CAP.39 "Estaré ahí".

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Estuve mirándole por segundos en silencio. El me miró con una cara que expresaba que no tenía idea de lo que estaba pasando.

— "¿Qué? ¿Pasa algo?" — Preguntó terminando de ingresar a la casa.
— "Estuve llamandote..."
— "Sabes que estoy trabajando, no tengo mucho tiempo para interrupciones, sabes mejor que nadie como son estos negocios".

— " bueno ".

Se acercó a mi para poner sus delicadas manos en mi cadera.

— "¿Estas molesto por algo en especial? Te siento tenso... — Dijo hablando suave a mí oido. — Puedo ayudarte a que te relajes"

— "Estoy bien, gracias" — Dije y me alejé con mi celular en mano.

No quería formar una situación incómoda entre nosotros dos, quería hacerle demostrar que nada pasaba pero mi mente no me ayudaba, seguía mostrándome las fotos que ya había visto. Él ingresó a la habitación dejando su saco encima del pequeño burón.

— "No soy idiota, ¿Que te pasa?" — Dijo con un tono más serio, entonces supe que hablaba en serio.

— "¿Donde estuviste?"

— "Trabajando. ¿Vas a montar una escena de celos cada ves que salgo y no responda tus llamadas?" — Dijo.

— "Si. Por seguro, porque estoy seguro que si yo cruzara esa puerta y no tomaras ninguna de tus llamadas recogerías tus cosas para marcharte. ¿Tan importante es el trabajo que no pudiste tomar 5 minutos y llamarme?"

— "Bueno, lo siento. No suelo hacer esas cosas, no pensé que fuera importante."

— "Nada que este relacionado conmigo para ti es importante." — Le dije y le dí la espalda para mirar por la ventana.

— "¿De que estas hablando, idiota? Apenas comienzo a adaptarme a esto." — Comentó molesto.

— "No me has respondido, ¿Donde estabas?"

— "¡Trabajando! ¡Mierda! ¿Desde cuando eres tan controlador? ¿Mañana vas a comenzar a decirme con que color de ropa interior tengo que vestirme? No me gusta que me controlen, al menos no de... Esta forma, es obvio que estas muy molesto y es porque estas pensando cosas indebidas, ¿Piensas que me estaba acostando con alguien porque no respondí tu llamada?"

— "¿No lo estabas haciendo?" — Dije girándome.

— "¡Estaba trabajando, no me estaba acostando con nadie. ¿De donde demonios has sacado esa idea? ¿Es maldito de Jhan de nuevo? ¿Eh?"!

— "¿Entonces que hacias con el idiota que me llama gigante?" — Preguntó.

— "Porque el y yo tenemos negocios, era el mediador para la reunión con un clien...te. Espera, ¿Como sabes tu eso?"

— "¿Entonces no te acostaste con él? ¿Porqué estabas en su auto?" — Se quedó atónito por unos segundos.

— "¿ME ESTAS ACOSANDO? Déjame decirte que eso es un acto de un maldito enfermo mental..." — Lo tomé del brazo.

— "¿Porqué estabas en su auto?"

— "Me llevó con el cliente, y suéltame imbecil. — Me empujó. — Y si soy un maldito pevertido pero al menos soy sincero. Además mejor que nadie sabes que yo era una pe*** caliente. "

— "¿Ya estas justificandote?" — Dije, mirándole fijamente.

— "No, pero sabias mejor que nadie con quien te involucrabas y obvio que no era con la virgen maría teresa de carcuta. Debería irme a coger con él." — Dijo alejándose de mí.

— "Pues vete a coger con él, si eso es lo que deseas". — Estrelló la puerta al salir.

Cuando se hablaba de ese maldito imbecil me hacía perder la cabeza. Respiré hondo para intentar calmarme; Al menos si sabía que las últimas fotos eran recientes, había alguien que lo asechaba también. No podía seguir callándolo pues algo podría pasarle.

Estuve en la habitación por algunas horas, no sabía si Matthews se había marchado o no, yo solo estaba comenzando a preocuparme. Tenía que hacer algo.

Luego de un rato la puerta de la habitación se volvió abrir, y Matthews apareció. Llevaba una copa de vino en las manos.

— "¿Aún sigues molesto?" — Preguntó, me giré hacia él.

— "Yo..."

— "¿Sigues pensando que me estoy acostando con otro?" — Dijo avanzando lentamente.

— "¿Porque vienes a hacerme esa pregunta, ahora?" — Le dije.

— "¿Crees que estaría arriesgando todo para luego irme con otro hombre? Quisiera sacarte la lengua en estos momentos, maldito idiota. — Se acerco a mí y de repente me echó la copa de vino en la cara. — Vas a irte al infierno... Por... Por... Dudar de mi maldita lealtad a ti"

Se iba a marchar pero lo tomé por el brazo.

— "Espera, ¿Estas llorando?" — Le pregunté sorprendido.

— "VETE A LA MIERDA... Estoy intentando que esta mierda funcione, esta bien que no soy perfecto pero no todo el tiempo pienso cogerme con cualquier hombre, y menos sería con el que menos soportas. Eres un idiota, acosandome como que eres un enfermo mental ¿Que demonios haces?" — Me dijo.

— "Lo siento." — Le dije.

Lo solté.

— "En serio lo siento, he estado recibiendo fotos tuyas, y conversaciones... Me han nublado la mente, no quiero que estes con nadie más. Que realmente seas sincero y prefieras terminar esto en vez de mentirme."

— "No te he mentido" — Dijo mirándome fijamente.

— "Te amo. En serio te amo." — Lo besé en los labios.

— "¿No sabes quien te ha estado enviado las fotos? Eso indica que me tienen ubicado. " — Se acercó a la ventana a mirar lentamente al rededor. — "Me tienen vigilado."

— "He hablado con Miguel pero dice que esta vez no será tan facil, el número esta con el nombre de un difunto." — Dije.

— "No hay que dar mucha vuelta, los enemigos son del concejo, lo mismo 3 que estuvieron empujando a mi expulsión. Por ahí es donde tengo que iniciar." — Se giro a mirarme. — No quiero involucrarte, voy a irme."

— "¿Que?"

— "Si, voy a irme. No quiero involucrarte más, podrían hacerte algo en contra solo por debilitarme a mí. Por favor entiende." — Dije.

— "No voy a dejarte ir."

— "No es que me dejes ir, quiero cuidarte. ¿No lo entiendes? Si te involucras no puedo pensar con tranquilidad".

— "Vas a aprender hacerlo, porque yo estoy contigo. Como antes y mucho más. Si estas en peligro, yo también... Si vas a salir por esa puerta, será conmigo." — Lo besé.

Lo abracé fuerte.

SIEMPRE FIEL.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora