ED
Luego de esos mensajes no pude conciliar el sueño sino hasta altas horas de la noches. Matthews descansó a mi lado mientras yo me martirisaba con las fotos.
"¿Quién eres? ¿Porqué me envias esto?" — Le respondí.
No hubo respuesta. Así que decidí no prestar atención, era solo para obtener mi atención. Esa mañana Matthews despertó de temprano, tomó una ducha y dijo que tenía algunos negocios que hacer, se despidió con un simple beso.
Estuve todo el día pensativo, pensando en la misma cosa una y otra vez, ¿Que tal si me engaña? Matt no era un santo, y yo lo sabía mejor que nadie.
Miré varias veces la pantalla de mi celular para ver si había llegado algún otro mensaje, pero nada. En ese momento Jhan apareció frente a mí.
— "¿Estás bien?" — Preguntó.
— "Si. ¿Porqué?" — Pregunté aún mirando la pantalla de mi celular.
— "No sé, he pasado varias veces y te veo pensativo. Me hace pensar que sucede algo." — Comentó tomando asiento a mi lado.
— "Ah..." — Fue lo unico que dije, no estaba seguro si podía hablar abiertamente de estos temas con Jhan.
— "Anda. Sé que te pasa algo, a pesar de todo somos amigos ¿no?" — Dijo sonriendo.
— "Recibí algunas fotos de Matt, creo que son antiguas, al menos eso quiero pensar. — Le mostré las fotos. — No sé quien me las ha enviado, le he respondido pero no hay respuesta... Me tiene pensando, se que Matt no es un hombre muy tranquilo y tiene un deseo sexual muy activo."
— "¿Piensas que te esta engañando?"
— "No lo sé. Ahora mismo estoy practicamente desligado de lo que hace cuando no está conmigo, pero he estado en muchas de sus reuniones para saber como son. Y sé que de la noche a la mañana no va a cambiar." — Afirmé y en ese momento mi celular volvió a sonar emitiendo un sonido.
Desbloquee el teléfono inmediatamente y esta vez eran más fotos pero no de el, parecían de ser de una conversación.
"¿Nos veremos esta noche?" — Decía Matth.
"Claro. ¿Porqué no? ¿Irás con tu gigante? Es mejor que lo dejes... vas a tardarte esta noche." — Respondió la otra persona.
Solo una persona solía llamarme gigante. Y era el tipo que menos me agradaba.
"Debo de tener alguien que me lleve a casa, ¿Porque te preocupas por el? deberías de preocuparte en comerte mi tras**** con mucha paciencia y dedicación."
"Sabes que lo haré. ¿Quieres que esta vez te hate de la esquina de la cama?"
"Eso sería fabuloso. Ahora tengo negocios que hacer, adiós."
Dejé el celular a un lado, era obvio que esto me había hecho incomodar más de lo que me habían hecho incomodar las fotos. Al parecer aún era su guardaespaldas en ese momento, entonces la conversación parecía ser vieja. No hace tiempo que comenzamos con una relación seria así que no debería de enojarme por cosas que no pasaron recientemente.
— "Creo que eso no fue agradable." — Dijo Jhan.
— "No estaba en una relación conmigo, no es reciente. así que no debo de molestarme ¿no? " — Dije.
— "Tal vez, no. Pero deberías de afrontar quien te está enviado esta información, porque obvio que no tiene un lindo propósito." — Dijo Jhan.
En ese momento tomé mi celular, intente llamar varias veces pero no me daba acceso a llamar. Era obvio que tenía que investigar quien demonios era el dueño de ese número, no se me ocurría nadie más que Miguel Angel, pero no quería que Matthews se enterara.
— "¿Que haras ahora?" — Preguntó Jhan.
— "Ya se que haré." — Dije.
llamé a Miguel Angel, tuve que tratar algunas cuantas veces para que respondiera.
— "¿Que?" — Respondió secamente.
— "Necesito un favor de tu parte." — Respondí.
— "No hacemos favores, ¿Cuanto vas a pagarme? " — Dijo, y luego explotó en una risa. — "Tranquilo, aunque esos favores que pides no me gustan, siempre tienen que ver con algo malo. ¿En que quieres mi ayuda?"
— "No puedes contarle a Matthews". — Le dije.
— " Creo que esto es un deyabu ¿no? porque me habias dicho eso antes." — Dijo.
— "No estoy bromeando... es en serio."
— "Siempre es a lo serio contigo, habla de una vez." — Dijo.
— "Quiero saber alguna información de un número, alguien me esta enviado fotos y conversaciones de Matthews" — Dije y del otro lado de la linea hubo silencio.
— "Entonces supongo que ya comenzaron los ataques del concejo. — Dijo y rio. — "Eso es una forma cobarde de iniciar, pero inteligente".
— " ¿De que hablas?"
— "No todos estas contento con que Matthews no fuera destituido así que van a desacreditarlo y tu eres un punto clave ¿Tan dificil de entender? No te sorprendas si encuentras algunas fotos de Matt teniendo sexo candiente..." — Dió una risa. — "Sería lo de menos. ¿Tienes algun número de teléfono para mí?"
— "Claro. Es xxx-xxx-xxx."
— "Ok, te llamaré desde que tenga info." — Colgó.Me giré a ver a Jhan que continuaba ahí mirandome con rostro de "Te dije que esto no era buena idea" además yo sabía lo que era implicararse con Matthews pero lo mismo que detestaba de el era lo mismo por el cual me había enamorado de él.
Miré mi telefono, no iba a contestar de nuevo a esos mensajes, pero tampoco quería bloquear el número solo por curiocidad. Llame a Matthews a su celular, intenté varias veces pues la primera vez fue fallida al igual que las demas.
En ese momento, mi cell volvió a sonar, donde me enviaban una foto de Matthews saliendo de un auto negro, y quien lo acompañaba era el maldito imbecil de la conversación anterior. ¿Que demonios? y un mensaje acompañado: ¿Que estaría haciendo?
Lancé mi celular al sofá, no era un niño para dejarme consumir por celos ni nada de esa porquería. Era obvio que lo que querían formar era conflictos entre nosotros dos. Me fuí hasta mi habitación para intentar despejar la mente, y luego de media hora que volví a tomar el telefono me encontré con varias llamadas de Miguel.
Así que lo llamé de vuelta.
— "¿Conseguiste algo?"
— "No mucho. Quien actualmente esta manejando ese telefono sabe lo que hace, no puedo rastrear la señal del teléfono, y la información actualmente esta en nombre de un difunto, no tenemos pistas que conseguir." — Dijo Miguel.
— ¿Que recomiendas que hagas?
— "No hacer caso, al fin y al cabo son mamadas. De todas formas intentaré hackear o obtener más información. Y te dejaré saber." — Comentó.
— "Bien."
colgó la llamada y en ese momento Matthews ingresó a la casa. Lo miré fijo.
ESTÁS LEYENDO
SIEMPRE FIEL.
RomantizmUn corazon ardiente que espera el momento justo para saltar y ahogarse en el precipicio de un amor que no parece ser correspondido. Ed Kind quien cae profundamente enamorado de un mafioso luego de años de ser su guardaespalda, decide confensarse aun...