Kim Taehyung es un omega que vive una vida tranquila, tiene un trabajo estable y personas a las que llamar familia, sin embargo los demonios del pasado son demasiados y pronto volverán, incluyendo a aquél que le hizo más daño, su pareja destinada.
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Seokjin levantó la cabeza al escuchar como la puerta de la celda en la que estaba se abría, su mirada pronto se encontró con la mirada de su madre. La puerta se cerró detrás de ella y al notar que no llevaba nada encima, Seokjin entendió que a diferencia de él que estaría solo detenido por haber golpeado un policía que intentó separarlo de Byeongho, su madre pasaría mucho tiempo ahí.
—¿Por qué estas aquí, Jin?—Preguntó ella con su habitual expresión tranquila.
—¿Por qué estás tú aquí, madre?—respondió él, abrazando sus rodillas.
—No por lo que tu piensas.
—¿Realmente no tuviste nada que ver, mamá? Dime la verdad—La mujer suspiró y bajó la mirada, antes de sentarse en aquella cama, sin sus joyas, se veía como lo que era. Una sub-alfa como cualquier otra—. ¿Realmente no tuviste que ver con que Taehyung fuera atacado?
—No, no tuve nada que ver. —La mujer alzó la mirada por un segundo—. Yo... Tuve una aventura, hace siete u ocho años. Con el padre de ese chico que golpeaste, cenamos un par de veces e hicimos otras cosas que no debes saber. Yo siempre llevaba una foto tuya y de Taehyung, no se cuando la habían tomado, yo solo la tenía porque me gustaba. Te veía realmente feliz en ella, abrazando a ese chico que estaba sonriendote. Siempre la tenía en mis bolsos, porque me gustaba mucho verla. Creía que ibas a ser lo que yo no pude ser, pensé que podrías estar con ese chico y tener hijos como si no fuese solo una alianza por la familia
—¿El vio la foto?
—Byeongho... Me preguntó por él, no pensé que decirle algo sobre el chico fuera algo malo. Después de todo, los tres estudiaban en la misma escuela—la mujer suspiró amargamente—. Pero Byeongho no es normal y me equivoqué al no preveer eso. No esperé que él se obsesionase con ese chico, el día que fue atacado, el chico se apareció en medio de una cena y antes de irme me dijo que debía buscarte un nuevo prometido, cuando llegue a casa tu padre me contó todo, fue cuando entendí que él lo había atacado.
—No entiendo, ¿Por qué el precisamente? Además, ellos dijeron que quienes lo había llevado era otro...
—No lo sé, quizás Byeongho debió haberlo à echado por varios días. El chico estaba acostumbrado a caminar solo a su casa, a veces ibas con él, pero la mayoría de las veces el se iba solo—la mirada de su madre se fijo en él—. Pero luego lo único que hice fue evitarles sufrimiento, Seokjin. Lo hice por su bien, la carta, Miyeon, incluso lo del chico... No estas destinado a estar con ese chico, nada hará que vuelvan a estar juntos. A menos que sea una razón mayor y que te asegures que el chico esté alejado de Byeongho y-
—Eso ya no importa, ese bastardo no despertará jamás—Fue entonces cuando la mujer notó los nudillos reventados de Seokjin—. No después de haberlo golpeado tanto.
