Capítulo ocho

12.1K 629 21
                                    

Kenya

- Tu amiga está loca. - Dice Colton riendo mientras andamos hacia su coche.

- Creo que le tengo miedo. - Dice aún riendo.

- Supongo que hace de hermana mayor. - Sonrío confusa. Ella se ha soltado mucho desde que ellos ha aparecido en nuestras vidas.

- Puede ser. - Dice abriendo la puerta del copiloto para que yo entre. Le doy las gracias antes de hacerlo.

El da la vuelta hasta la puerta del piloto y entra en el coche.

Enciende el motor y se conduce. El ambiente es agradable y con un silencio incómodo y extraño. Hasta que él rompe el hielo.

- Gracias por acompañarme a la cena de la boda de mi tía Sol. - Puedo ver que también me mira agradecido.

- No es nada. - Mentira, yo no quiero estar aquí. Solo lo hago por cortesía. Aunque no se por qué debería hacerlo.

- ¿Puedo preguntarte algo? - Pregunta con voz traviesa.

Ahí va.

- A ver. - Respondo sabiendo que va a soltar algún piropo.

- Estás hermosísima, y tremendamente caliente con ese vestido rojo. - Dice sonrojado. Aunque sea de noche puedo ver el rojizo en su cara.

- Vaya, gracias supongo. - Digo notando como mis mejillas se tornan de un color carmesí.

- Oh, lo siento si mi comentario te ha molestado. - Le interrumpo.

- En realidad no me ha molestado, tranquilo. - Un pelín directo sí que ha sido.

- Hemos llegado. - Comenta aparcando el coche en el Parking.

Sale del coche y lo rodea para abrirme la puerta como un caballero.

Me tiende la mano y yo la cojo amablemente. Después de cerrar su coche con llave, caminamos hacia un gran jardín. Está decorado de blanco y una grande pista para bailar.

Colton no me suelta hasta que nos acercamos a una mesa donde hay muchas personas, entre ellos algunos primos y hermanos de Colton, según me ha ido contando por el camino.

Saludo a sus padres y a toda su familia.

Él, claramente, me presenta como ''Amiga''.

También felicitamos a los recién casados, que nos desean una linda noche.

Colton me aparta a una mesa un poco apartada de su familia y nos sentamos en ella. El camarero anota lo que queremos y luego se marcha.

Miro a Colton quien me sonríe enormemente.

- ¿Sabes qué? - Me pregunta juntando sus dos manos.

- No. - Respondo obvia. ¿Por qué la gente tiene que preguntar algo tan estúpido?

- Me alegro de que hayas querido venir, y de que aceptaras acompañarme a esta boda. - Comenta sin despegar sus ojos castaños de los míos mientras sonríe. Ya me lo has dicho antes...

- Y de que te hayas arreglado tan guapa para mí. - Sonríe travieso. ¡No, guapito! ¡Me he arreglado para ir perra!

- ¡Qué va! ¿esto? He cogido lo primero que he visto en el armario. - Río mintiendo. ¡Mentira! ¡Me ha costado muchas horas y paciencia!

- Pero, cuéntame algo de ti, no sé. - Le propongo riendo.

- ¿Qué tal si jugamos a las doce preguntas? - Propone. Levanto los hombros y respondo con un simple vale.

MI ESTÚPIDO BOXEADOR© ✓ [Libro I Hombres irresistibles]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora