MI ESTÚPIDO BOXEADOR© ✓ [Libro I Hombres irresistibles]

Capítulo 60

Capítulo LX

Kenya

— ¡Lo que me da la real gana estúpida. Que te crees la reina de todo! — Grita Bryan acercándose a mí. La ira se apodera completamente de mí. Y si no fuera porque Hunter sujeta mi brazo izquierdo ya le habría soltado un puñetazo.

— No sé que mierdas te ocurre conmigo pero me importa muy poco que seas un hombre y que seas el mejor amigo de él. — Mi puño derecho impacta directamente contra su barbilla haciendo que él se tambalee. Aparentemente dolorido se toca la zona impactada y me mira con odio.

Hunter intenta arrastrarme lejos de él, pero me zafo de su agarre y me vuelvo a acercar a Bryan quien por la manera en la que cierra sus puños se debate entre si pegarme o no. Me importa una mierda todo, estoy harta.

Estira su mano para agarrarme del brazo, pero rápidamente la cojo y de manera increíblemente rápido y astuta la doblo y giro para ponerla sobre su espalda. La subo más arriba con rabia escuchando como gruñe de dolor. Intenta moverse y quitarse de mi agarre, pero le es imposible. La llave de yudo le inmoviliza. Un círculo se forma a nuestro alrededor y puedo escuchar cómo la gente grita la palabra "Pelea" sin parar y como Kelly grita mi nombre para que me detenga. Pero no puedo más.

— Antes de culparme de algo que no he hecho, averigua e investiga más. Por última vez Bryan. Tu amigo se fue porque le vino en gana. — La gente graba a mi alrededor y me da completamente igual. Pueden subirlo donde les de la gana. Irritada por el enfado aprieto más fuerte haciéndole más daño aún.

— ¡Para Kenya! — Grita. Intento controlar mis impulsos, pero se ha desatado en mi algo que no había sentido nunca. Supongo que la ira más grande que he tenido. Antes de soltarle mi rodilla derecha impacta contra la parte trasera de la suya haciéndole caer al suelo.

— No te vuelvas a meter conmigo si no es por una buena razón. — Le miro desde arriba. Me giro para mirar a Kayla que sujeta con fuerza a Blake, el cual se ve preocupado viendo a Bryan en el suelo. Kelly se acerca a mí con cautela.

— ¡Detente! No quiero hacerte daño, Kelly. Así que, si vienes a culparme tú también date la vuelta y vete. —Le miro como si fuera un toro observando la tela roja. Ella sigue caminando hacia mí, y sin esperarlo, me abraza. Un nudo se forma en mi garganta e intento no llorar. No quiero que toda la gente que está aquí me vea débil.

— Tranquila. No voy a hacer eso, yo te creo. Vámonos de aquí. — Me deshago del abrazo y camino con ella. Le hago una señal a Hunter, quien me mira de manera consoladora.

No me puedo creer que Kayla me haya abandonado. Ha escogido su propio bando.

— Vaya, pues si que estáis confrontados. La verdad es que me has parecido increíble. ¡Esa patada y esa llave han sido impresionantes! — Dice el de gafas a mi lado. Niego con la cabeza. Esto no es gracioso, se supone que eran mis mejores amigos. Kelly le hace una señal para que se calle y él obedece inmediatamente.

Bufo sonoramente. Cuando estamos en el pasillo completamente solos una lágrima sale de mí.

— ¿Por qué es incapaz de entenderlo? Si no me cree que se lo pregunte a él. Yo ya paso. — Me dejo caer en el suelo. Los dos se sientan delante de mí.

— Yo ya sabía que lo que decías era verdad. Solamente me sentía decepcionada porque no me dijistes nada sobre lo de su hermano y tú. Incluso he intentado hablar con ellos, pero no me han creído. — Suspira poniendo una mano en mi hombro como apoyo.

— Yo nunca he dejado de creer en ti, Kenya. Y que sepas que estoy completamente de tu parte. Seguramente cuando se enteren de la realidad te pedirán disculpas. — Me abraza fuerte. Sonrío relajada y respiro el olor a vainilla que desprende su cabello.