CAPÍTULO 6

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16 AÑOS

El instituto, esa fase de la vida en la que cada problema es un drama y parece que el mundo está contra ti en cada momento.

Sin embargo, para mí no fue tan malo, al menos, la mayor parte del tiempo.

Las chicas querían ser mis amigas y ya no se burlaban de mí. Por supuesto, no era por mi encanto personal ni mi simpatía, sino porque era la manera más fácil de acercarse a Liam, a Jason y a alguno de nuestros amigos.

Ellos me decían con quién querían quedar y con quién no, y yo hablaba con ellas. Era un arreglo que a ellos y a ellas les venía bien, pero nadie pensaba en mí.

Yo veía cómo tenían sus citas, cómo se besaban en los pasillos, pero nadie quería quedar conmigo. A mí nadie me besaba desde el día que Jason lo hizo para aprender a besar a la chica que le gustaba.

La mayoría de los chicos me trataban con respeto y mucho de ellos eran mis amigos, pero nada más. La amenaza de enfrentarse a mis hermanos era aterradora para ellos.

Un día, Cole Jackson se acercó a mí en la cafetería. Estaba sentada sola esperando a que Liam y Jason terminasen de verse con sus amiguitas de este mes.

- ¡Ey! ¿Estás sola? – preguntó Cole acercándose a mi mesa.

- Vaya, eres muy perspicaz, ¿verdad? - Creía que eso era evidente, no había nadie más en la mesa que solíamos ocupar nosotros. El chico me miró ignorando mi observación y se sentó frente a mí. Dejé mi bocadillo, apoyé los codos sobre la mesa y mi cara sobre mis puños observándole esperando que dijese lo que venía a decir.

- Te he estado observando últimamente y me gustaría invitarte a un helado o algo -levanté las cejas sorprendida. ¿Me estaba proponiendo una cita? - Bueno, supongo que comes helado, ¿no?

- Sí, habitualmente- respondí cuando reaccioné a lo que me estaba proponiendo.

- Y ¿quedas con chicos? – con cada palabra que decía, me daba una nueva confirmación de que no era muy espabilado.

- También habitualmente - no especificó de qué manera quedaba con ellos, así que no mentí, normalmente, solo quedaba con chicos.

- Bien, entonces, quedamos el viernes a las cinco. ¿Paso a buscarte?

- ¿En serio piensas venir a mi casa y presentarte delante de mis hermanos? - eso sí que sería una prueba de valor de verdad. Cole me miró casi suplicante para no hacerlo - Quedamos en el centro comercial - decidí librarlo de una situación complicada.

Llegó Jason y Cole se despidió y se marchó.

- ¿Te ha pedido una cita? - preguntó Jason sorprendido y algo molesto.

- No, solo iremos a tomar un helado- aclaré.

- Eso es una cita- confirmó Jason serio.

- ¿Quién tiene una cita? - Liam se sentó junto a mí dispuesto a devorar su comida en los cinco minutos que nos quedaban de descanso.

- Nadie - me apresuré a decir.

- Nicky - rectificó Jason buscando apoyo en Liam.

- ¿Nicky? ¿Con quién? - la cara de sorpresa de Liam me molestó.

- He quedado para tomar un helado con Cole Jackson- dije antes de que Jason pudiera hablar.

- No es una buena idea -dijo Jason mientras Liam continuaba con la sorpresa en su cara.

- Ya, al parecer sois los únicos que podéis tener citas. Claro, ¿quién se iba a fijar en mí? - me puse en pie y los dejé allí sentados.

- ¡Eh! Nicky, no quería decir eso, claro que se pueden fijar en ti, serían tontos de no hacerlo, es solo que ¿Cole Jackson? Puede tener a quien quiera- dijo Jason casi gritando en mitad del comedor.

El quinto hermanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora