26. 𝗔𝗗𝗜𝗢́𝗦, 𝗦𝗢𝗣𝗛𝗜𝗘

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La señora Weasley había ofrecido a ambas niñas de comer, Lucy aceptó gustosamente, no había comido desde que se fue al orfanato, mientras que Sophie se negó, ya que seguía digiriendo lo que le habían contado

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La señora Weasley había ofrecido a ambas niñas de comer, Lucy aceptó gustosamente, no había comido desde que se fue al orfanato, mientras que Sophie se negó, ya que seguía digiriendo lo que le habían contado. Su apetito se había ido. Lo único que rondaba por su mente una y otra vez, era que Lucy había encontrado parte de su familia.

—¿Lucy, amor, por qué no vas a la cocina?, dejé el desayuno sobre la mesa —dijo Molly con una sonrisa, mientras Charlie, Fred, George, Arthur y Sophie se encontraban sentados en el sofá.

Lucy no era tonta, sabía que no querían que escuchara su conversación, por lo que asintió y junto a Ginny —ya que Ron volvió a su cuarto a dormir,— se dirigió a la cocina.

—¿Crees que se lleven a tu amiga pronto y por eso no quieren que escuches? —murmuró Ginny, siguiéndola.

—No lo sé, y no me importa —bufó Lucy, encogiéndose de hombros.

—Pero es tú amiga —dijo Ginny con el ceño fruncido, vio que Lucy no cambió su expresión de "no me importa una mierda", así que agregó—: tú fuiste por ella.

—Solo quería sacarla de aquél lugar —dijo Lucy seria—, Sophie es demasiado inocente...

—Lo mismo dices de tu amiga Sara —dijo Ginny, a la vez que llegaban a la cocina y Lucy se sentaba en una de la sillas frente a la mesa con su desayuno. Lucy la miró ceñuda.

—Sara no es mi amiga —dijo Lucy entredientes, comenzando a tomar y comer su desayuno.

—¿Entonces? —preguntó Ginny confundida.

Lucy entrecerró sus ojos unos segundos, no sabía en realidad cómo era su relación con Sara.

—Nuestra... relación es diferente —dijo Lucy encogiéndose de hombros, antes de tomar la leche, pero luego agregó con el ceño fruncido- y extraña.

Recordó el apodo que le había puesto la rubia. No podía creer que Sara fuera tan loca como para ponerle «Jefa» de apodo.

—¿Diferente? ¿En qué sentido? —preguntó Ginny extrañada.

Entonces, Fred y George entraron por la puerta de la cocina, entrando también en la conversación y respondiendo por Lucy.

—Se puede decir que Sara es la garrapata de Lucy —se burló Fred.

—Cállate o te lanzaré el cuchillo —amenazó Lucy, alzando el instrumento.

Ginny no entendía. George y Fred reían ante la expresión de furia de Lucy.

Entonces sucedió. Alguien llamó a la puerta trasera, la cual estaba a la izquierda de Lucy. Los cuatro miraron hacia la puerta.

Los demás —exceptuando Ron, el cual está roncando,— aparecieron por la puerta y fue Arthur el que se apresuró a llegar a la puerta para primero espiar por la ventanilla. Charlie se acercó a Lucy.

✓ DRAGONS, harry potter [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora