To be so lonely || Bill Weasley.

MAGIC.

-Papá me envió una carta, nos recogerá en King Cross- Theo se echó al sillón donde trataba de leer para el examen de Adivinación. Era una excelente alumna en todas las materias, incluso el sombrero pensó en enviarme a Ravenclaw pero nada de lo que decía Trewlawney tenía sentido para mí: era como si una parte de mi mente se bloqueará en la esa estúpida clase.

-Eso es bueno, significa que pasaremos más tiempo con el este verano- Genuinamente quería disfrutar más con mi familia, tal vez los podría convencer de ir a un pueblo mágico cercano de nuestra mansión.

-Eso espero, no tengo ganas de escuchar a Malfoy maldecir a Potter...-

-OTRA VEZ- Dijimos al unísono y reímos.

Hoy por la tarde tenía mi último examen de Adivinación y estaba más que satisfecha por el desempeño de este año escolar, exceptuando pues esa materia obsoleta que solo me hacía estresarme. Siempre había sido muy buena en la escuela, pero para mi padre no importaba: a final de cuentas, sería la esposa millonaria de una sangre pura y no me tendría que preocupar por nada. Pero mi anhelo era ser sanadora y con esfuerzo, estaba segura que podría llegar a serlo.

Lo que más me emocionaba de este fin de curso, es que por fin vería a Bill Weasley nuevamente. Si bien, las cartas que nos enviábamos eran lo suficientemente frecuentes nada se comparaba con mirar su bello rostro. Tal vez exagero, pero de verdad ese hombre es HERMOSO.

Vía lechuza, como me gustaba llamarle, había conocido mucho más de él: Era el segundo hijo del matrimonio de los Weasley, había sido prefecto/premio anual en Gryffindor, Su trabajo de rompe maldiciones era sumamente peligroso pero le gustaba la aventura, Dijo no tener hermanos favoritos pero estaba segura que era la pequeña Ginny, Su color favorito era el rojo... obviamente, y lo que más extrañaba de su hogar era el postre de manzana que hacía su madre.

Termine el examen de Adivinación e impresionan mente me había ido muy bien, ahora estaba más que lista para disfrutar mis vacaciones con mi familia y amigos: a pesar de que no toleraba a Malfoy, me gustaba pasar tiempo con los demás Slytherins. Se sorprenderían de saber que en realidad Parkinson es una persona muy dulce o Blaise puede ser tan parlanchín y gracioso como los mismísimos gemelos Weasley, había convivido tanto con ellos que ya había aprendido a quererlos a mi manera.

Theo era una persona sumamente sensata pero aun así no era el líder del ''grupo'', eso se lo dejaban a Draco por ser el chico bonito pero incluso él tenía esos momentos brillantes donde me replanteaba si en realidad era una persona mala o mal ubicada. Vivir con Lucius Malfoy no creo que sea una forma divertida de vivir, es decir: no justificaba que Draco fuera una basura, pero si toda la vida le habían dicho que se comportará así... Realmente no estaba consciente de la persona en que se estaba convirtiendo.

En cambio, mi padres fueron unos magos extraordinarios y criados con esa idea del linaje de sangre pero jamás trataron de adoctrinarnos a sus ideales: ellos eligieron que Theo y yo decidiéramos cuando creciéramos que valores tendríamos como personas. Siempre me llamo el rumor de que mi padre había sido partidario de Lord Voldemort y lo consideraba capaz de serlo, pero jamás me había demostrado estar en contra de los mestizos: una parte de mi creo que fue porque todo cambio cuando mamá murió.

Yo tenía cuatro años y Theo dos, tengo vagos recuerdos de esa noche del 19 de marzo pero aún siento el grito de mi padre al encontrar el cuerpo frio de mi madre en la cama. Había estado enferma ese último año, todo se había complicado con el nacimiento de mi hermano pequeño pero un día simplemente no resistió: Yo solo recuerdo que cuando entendí que había pasado, un hueco quedo en mi corazón que nada jamás lo pudo llenar.

Sentí que me estiraban hacia un aula vacía mientras caminaba después de la hora de la cena.

-¿Qué rayos les pasa?- Frente a mí estaban los gemelos Weasley que me miraban con las cejas levantadas, si había hablado con ellos en persona más de tres veces durante todo mi tiempo en Hogwarts era mucho: ¿Qué rayos querían?