SIEMPRE FIEL.

69. "NO ES MI PROBLEMA".

Al siguiente día estuve compartiendo con madeline en el pateo, dejame decir que se me daba muy bien el jugar a las amigas que toman el té.

— "¿Vas a quedarte mucho tiempo conmigo?" — Preguntó Ella mirándome fijo.

— "Eso planeo. ¿porqué?" — Dije.

— "El otro empleado papá... Hizo que desapareciera." —Dijo con algo de pena.

— "¿Que desapareciera? ¿A que te refieres?" — Le dije.

— "Luego que entró a mi habitación una noche, no lo volví a ver. Tengo miedo que vaya a pasar lo mismo contigo. Eres mi amigo." — Comentó ella.

— "Eso no va a pasar." — Besé su cabecita con cariño.

En ese momento se escucharon pasos acercarse y un "boo" Salió de la nada lo que hizo que Madeline diera un brinco inesperado. Me giré para encontrarme con sus carcajadas, llevó a su niña en brazos para luego darle un beso en la frente.

— "¿Toman el té y no me invitan?" — Preguntó con algo de emoción.

— "Lo siento, papá. No estabas." — Comentó ella con dulzura.

— "Ya he llegado. ¿Porqué no me invitas?" —Dijo él volviendo a ponerla en el suelo.

— "Bien. Únete a nuestro party." — Comentó ella.

El tomó una de las pequeñas sillas hechas de madera en la que estábamos sentados para sentarse. Se sirvió algo del té que había en la pequeña jarra. Imagino que la conversación que teníamos como juego ya iba a terminarse.

— "Quería hablarte." — Dijo al momento en el que se servía el té.

— "Somos todos oidos." — Comenté para que Madeline se sintiera incluida.

— "Quería pedirte unas disculpas por si en algún momento he creado una situación incómoda. Anoche quise llamarte solo para saber si todo estaba bien".

— " Eso lo entendí... Pero, lo dices como si te pasó algo que te hace pensar que lo creaste." — Le comenté.

— "No. Nada de eso. Solo quería expresartelo y sabes que... Al menos hasta ahora puedes contar conmigo." — Dijo y luego me dió una sonrisa.

— "Gracias."

— "Volveré al trabajo, así que nos veremos más tarde." — Dijo y se levantó del asiento luego de volver a besar a su niña, me palmeó el hombro varias veces y entonces terminó de marcharse.

Era obvio que algo le habían hecho decir esas palabras, o al menos era lo que me hacia pensar. Estuve toda la tarde viendo algunas películas de princesa y demás, aparte de eso me llevaba unas uñas pintadas de diferentes colores. No dejaba de mirarla con entusiasmo.

MATTHEWS

El olor a café cubría todo el restaurante, iban a hacer rumbo las 3:30pm y no entendía como Kenser podía verse tan relajado mientras se tomaba ese café a plena temperatura calurosa.

Alzó su cabeza para mirarme y cerrar el folder que estaba frente a él.

— "Vas muy bien, Matt. Nunca disminuyes tu producción." — Dijo deslizando el folder hacia mí.

Solo asentí.

— "¿Porqué tanto silencio?" —

— "No lo estoy." — Respondí.

Hubo unos minutos de silencio hasta que al fin llego el tema que estaba totalmente seguro él deseaba introducir en nuestra conversación.

— "Supe parte de lo que hiciste con tu familia, ¿No planeabas decirme nada?" — Preguntó con una mirada fija y cuestionante.