Mi lugar favorito - Juan Pablo Villamil

.36. II . FINAL . segunda temporada

- oye – llame su atención, el me observo curioso – te ves lindo

- lo sé – murmuro divertido

rodee mis ojos divertida, el tomo de mi cintura para atraerme más a él y con una sonrisa se acercó a mi boca para besarme lentamente. Desde que salimos de la iglesia no paro de besarme y no podía negarme a sus labios, aunque por unos momentos queria ser respetuosa con los invitados. Nos encontrábamos sentados en nuestra mesa, alrededor nuestro había flores, mucha vegetación y tranquilidad como el parque alejado de la ciudad que tanto amábamos.

- Eres tan narcisista – murmure divertida sobre sus labios y lleve mis manos a sus mejillas

- Y tú eres tan hermosa – comento y jugo con mi nariz

- Bueno, ya lo entendimos

Ambos nos separamos y elevamos nuestra vista hacia Isaza que nos observaba divertido.

- Ya entendimos que están con sus hormonas alteradas, pero por favor – suplico – hay gente y están todos observándolos

Ambos nos observamos de reojo y terminamos por reír por su suplica. No cambiaria ni en un millón de años, pero también se lo merecía.

- Déjanos de molestar – comento villa – estamos recién casados, tú estabas igual o peor que yo ese día – sonrió – así que, por favor, ve a sentarte

- Me encantaría, pero necesito que me ayudes a poner orden – murmuro y señalo con su dedo un punto del gran jardín en donde habíamos decidido hacer la fiesta

Fruncí el ceño y con Villa volteamos a ver a donde señalaba. Abrí mis ojos con sorpresa cuando vi a Luca abrazar a Cata y de verdad, darle un beso en la mejilla. Ella reía levemente frente a ese acto. Lleve mis ojos rápidamente a villa, me encontraba sorprendía y con una mezcla de ternura dentro pero el parecía que no estaba muy contento con la situación.

- Ay me va a dar algo – llevo su mano a su pecho – mi amor, me va a dar algo

- ¿Qué tal? – Moncho aparecía con una sonrisa y movió sus cejas divertido – ¿ya viste la linda pareja que hacen nuestros hijos?

- Ya dejen de molestarlo – hable con diversión – no ven que puede sufrir de un infarto – acaricie su mejilla, villa no dejaba de observar la escena – mi amor – lo llame – villa, espero que no estés pensando

Duro solo unos segundos que se levantó de su asiento y fue tras su hija. Rodee mis ojos divertida frente a eso, era una niña que no entendía nada aun, pero él se empeñaba en evitar que sociabilice con otras criaturas de su sexo opuesto. Hasta en nuestro casamiento no dejaba de estar al pendiente de que Luca se le acercara a la pobre. Moriría virgen por su culpa.

- Yo solo quería que me ayudara – murmuro Isaza cruzándose de brazos

- Si arañita – escuche la voz de villa cerca, tomo asiento a mi lado junto con nuestra hija – eso está mal, no tienes que dejar que ningún chico te bese, excepto papa

- Villa – murmure molesta

- ¿Qué? – volteo a verme

- Mami – cata tiro sus bracitos hacia mi

- Hola mi amor, ¿papa no te deja jugar con tus primos? – le hable tomándola en mis brazos, bese su mejilla con ternura

- Si la dejo, solo que a cien metros de distancia – comento tranquilo

- Ya, déjala en paz – Moncho hablaba esta vez

- Tu – lo señalo con seriedad – controla a tu hijo, es mi hija