Se reanuda la trama de la novela.
Esto si va al hilo de la historia.
Déjenme saber si quieren continuación de extra navideño!Dato extra: para mejores experiencias pongan las canciones que dejo escritas! Les da un toque...
***
—Mírame.
Me exigió. Los toques se sintieron como metales calientes sobre mi piel y cada vez más me sentía más débil ante el.
Evan besaba y mordía mi piel de una forma diferente a la que me espere. Estaba por sobre mi, y el impulso de sacarlo por encima mío llamaba.
La brisa se pegaba a mi piel húmeda y sentía cada vez más el vacío dentro de mi al no reaccionar. Sus labios llegaron dando besos húmedos por mi cuello y clavícula dejando un camino que me gustaría recordar para el resto de la noche...
—Leo...—gemí ante un toque muy específico. Abrí los ojos de par en par por haberla cagado, por haber dicho el nombre de la persona que en verdad deseaba recorriendo mi piel. Lleve las manos a mi boca tapándola.
La cabeza de el se levantó mientras esperaba a ver a Evan desconcertado o enojado, pero ya no era Evan...
—Sabes que eres mia.—Leonardo estaba en frente mío con sus manos a los costados míos mientras mis ojos recorrían su cuerpo desnudo y sus tatuajes.—Y que no dejas de pensar en mi...
«¡No!»
Me levante y esta vez si abrí los ojos de verdad. Estaba tirada al lado de Rena en su casa todavía amaneciendo.
«Dios mío.»
Los sueños se me estaban pasando de lejos, y la verdad es que no me incomodaban. Todavía no tenía el valor de enfrentar a Evan luego de lo que sucedió anoche y la verdad con el papel firmado para mantener mi escuela me bastaba.
Pase las manos por mi cara desesperada de mi cabeza descompuesta. Me paré y sin darle explicaciones a Rena me vestí. Sonreí ante sus comentarios de que me la habían metido hasta la garganta gracias a que se me dificultaba caminar por el roce y por el ardor en mi vientre que me había dejado el italiano.
Salí entre risas y pensamientos confusos dispuesta a sumirme en mi cuarto unos dos días más debutando que haría. Me sentía sucia y como una zorra. Porque lo era. Hacia decepcionado a Evan y lo peor es que estaba consciente todo el rato de lo que había hecho con el italiano, pero lo más indignante era que no me arrepentía de nada...
El día estaba normal mientras caminaba hacia casa. Iba distraída mientras me mordía los cueros de mis uñas únicamente de nervios o de ansiedad. Sabía que si volvía ahí debería abrir la maldita información del homicidio de mi padre.
Voltee en una esquina cuando quede pasmada. Un carro rojo brillante deportivo estaba fuera de mi casa.
Abrí la boca un poco sorprendida y camine preguntándome que ricachon de había traído mi madre esta vez pero volví a asegurarme de que su carro no estaba. Una leve sensación extraña me recorrió gracias al recordatorio que no había visto a mi mamá hace días.
Lo ignore mientras me acercaba a aquella máquina de miles de euros. Me asegure de que nadie estuviera dentro del carro y observé la patente.
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Sombras que aman (borrador)
RomanceSAGA SOMBRAS - Libro I (Completo) «Mafia, ¿que es la Mafia? ¿Y que lo hace tan interesante...? No lo sabía y la verdad tampoco me interesaba en esta altura. Mi vida cambio de un segundo a otro el momento que pise el club "Casa Nostra", al ver al 1.8...