Sombras que aman (borrador)

Capitulo 55

MAIA

—¿Viste afuera?—preguntó Rena cuando me reencontré en la entrada del baile con ella. Iba preocupada a la hora de verle y pude entender cuando más atrás, tal vez unas calles, había una Hummer militar.

Globos rojos y negros decoraban la entrada mientras parejas entraban emocionadamente para empezar con su última noche en la escuela. Los vestidos largos de todas estaban de lo mejor mientras que Sorry Not Sorry sonaba desde fuera.

—¿Que?—pregunte confunfida. No tenía más mente que no fuera el vestido rojo que tenía de Leo en mi piel. En como burlo todo para salirse con la suya.

—Esta la FBI.

—¿Que?—volví a preguntar como estupida cuando me pegó en la cabeza haciendo que reaccionara. Evan estaba conversando con Cole mientras Rena no dejaba de tratar de avisarme de algo.

—Están buscando a Leo y a Patrick aquí.—aseguró cuando por fin mi atención se fue a ella.—Saben que la escuela casi pertenece a ellos, y están acá esperando... creen que va a venir.

«No»

—¿Como sabes?

—Le pregunté a uno de los oficiales.—respondió sonriendo orgullosa de sus acciones.—Era bien guapo, se llamaba Archie...

Ahora no solo tenía un problema encima. Si no dos. El vestido y la posible visita de Leo a destruir la escuela en mil pedazos con todos entró en la lista de preocupaciones. Eso no podría terminar bien pero tenia que mantener la compostura y la razón para no verle y llevar a cabo mi plan de Las Furias el día de mañana.

Atenea se amarró al brazo de Rena cuando ingresaron y me tocó hacer lo mismo con con Evan. El aroma de Evan me distrajo y le encontré observándome mientras sonreía, me forcé a hacer lo mismo.

A lo lejos podía ver a Agatha bailando junto a Jaden en cuanto me miro Jaden y me saludo como niño pequeño. Sonreí mientras un forografo nos sacaba una foto. Aquel chico era diferente al resto y me agradaba que estuviera con mi hermana.

—Todos te están viendo...—susurró Evan depositando un beso en mi oreja. Reprimí las ganas de alejarme.—La suerte de que seas mia por esta noche...

Me estremecí y me tensé ante sus palabras. Algún día tendría que entender que estaba saliendo con el. De que no era más un juguete de Leonardo Romano.

La mano de Evan agarró mi cintura volteándome y obligándole a besar lo cual hice. Sus labios eran suaves y tiernos, al contrario del italiano con besos agresivos que cuando menos lo esperabas ya estabas con las bragas abajo.

—Vamos.

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La noche se pasó en bailes, abrazos grupales, ver como Rena sacaba petacas llenas de tequila que infiltraba en nuestros vasos. Bailes en pareja sensuales y románticos. Todo aquello que una niña imaginaba en una película a lo High School Musical estaba aunque yo me sentía como la extra de Sharpey en este momento.

No dejaba de observar las posibles entradas de la escuela ni de sentirme obsevada.

«El no vendrá. No es tan estupido.»

Dijo mi conciencia mientras me empeñaba un cuarto de la petaca de mi amiga.

Por otro lado, Jaden me explico que se le había salido a el frente a Leo que yo estuve buscando vestidos y que le dio pena que no hubiera encontrado. Bien, después Leonardo me regalo esta preciosidad marcándome como si me estuviera meando como un maldito perro dóberman.