¡NO TE RINDAS! || Naruto Uzumaki x Tú ||

Capítulo 81

El Juubi vuelve a lanzarnos otro rayo pero aún con las piernas temblando y volviendo a usar el modo sabio me levanté y me puse frente a Naruto.

- Oye ____... - Naruto da un paso hacia mi pero yo hice rápidamente un dragón de hielo, cambié los sellos y usé el colmillo serpiente de agua y luego creé ráfagas de viento haciendo que todo eso desviara el ataque del Juubi y nos cubrí con muros de hielo.

- ____... - Escuché murmurar a Kakashi.

- Al fin... - Murmuré luego de sentir el chakra de toda la Alianza Shinobi.

Me quedaba tan poco chakra que mis piernas fallaron y caí sobre mis rodillas y mis manos.

- ¡____! - Naruto se coloca a mi lado apoyando su mano en mi espalda. Pero luego vi que sus ojos se volvían los de Kurama.

- ¡Idiota! Deja de gastar tanto chakra -

Sonreí y me reí un poco.

Vi sus intenciones de querer pasarme chakra pero levanté una mano deteniéndolo.

- Kurama, ahora mismo importa más que tú recuperes todo tu chakra a que yo lo haga... así que en lugar de preocuparte por mi concéntrate en recuperarte -

Él se me queda mirando.

- Tsk - Le devuelve el revelo a Naruto.

- Naruto, ____ ¿Están bien? - Pregunta Hinata acercándose.

- Si - Respondemos.

Los ninjas de la niebla hicieron una barrera para cubrirnos. Mis brazos temblaban notoriamente, Naruto al ver aquello hizo que me recostara por él y Shizune aparece para curarme.

Akamaru se acerca junto a Kiba y vienen hacia nosotros.

- ¡Akamaru! - Lo acaricié y él me lamió el rostro.

- ____-chan - Los chicos y chicas se juntan a nuestro alrededor en cuanto toda la Alianza llegaba.

- ¡____! - Miré a mi mamá acercarse corriendo y me abrazó efusivamente - Que bueno que estés con vida... -

- Lo mismo para ti, mamá - Respondí.

Cuando la niebla se dispersó todas las aldeas comenzaron a hacer un ataque muy sincronizado hasta dejar al Juubi en un cuadrado hundido en la tierra y con cemento para detenerlo.

Me levanté e hice el rasengan de hielo para congelarlo y destruir, aunque sea, algunos brazos y colas del Juubi.

Naruto hace su rasen shuriken.

Todos saltamos hacia el Juubi pero vi que este pareciera que sus brazos florecían algo por lo que lancé el rasengan hacia ellos congelándolo.

- ¡Todos, cuidado! - Dije y creé un dragón de hielo agarrando a los que podía para subirlos en el momento que el Juubi rompió mi hielo y más brazos aparecieron empujándonos.

Agarré a Naruto que era al que tenía cerca y chocamos contra el suelo aunque yo amortigué la caída de Naruto sin haberlo planeado y también sentí que un escombro de una piedra partida corta mi rostro.

- ¡Mierda! - Dije cubriéndome el ojo adolorida.

- ¡____! - Naruto me sujeta por los hombros y alguien del cuerpo médico se acerca rápidamente.

- Ah... maldición, duele... - Murmuré.

Tenía una cortada en el lado derecho de mi rostro que pasaba desde mi sien hasta el costado de mi nariz. Por lo que mi ojo... salió muy perjudicado.

La sangre brotaba a chorros de mi rostro, dolía horrible que tuve que apretar los dientes para no gritar de dolor.

El Juubi sale del agujero en el suelo como si hubiera evolucionado.

Naruto me sujeta por detrás de los hombros mientras la del cuerpo médico trataba de detener el sangrado.

- Lo siento... el ojo no es posible de curar - Dice separando sus manos, al menos la sangre dejó de brotar.

- Que más da, tendré que acostumbrarme como Kakashi-sensei - Mencioné.

Mi mamá y algunos de los chicos se acercan. Ella me miraba preocupada mientras se acerca a mi y apoya su mano en mi mejilla.

- Descuida mamá, estamos en guerra, tengo suerte que no haya muerto en todo caso - Dije - Aunque... esto queda horrible - Me reí un poco amarga.

- Dios mío - Dice mamá riendo por mi comentario - Eso no importa ahora pero tampoco es cierto - Dice.

Nos levantamos aunque a mi se me dificultaba un poco ya que me mareaba por la pérdida de sangre y chakra.

Naruto me sujetó.

Yo apenas podía ver bien con un solo ojo, mi campo de visión se redució y mucho...

El Juubi comienza a disparar a cualquier lado varias veces hasta que hizo un disparo que todos nos dimos cuenta hacia donde iba.

Pero mientras eso ocurría, los del cuartel nos transmitían como detener al Juubi.

Miré a Ino y Shikamaru, Ino estaba lagriemando y yo la abracé.

- Estamos en plena batalla, el resto no tiene importancia. Lo mismo va para ti Ino... -

- No seas tan duro Shikavago... si eso les pasara a ustedes yo estaría desecha en lágrimas... - Dije y me separé de Ino - Pero tienes razón, estamos en plena batalla... y hay que ganarla por todos los que cayeron. Porque su espíritu sigue con nosotros -

- ¡Si! -

- ¿Huh? - No me había dado cuenta que inspiré a algunos más de otras aldeas inclusive. Me puse roja y me rasqué la nuca nerviosa.

Naruto me abraza sonriendo.

- Eres la mejor, dattebayo... -