Mi lugar favorito - Juan Pablo Villamil

.8. segunda temporada

Narrado por Juan Pablo Villamil

Abri mis ojos con molestia luego de escuchar el timbre. No podía creer que vinieran tan temprano, por un momento pensé que quizás era mara con nuestra hija, pero si así lo era, entraría a casa como siempre lo hizo.

Al llegar a planta baja me acerque a la puerta y limpiándome el rostro con las manos me apoye en esta.

- ¿Quién?

- Yo

Abrí mis ojos con sorpresa al escuchar su voz del otro lado de la puerta. ¿Qué hacía aquí?

- Gabriela – murmuré una vez que abrí la puerta - ¿Qué haces aquí? ¿Cómo supiste donde vivo?

- Veo que recién despiertas – sonrió e ingreso a mi casa – preguntando – movió sus hombros como si nada – no me llamaste

- Si – aclaré mi voz – no tuve una buena semana

Ella observo a su alrededor y yo aún no sabía que hacia aquí y menos que hacia yo parado ahí sin saber qué hacer.

- Linda casa – volvió su vista hacia mí – la decoraste bien

- Si, Mara es buena en esto – me golpeé mentalmente cuando dije su nombre frente a ella

- Mara – murmuro – así que así es su nombre

- Si – susurre, que gran estúpido soy – su nombre es mara

- Y ¿Dónde está? – frunció el ceño – quisiera conocerla

Quede en silencio frente a su pedido, no veía a Mara desde hace más de una semana y no hacerlo era torturante. Trague saliva nervioso y ella solo me observo expectante.

- Nos dimos un tiempo – confesé, error número dos del día

- ¿de verdad? – su sonrisa comenzó a formarse de forma gradual – entonces

- ¿entonces? – fruncí el ceño confundido

- Podemos salir a pasear un rato juntos – se acercó a mí de forma provocadora – no me negaras un café ahora, ¿o sí?

Me quedé en silencio por unos minutos y sin pensarlo negué, ella volvió a sonreír con emoción y yo solo quería saber que estaba haciendo conmigo en ese momento.

- Iré a cambiarme – murmure, ella solo sonrió y tomo asiento en el sillón

Sin decir nada más camine escaleras arriba para poder tomar un baño y vestirme rápidamente. Quizás podía comenzar por esto, por cerrar o quizás ver que era lo que me pasaba con ella verdaderamente.

Narrado por Mara Bonnaire

Isaza estaciono fuera de mi antigua casa, observe con tristeza aquel lugar. Sentía tanta angustia de no poder volver como lo había hecho durante dos años. Cuando llegue a la puerta suspire nerviosa, podía entrar ya que tenía la llave, pero no quería invadir su espacio, ni que pensara que estaba desesperada. Toque timbre y medite varias veces mi discurso, en mis manos tenía el sobre.

La puerta se abrió, una mujer de mi estatura me observaba de arriba abajo. Fruncí el ceño confundida, ¿Quién era?

- Hola, ¿Qué necesitas?

- Am hola – murmure con confusión - ¿villa?

- Se está bañando

- Oh – fue lo único que pude decir

- ¿tú eres? – frunció el ceño confundida

- Mara – hable rápidamente – mi nombre es mara

- Mara – sonrió y se puso en el medio de la puerta, sentí que quería intimidarme – mi nombre es Gabriela – extendió su mano