¡Bienvenidas a un segundo libro de one-shots de estos bellos personajes!
Al igual que el anterior, aquí encontrarán de todo, incluso algunas segundas partes de one-shots del primer libró, además trataré de escribir one-shots "dinámicos" (más adelant...
(Perdón por el título pero fue lo mas apegado a la historia que se me ocurrió xd)
-Roderich...-.
-¿Qué sucede T/N?-preguntó mientras tocaba el piano.
-¿Por qué no llevas puesta tu camisa?-preguntó T/N mientras lo miraba.
-Hace mucho calor -contesto como si nada.
-Ah...-.
Aquello era inusual, sin embargo era algo lógico después de todo era verano y hacia más calor que el normal.
-Bien...iré a darme un baño -dio media vuelta y salió de la habitación.
-Esta bien -contesto él concentrado. Sin embargo cuando T/N dio la vuelta la miró de reojo y sonrío levemente.
...
Luego del baño T/N fue a la sala de estar, tenía en mente ver una película —o estar en el celular— sin embargo algo lo impidió.
-¿Qué hace dormido ahí?-preguntó mientras se acercaba al sofá. Roderich estaba acostado, sus lentes estaban en el suelo y como antes, no usaba su camisa.
Se acercó a él y miro su rostro, era bastante atractivo, sus facciones eran finas pero varoniles, su cabello estaba un poco despeinado pero nada acababa con su encanto.
-Se ve tierno cuando esta dormido -susurro mientras sonreía levemente.
Acarició su rostro con delicadeza para luego ir bajando poco a poco hacia su torso. Suspiro hondo para luego alejarse un poco de él sin embargo fue jalada hacia el sofá, cayendo encima de él.
-Sabes que soy algo fácil de provocar, ¿no?-preguntó el austriaco mientras la miraba a los ojos y la sujetaba de la cintura.
«Diablos señorito», pensó ella.
Sin esperarlo el contrario unió sus labios con los de ella, empezó como un beso romántico y tierno pero poco a poco se tornaba apasionado; sus manos se adentraron en la blusa que T/N llevaba puesta para luego empezar a jugar con sus pechos.
-Roderich...-jadeo.
Retiro aquella prenda junto con el sostén; beso mordió y lamió su cuello dejando algunas marcas que posiblemente serían muy notorias al día siguiente, acto seguido fue bajando sus besos hasta sus pechos; siguió con sus besos y caricias en esa área mientras que T/N acariciaba el pecho y espalda del contrario. Sin esperarlo el ojivioleta cargo a la chica para acostarla en el sofá, luego se quitó su pantalón junto con su ropa interior; sin embargo T/N no se quedó atrás: retiró su short y ropa interior. La reacción del contrario fue lamer sus labios sin dejar de mirarla.
-Eres hermosa -susurro él.
Nuevamente poso sus labios en su pecho mientras acariciaba la intimidad de la chica, luego fue bajando sus labios hasta su vientre; la miro con picardía mientras que T/N lo miraba fijamente a los ojos; sus mejillas estaban un poco rojas y su cara tenía una ligera capa sudor. Al final bajo sus labios a su clítoris, lo cual estremeció más a T/N y de paso le saco un gemido. El austriaco siguió brindándole placer a su pareja con su lengua mientras sus manos acariciaban sus muslos.
-Roderich -gimió -Si sigues así voy a venirme...-inconscientemente su cuerpo vibraba por el placer y sentía llegar su orgasmo pero de pronto el castaño detuvo sus movimientos. T/N lo miro con el ceño fruncido mientras intentaba regular su respiración, iba a reclamarle por que se había detenido, sin embargo sintió dos dedos introducirse en ella, sacándole un gemido sonoro.
-Estas muy mojada T/N -susurro en su oído -Me encanta verte de esta manera -mordió su oreja levemente pero aún así escucho jadear a la contraria.
No paso mucho tiempo cuando los dedos del ojivioleta fueron cambiados por su miembro. T/N no podía hacer más que gemir y arañar la espalda del contrario mientras que él la embestía lentamente, sin embargo aumenta el ritmo de sus embestidas, brindándole más placer a T/N.
-Roderich...-jadeo -Más...¡ah!, rápido -pidió ella, el mencionando obedeció ante su petición.
-T/N -jadeo -Estoy a mi límite...-trago saliva -Yo...-no término su oración pues la chica lo tomo del cuello para poder unir sus labios en un beso apasionado. Bastaron pocas embestidas para que él se corriera dentro de ella y unos segundos después el orgasmo de ella apareciera, apretando el miembro contrario y brindándole una sensación aún más placentera.
-Te quiero -susurro Roderich en su oído para luego recostarse en el pecho contrario -Me encantas-. La contraria aún recuperando el aliento sonrió con ternura, ¿cómo podía ser tan sexy y tierno al mismo tiempo?.
-Perdón por lo que diré pero...diablos señorito -comento ella, Roderich bufó.
-¿Podrías dejar de usar ese meme conmigo?-.
-Perdón pero te queda a la perfección -sonrió con cierta burla.
-Tonta -le sonrió para seguir acotado en su pecho-.
-Te amo-.
-Yo también te amo, señorito-.
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