➸ Capitulo 34

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El gran día había llegado, el baile de Navidad iba a ser esta noche. Desde la tarde me comencé a alistar para estar perfecta.

Hice un sutil delineado en los ojos, un poco de rubor y me puse un labial rojo mate, no me puse nada más de maquillaje.

Mi vestido es realmente precioso, tenia los hombros caídos y un corte en A, en el escote tenía pedrería, iba apretado hasta la cintura, en donde se soltaba en un vuelo, y el toque final, es de color azul marino.

Me puse un pequeño collar de diamantes, una pulsera también de diamantes, los dos accesorios eran de mi madre.

Tenía el cabello suelto, me eché un poco de perfume para salir finalmente de mi habitación.

—Disfruta tu noche, Ly—me animo Luna, quien estaba sentada en un sillón de la sala.

—Gracias—le sonreí.

Sali de mi sala común, frente mío estaba Draco esperándome, detrás de él estaba su pandilla, Parkinson estaba del brazo de Blaise, sin embargo, tenía una cara disgustada.

—Amor...—Draco se acercó. —Luces realmente preciosa, más de lo que eres.

Me sonroje. —Tú estás precioso, tu traje te hacer lucir como un verdadero príncipe.

—Ya sabes—alzo el mentón. —Soy el príncipe de Slytherin.

Entre risas, comenzamos a caminar con Draco—yo de su brazo—hasta el Gran Comedor, donde se realizaría el baile de Navidad. Al llegar, vi a Eli del brazo de Antoine, ella tenia puesto un vestido con corte v, no tenia tantos detalles, era con falda suelta y de color verde, aparte llevaba un collar de serpiente y un labial rojo oscuro.

—Ly—se acercó a mí. —Luces realmente preciosa.

—Tú luces más preciosa—le agarre su mano. —Antoine, me alegra que te animaras a invitar a Eli.

—Es un hogno tegnela como pareja...—se sonrojo. —Digo, en el danse, digo pageja en baile—comenzó a tartamudear.

Las dos lo miramos y nos reímos un poco.

—Al fin que te decidiste y la invitaste como se debía, Malfoy—murmuro Eli cruzada de brazos.

—Tarde o temprano lo iba a hacer—Draco fulmino con la mirada a Eli. —Es más que obvio, no iba a dejar que Lydia vaya con alguien que no sea yo.

Eli iba a replicar, pero la profesora McGonagall nos pidió que ingresemos al comedor, ya que iba a dar inicio al baile.

—Hoy somos la pareja perfecta del baile—susurro Draco a mi oído.

—Somos perfectos—presumí sonriendo.

Luego que los campeones entraran y dieran pase al baile. Draco me ofreció su mano para salir a bailar, la cual acepte.

Entre vueltas y vueltas, comenzamos a bailar con Draco, realmente era perfecto todo, me sentía como en el paraíso.

—Lydia, ¿alguna vez te he dicho lo mucho que te quiero? —negué con la cabeza. —Bueno, entonces te lo diré desde hoy, muchas veces al día—sonrió. —Realmente te quiero, Lydia, sin pensarlo me fui enamorado de ti.

—Eres un tonto al darte cuenta muy tarde—sonreí juguetona. —Me podrías haber perdido.

—No, nunca haré nada para perderte—me dio un pequeño giro. —Si no te tengo conmigo, estoy sola, contigo me siento libre, contigo me siento completo.

—Te quiero Draco.

—Te quiero Lydia.

Luego de dar tantos giros, la verdadera fiesta empezó. Las Brujas de Macbeth dieron pase a la acción.

Con Draco, Eli y Antoine comenzamos a saltar siguiendo la música, todo era realmente precioso, momentos como estos siempre lo íbamos a recordar.

Draco me agarro de la cintura y me alzó riendo.

—¡Amo a las Brujas de Macbeth! —gritó Eli saltado.

—¡Iremos por ponche! —grite avisado, Eli asintió y siguió bailado con Antoine.

—Realmente me estoy divirtiendo—hable agarrado la mano de Draco.

—Lo que más me encanta de esta noche—me dio un beso en la palma de mi mano, —es estar contigo.

Llegamos al banquete, y Draco comenzó a servir un poco de ponche, luego tomamos un poco.

—Evan, esta siendo realmente un estúpido—hablo Bonnie acercándose a nosotros. —Hola Ly.

—Bonnie, Evan—los miré. —¿Todo bien?

—Sí—contesto Evan interrumpiendo a Bonnie.

La música comenzó a sonar lenta, las parejas comenzaban a juntarse para bailar lentamente y de una manera romántica.

—Cariño, ¿vamos? —pregunto Draco, los dos estábamos incomodos con el ambiente que sentía entre Bonnie y Evan.

—Bueno...—los mire. —¿Ustedes no irán?

—Bonnie—Evan suspiro. —Vamos a bailar, ¿sí?

Ella lo miro por unos segundos y se cruzo los brazos. —No quiero bailar contigo.

Evan comenzó a ponerse rojo de la colera y exploto. —¡Pero con Weasley si bailas!

—¡Porque George no es un estúpido presumido como tú! —contradijo.

—¡No estuviéramos así si hubieras aceptado venir conmigo! —grito Evan

—¡Nunca me lo pediste! —frunció el ceño enojada. —¡Aparte George me invito desde que se supo del baile! ¡No como tú!

—¡Entonces quédate con Weasley!

—¡Siempre arruinas todo, Evan! —grito Bonnie para salir corriendo de la sala.

Evan se quedó viendo cómo se iba, hasta que le di un golpe en la nuca. —Idiota ve detrás de ella—él reacciono y se fue corriendo.

—Eso si fue sorprendente—hablo Draco dejado el poche a un lado. —Querida dama, ¿ahora si vamos a bailar?

—Con gusto, joven caballero—hable para darle mi mano e ir a la pista de baile.

Realmente quiero a este chico.

Siempre estuvo ella ↯ ┃Draco Malfoy┃☑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora