- Tío
Llame la atención del tío Ricky, el volteo con sorpresa a verme
- Cata
- No le digas a mama que estoy aquí – suplique – quiero ver a papa
- Cata – el trago saliva y suspiro – no quiero que lo veas así
- Por favor, tío – mis ojos comenzaron a ponerse rojos – necesito verlo
El suspiro y asintió, comenzó a caminar, pero volteo rápidamente a verme.
- Quiero decirte algo antes – nerviosa lo observe atenta – tu papa por ahora no va a despertar
- Pero ¿me escuchara? – me había dolido tanto saber que él no iba a abrir sus ojos
- Él siempre te escucha, Cata - susurro y sonrió
Camine detrás de mi tío nerviosa, nunca había estado en este lugar y me parecía tan triste que él se encontrara en una sala tan fría y solitaria como era la parte de terapia. Mi tío me dio una vestimenta extraña para poder entrar, comenzó a reírse cuando termine de vestirme con el traje azul por lo grande que me quedaba y me señalo la habitación en donde mi papa se encontraba.
Abrí la puerta e ingresé lentamente. Me acerque a él y mis lágrimas comenzaron a caer. Tenía muchos cables y un respirador, tenía miedo de que estuviera muerto de lo tan quieto que se encontraba.
- Papito – murmure y me senté en la silla que había cerca de su cama – papi, soy cata – quería que se moviera, que hiciera algo – soy yo papa, tu pequeña arañita - mi corazón se estrujo con fuerza frente a esas dos palabras – siempre voy a ser tu arañita – confesé – el tío Ricky me dijo que tú me escuchas – tenía esa ilusión intacta – tu siempre me escuchas, papa. No me dejes aquí – suplique – perdóname, no te odio – me angustiaba el hecho de no escucharlo decir que me quería – papi por favor, me prometiste que no me dejarías nunca – suspire – te necesito conmigo, mat te necesita y mama – me detuve al recordar la escena del día anterior – mama se encuentra muy mal, se siente muy sola sin ti y yo también – susurre – papi, necesito que vuelvas – suplique – necesito contarte cosas y que explotes con tus crisis pero que también me abraces – tome de su mano, seguía siendo más grande que la mía y me recordé de pequeña cuando vivía pegada a el – Pa, tenemos que dar conciertos y cantar juntos – sonreí observando su mano – anda, despierta – suplique nuevamente – te necesito mucho, papa – me limpie los ojos – quédate conmigo, no te vayas
Lleve mi mano a su mejilla, a lo que quedaba de espacio en ella, ya que con aquel respirador gigante no podía acariciarlo con totalidad. Mis lágrimas caían sin cesar, quería que papa se despertara, que hiciera algo.
- Papito – grite emocionada – volviste
El comenzó a reír y se inclinó para que pudiera abrazarlo. Me levanto con él y me aferre a su cuello con fuerza. cada vez que se iba lo extrañaba y aunque amaba que cantara para muchas personas, siempre quería que se quedara mucho tiempo conmigo.
- Hola mi pequeña arañita – sonrió cuando lo observe - ¿me extrañaste?
- Si – acaricie sus mejillas y ambos pegamos nuestras frentes divertidos – te extrañe mucho papito – volví a abrazarlo con fuerza y apoye mi cabeza en su hombro – no te vayas tanto tiempo
- Siempre vuelvo, mi amor – beso mi cabeza
- No me dejes tanto tiempo sola – susurre
- Jamás te dejare sola arañita, tu eres mi bebe – confeso – mi pequeña arañita
Reí cuando mi cabeza trajo ese momento a mi cabeza, papa siempre volvía y siempre me abrazaba con más fuerza que antes, como si tuviera miedo de que me vaya. Me protegía con fuerza y yo lo trate tan mal, el tenía que saber que habían jugado con él y que jamás quise que esto sucediera.
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Mi lugar favorito - Juan Pablo Villamil
FanfictionSiempre se nos pregunta cual es nuestro lugar favorito, esperando que nuestra respuesta sea algún lugar de toda la esfera azul en donde estamos parados. Pero... ¿Y si el lugar al cual llamamos favorito se convirtiera en una persona? #1 fanficmorat ...