RICHARDLlegué a casa luego de horas, no voy a negar que tenía algunos tragos en la cabeza. Le hubiese destrozado la madre a ese imbécil de Matthews sino hubiese andado con su grupo de guardaespaldas.
Entré a la habitación para quitarme los zapatos y encontrarme con Ed dormido. ¿Como desmonio descansaba luego de esto? Las palabras de Matthews comenzaban a rellenar mi cabeza.
Me acerqué al tocador, donde estaban algunas joyas, y las estrellé todas en el suelo de rabia. El dolor en el pecho que sentía era demasiado, Ed despertó sentándose de golpe en la cama.
— "¿Que demonios estás haciendo?"
— "¿Porqué nunca me has dicho que me amas?" — Le dije molesto. — ¿Acaso no me amas?"
— "Estas ebrio, Richard. Debería de darte un baño y cuando estes más calmado lo hablamos." — Comentó levantándose de la cama.
— "¡Quiero hablarlo ahora! ¿Acaso a él si le decias que le amas? ¡Nunca lo había pensando porque pensé que solo eras frío!"
— "Por favor..." — Me tomó de los hombros.
— "¡Por favor una mierda! ¿Porqué demonios te casaste conmigo? ¿Sientes amor o no por mí?"
— "Te quiero, Richard."
— "¿Querer? ¿Solo me quieres? ¿Todo este tiempo solo me has querido?" — Comenté mirándole a los ojos.
— "Por favor, hablemos mañana."
— "¡Me importa un coño mañana, quiero que resolvamos esto hoy. No iré a esa maldita cama a dormir si tú no me aclaras toda esta mierda, él estaba allí riendo en mi maldita cara!".
— " tampoco fue así. Estas exagerando las cosas, escuchas lo que quieres escuchar. Te dijo que no teníamos nada ¿Que es lo que quieres?"
— "Tal vez no tengan nada pero es más que evidente que tienen bastante cosas entre ustedes, problemas no lo sé, lo que sea."
— "Ok, cálmate." — dijo acaricando mi hombro.
Mis ojos se llenaron de lágrimas.
— "Si me dejas por él nunca te lo voy a perdonar... Nunca." — Le dije.
— "Te estas adelantando a las cosas, Tomás una cosa pequeña y la vuelves gigantesca."
— "¡Es gigantesca! !No me hagas ver como que soy un loco exagerado! ¡Vi como te mira! Quiere deborarte y tu evitas mirarlo a los ojos porque tal vez sientas el mismo deseo, y a mí solo me dices que me quieres..."
— "Richard..."
— "¿Con quien estabas anoche? Ese perfume no es tuyo, ¿Con quien?"
— "¿Aun sigues con eso?" — Dijo.
— "¡Si! Porque puedo recordarlo bastante bastante bien, y ese olor era bastante familiar en la reunión." — Comentó.
— "Ya basta..."
— "¡DIME YA! ¿ESTUVISTE CON ÉL? Ed... Mirame, dime la verdad... ¿Fue él?"
— "Sí."
Me alejé de él molesto.
— "¿Lo ves a mis espaldas?"
— "Se apareció en la compañía porque como te dije no tiene contacto conmigo, esta intentando que caiga en su juego, así que estaba allí esperando."
Yo aún seguía algo sorprendido.
— "¡¿QUE DEMONIOS?! Dime que no te has acostado con él, que ni siquiera lo has besado."
— "¡No lo hecho! Todo esto es un juego, al cual tú estas dejando que él te arrastre."
— "¡ME VALE UNA MIERDA! — dije empujándolo — Me estas engañando con él, con él hombre que te engañó tiempo atrás... ¿Irás con él para que el regrese con el tal Leo con el cual te traicionó?"
Su rostro cambió de inmediato.
— "¿Como sabes tu eso?"
— "Ya que no me lo dices, Arcángel me lo contó. ¿Eso planeas?" — Dije.
— "¡No planeo regresar con nadie!"
— "¡Confiesa de una vez que te lo estas follando, te envía fotos desnudo, llegas con su olor a mi casa impregnado en tu ropa ¿Que otra señal me darás para que confieses?"
— "Nadie te ha dado señales de nada, lo que sabes es porque lo que yo te he dicho. Que ha sido la verdad, y por lo que Arcángel probablemente te dijo, si hubiese querido engañarte lo hubiese hecho mucho tiempo atrás y te aseguro que no lo sospecharias, ahora estas haciendo drama innecesario. Me iré a dormir." — Dijo alejándose y tomando la almohada de la cama.
— "¿Porqué estas tan molesto? ¿Por recordarte lo que te hizo? Dime... ¿Aún tienes ese vídeo?" — Se detuvo para mirame.
— "No hagas que desee irme de la casa." — Comentó seriamente.
Me quedé en silencio, y él terminó de salir de la habitación. Me senté en una esquina de la cama con lágrimas en los ojos, comenzaba a odiar a Matthews.
De momento un sonido conocido se escuchó en la habitación, Ed había olvidado su celular. Me paré de inmediato para cerrar la puerta, y tomé su celular, el mensaje que había entrado no era nada importante.
Pero empecé a buscar entre los demás y me encontré con un número sin nombre, había solo un mensaje.Leí el mensaje.
**DATO: Mismo mensaje que Matthews había enviado horas antes a Ed.**
Maldito Matthews de mierda.
AL SIGUIENTE DÍA
EDMe levanté bastante temprano no quería tener ningún encuentro incómodo con Richard. Pero no funcionó, su rostro fue lo primero que ví al despertarme, parecía que la resaca le había golpeado fuerte fuerte.
Le dije unos buenos días a lo que me respondió, yo seguí con mis cosas, y entonces percate de que no tenía mi celular. Fuí hasta la habitación y estaba donde lo había dejado, lo tomé y me marché.
En el transcurso de la tarde intentaba relajar mi mente, había demasiado drama en toda la situación. Quería tener mis momentos de Paz y tranquilidad, comenzaba a pensar que lo mejor sería alejarme de los dos.
Los dos estaban fuera de control, Richard con sus celos y Matthews con su insistencia. Mi cabeza estaba hecha un lío.
Recosté la cabeza del escritorio y me quedé dormido por algunas horas, cuando volví a despertar ya eran las 7:00pm. Miré mi teléfono no había ningún mensaje ni nada en especial.
Me levanté para ir hasta el baño y lavarme la cara. Miré algunos documentos y luego decidí conducir hasta llegar a casa.
Mientras iba de camino mi celular sonó varias veces con un número sin nombre así que debía de ser Matthews no respondí. Al llegar a casa me quité los zapatos al entrar pero al parecer no había nadie en casa, caminé por todo el lugar y Richard no estaba.
Saqué mi celular para llamarle pero no contestaba ¿Donde se había metido? Mí celular volvió a sonar pero esta vez era Miguel.
— "¿Que pasa?"
— "Esto no te va a gustar."
— "¿Qué?"
— "Matt fue a tu encuentro y resulta que se llevó una paliza. Estoy seguro que va a matar a tu esposo."
— "¿Qué?"
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SIEMPRE FIEL.
RomanceUn corazon ardiente que espera el momento justo para saltar y ahogarse en el precipicio de un amor que no parece ser correspondido. Ed Kind quien cae profundamente enamorado de un mafioso luego de años de ser su guardaespalda, decide confensarse aun...