La noche apuntaba a ser grandiosa, una fiesta esperaba por su presencia, todos los jefes del país tendrían una reunión con el propósito de celebrar la paz que se había llevado tras el acuerdo de paz que se había firmado entre las diferentes partes.Como de costumbre Frem esperaba fumándose un cigarro hasta que lo vió salir acompañado de Miguel, llevaba un buen traje, pocas prendas, todo elegante. Típico de él.
Se subieron de inmediato al auto y en algunos minutos lo escuchó hablar por teléfono varias veces, siempre un hombre ocupado. No era que a través de estos 7 años había cambiado algo, solo que había asumido el poder en el concejo y debía de hacer algunas cosas con más privacidad.
Llegaron al hotel que habían reservado, Frem como gesto de cortesía abrió la puerta del auto para que ellos de inmediato se desplazaran al interior y sus colegas comenzaran a saludar e interactuar.
Su nombre aún seguía siendo pronunciado por los pasillos aunque los años habían aplacado esa reputación de zorra con ropa, aunque a él no le importaba seguía viviendo su vida como deseaba.
— "Un gusto tenerte en nuestra reunión, Matt. — Comentó el viejo Omar. — Has hecho un buen trabajo estos años."
— "Como usted también. También es un gusto ver que a pesar de sus años sigue siendo atractivo." — Le comentó a lo que los dos rieron.
— "Siempre tienes esas ocurrencias. Escuché que has generado mucho dinero para el concejo con algunos cambios que hiciste."
— "Los cambios siempre tienen que beneficiarte, si no es así entonces no hagas ninguno." — Respondió con seguridad.
Algunos que otros saludos fueron apareciendo, aunque otros decidían solo mirarlo desde los rincones, tal vez porque lo consideraban una visita del demonio. De todas formas tenían que guardar sus comentarios, no eran valientes para comentarlo frente a él.
En los años que llevaba como presidente del concejo había dejado más que claro que incluso sus enemigos tenían que dirigirse con respeto hacia él. Era el legado que su difunto padre le había dejado, así que eso era lo que estaba ejerciendo.
— "Todos parecen amarte." — Comentó Miguel con algo de sarcarmos y se llevó la copa a la boca para un trago.
— "Es el precio que debes de pagar cuando deseas tener buenas relaciones." — Comentó.
Matthews había aprendido que por más complaciente que podían ser, siempre podían demostrar su lado lleno de maldad, así que había aprendido a observar en silencio.
Se dió un trago de su copa, y levantó el rostro para encontrarse con una chaqueta de brillo, ¿Quien demonios vestía de esa forma? Se fijó bastante, pelo claro, ojos claros, nariz refinada, perfecta dentadura, buen físico. Sería todo un clásico para su cama.
No llevaba ningún tipo de joyas, y nunca lo había visto en la reunión. ¿Mafioso? No lo parecía pero por algo estaba allí, de forma disimulada tocó el hombro de Omar que se encontraba a su lado.
— "¿Quien es?" — Dijo.
— "Es Richard Carvalho... Él y su esposo son los dueños de este hotel, así como de otros clubes en el cual solemos reunirnos." — Aclaró.
— "Este es parte de tu territorio ¿no? ¿Te paga alguna cuota?" — Preguntó Matthews sin despegarle la vista.
— "No. Esta parte es excenta de cualquier cuota, al igual que muchos de sus negocios. Su esposo es muy inteligente, y tiene algunas relaciones con mafias extranjeras que no sería buena tenerlas metida aquí pero si para nosotros hacer negocios."
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SIEMPRE FIEL.
RomanceUn corazon ardiente que espera el momento justo para saltar y ahogarse en el precipicio de un amor que no parece ser correspondido. Ed Kind quien cae profundamente enamorado de un mafioso luego de años de ser su guardaespalda, decide confensarse aun...