✓ DRAGONS, harry potter [#1]

131. 𝗟𝗔 𝗣𝗘𝗡𝗔 𝗦𝗘𝗖𝗥𝗘𝗧𝗔 𝗗𝗘 𝗛𝗔𝗥𝗥𝗬 𝗣𝗢𝗧𝗧𝗘𝗥

.la pena secreta de harry potter

Luego de la segunda prueba, todos deseaban saber los detalles de lo que sucedió bajo el agua. Ron pudo disfrutar de la fama que se había ganado Harry, Lucy y Sara, para comenzar a modificar las cosas. Al principio, al menos sus relatos eran compatibles con los de Lucy. Dumbledore había reunido en el despacho de la profesora McGonagall a todos los futuros rehenes y, después de asegurarles que no les pasaría nada (sin contar las millones de amenazas que envió la Reina Katherine a Dumbledore) y que despertarían al salir del agua, los había dormido mediante un hechizo. Una semana después, sin embargo, Ron contaba un emocionante relato de como tuvo que ayudar a Harry con su hechizo. Que tuvieron que enfrentarse a un gran troll para conseguir una valiosa piedra para terminar el hechizo.

—Pero yo tenía la varita oculta en la manga —le aseguraba a Padma Patil, que parecía haberse vuelto más amable con Ron cuando éste se convirtió en el centro de atención, y le hablaba cada vez que se cruzaba con él por los corredores—. Si hubiera querido, podría haber raptado yo solo esa piedra.

—¿Cuándo la ibas a raptar? ¿Cuándo fueron a ese "misterioso bosque del más allá"? —le preguntó Hermione mordazmente. Estaba muy irritable porque le tomaban mucho el pelo a propósito de que fuera ella la persona a la que Viktor Krum más valoraba.

—¿O cuándo salvaste a Harry de ese gran troll? Por cierto... ¿Cuándo fue que sucedió eso? —dijo Lucy con los ojos entrecerrados y viendo a Ron de brazos cruzados.

Al idiota se le había subido la fama a la cabeza.

Ron enrojeció hasta las orejas, y en adelante retomó la primera versión de los hechos.

Había empezado marzo, y el tiempo se hizo más seco, pero un viento terrible parecía despellejarles manos y cara cada vez que salían del castillo. Había retrasos en el correo porque el viento desviaba a las lechuzas del camino. La lechuza parda que Harry había enviado a Sirius con la fecha del permiso para ir a Hogsmeade volvió el viernes por la mañana a la hora del desayuno con la mitad de las plumas revueltas. En cuanto Harry le desprendió la carta de Sirius se escapó, temiendo que la enviaran otra vez.