fresca, mecía suavemente los cabellos del pálido, Jimin había notado que YoonGi tenía cierto brillo en sus ojos, parecía emocionado y entusiasmado, y tenía una sonrisa que lo enamoraba mas. Puede ser que todo ha pasado demasiado rápido para ellos, que incluso podrían creer que solo es un capricho o solo le hace el favor a un chico enfermo, sin embargo nadie podrá jamas definir todo lo que siente cada vez que ve a YoonGi, porque es su sonrisa o su mirada cada vez que logra la composición perfecta, son los abrazos que recibe antes de dormir, es ver al mayor concentrado en sus actividades o cuando lo escucha decir te amo...
Es algo que nadie más que solo él puede definir, el tiempo se ha vuelto irrelevante, pues lo único que sabe es que quiere aprovechar al máximo cada instante que pueda junto a YoonGi, quiere verlo sonreír todos los días, quiere estar a su lado... el simple hecho de saber que ese instante podría ser el último hace sentir a su pecho oprimido, por eso quiere quedarse al lado de YoonGi siempre, no quiere perderlo, quiere quedarse junto a él...- Bien...- dijo YoonGi parandose frente a un mirador, Jimin ni se había percatado de donde estaban, estaba tan concentrado en su novio- Este lugar me gusta...
Miró a su alrededor y se dió cuenta que una parte de la ciudad se podía ver desde la altura a la que se encontraban.
- Esto es...- se quedó sin palabras, no solo por la vista, sino por el cuadro perfecto en el que se encontraba, junto a YoonGi...
- Hermoso...- dijo el mayor abrazando a Jimin por la espalda, y descansando su barbilla en el hombro del menor- Este es uno de mis lugares favoritos, antes de mudarnos y antes de que todo el asunto de mi enfermedad empezara, mi abuelo me traía aquí, Hoseok y YuGyeom también venían, hay muchos lugares que me gustaría enseñarte pero este... en verdad quería que lo conocieras, aquí fue donde mi abuelo me enseñó sobre las estrellas...
Jimin asintió, dejando caer parte de su peso en el mayor, y entrelazando sus manos, le gustaba en demasía escuchar a YoonGi, era como sí el mayor hubiese retenido todo lo que pensaba antes de su llegada, porque incluso al principio su novio no hablaba mucho, intercambiaban un par de frases y eso era todo. Pero ahora le encantaba el hecho de escucharlo, cada vez que veían por la ventana durante la noche, se sonrojaba a menudo pues siempre le decía que era su estrella, amaba escucharlo hablar sobre las nuevas melodías y las composiciones que armaba, o el simple hecho de escucharlo reír...
- Es demasiado perfecto...- susurró Jimin suspirando, y cerrando sus ojos un momento, YoonGi sonrió y besó su mejilla.
Ambos disfrutaban del silencio, y de la calidez que compartían.
Al cabo de un rato YoonGi decidió hablar.- Sabes? Vine una última vez solo, antes de que nos mudarámos, y esa noche lloré... el doctor que me diagnosticó ese día había dicho que era un caso uno de un millón, que debía ir a un hospital especializado, sin embargo debes saber que eso era practicamente imposible- suspiró- Mis padres en ese entonces estaban aturdidos y en verdad preocupados, lloré por que no sabía que mas hacer... de igual forma al mudarnos debía estar en control médico, vivir a base de medicamentos y todo eso, la doctora Shyn me ayudó a sobrellevarlo emocionalmente...
Jimin se mantenía en silencio, escuchando cada palabra del mayor, no queriendo perderse ni una sola frase, quería escucharlo...
- Ahora...- sonrió y besó la mejilla de Jimin en varias ocasiones, haciendolo reír- Me hace feliz el hecho de que estés aquí conmigo...
Jimin se giró y tomó el rostro del mayor con ambas manos, mientras su cintura alvergaba las manos pálidas de YoonGi. Sin meditarlo mas, se acercó a los delgados labios... YoonGi por un segundo olvidó cómo debía respirar, los movimientos lentos de Jimin le cortaron la respiración, sintió esos labios que acariciaban los suyos con calma y sin prisas, el cómo sus lenguas se acariciaban sin pudor alguno, YoonGi estaba recibiendo todo lo que Jimin le entregaba en ese beso... frente a las estrellas...