To be so lonely || Bill Weasley.

WE NEED TO PACK.

Un hombre alto corría de una choza a toda prisa chocando entre arboles enormes, veía desesperadamente hacia atrás pero no había nadie. Era una noche de luna llena y se notaba helada, al ver como el titiritaba de frio aunque también podía ser de miedo. De pronto un rayo verde choco contra él, provocando que cayera al piso gritando de dolor.

Unos hombres con túnicas y máscaras se pararon junto a él sin dejar de provocarle aquel tormento. El sonido de pisadas lentas fue suficiente para que aquellos magos oscuros se alejaran del hombre adolorido, un Avada Kedavra termino directo en el pecho del varón. Y lo último que vio Igor Karkarov antes de morir fue a Lord Voldemort.

Me estremecí al recordar ese sueño, habían pasado varios días desde que esa imagen aparecía en mi mente cada vez que trataba de dormir. Por supuesto no le comente a nadie, ni siquiera a un Bill que había tenido suficientes tareas por parte de los duendes estas semanas.

El año nuevo llego con mucho trabajo para la orden, entre las reparaciones de La Madriguera y las misiones ultra-secretas de las que no me hablaban mucho Enero había quedado prácticamente en el olvido.

Exactamente el 13 de Enero me llego una carta de Theo, ahí mismo anexo una de mi pelinegra amiga a la que extrañaba mucho. Mi hermano pequeño le había contado a Blaise, Pansy y Daphne que había tenido un par de problemas, que no se preocuparan y que me verían pronto: pero ambos sabíamos que eso no sería muy posible.

A pesar de que los Zabini ni los Greengrass mantenían una relación directa con Lord Voldemort, me parecía muy riesgoso que supieran la verdad: eventualmente se las contaría. En cambio la familia de Pansy debía estar ya bien enterada de que mi padre y yo éramos unos traidores, él por abandonar a su Lord mientras que yo por el simple hecho de ser hija del ladrón Regulus Black.

-Reg la comida está lista- Sirius me aviso con un susurró asomándose por la puerta, me encontraba en la habitación donde estaba el árbol genealógico de la familia Black: donde estaba Sirius solo había un pedazo de tapiz quemado, mientras que donde estaba Regulus se encontraba una calavera.

Estás últimas semanas había pensado, más que de costumbre, en todo lo relacionado con ese maldito collar que mi padre me dejo para destruir: utilice toda la magia que conocía pero nada parecía suficiente como para abrirlo. Suspire mirando al cielo, deseando que Regulus me hubiera dejado más que solo acertijos.

Camine hasta la cocina donde Sirius había hecho pollo con patatas, usualmente yo era la encargada de alimentarnos pero él castaño notaba que no estaba necesariamente de buen humor como para meterme a la cocina un par de horas. Además Bill comenzó a llegar cenado de Gringotts, a veces iba a visitar a su mamá saliendo del trabajo.

Me sorprendí al ver a un Remus Lupin más flaco y austero, parecía que había envejecido diez años en dos semanas. Se sentó a comer con nosotros, estaba notablemente callado pero su mirada hablaba más fuerte que las palabras.

-¿Pasa algo?- Pregunté mirándolo con curiosidad, jugaba con las patatas en su plato mirando hacia la nada.

-Si Lunático, hoy.. te ves mal- Sirius hizo una mueca mientras bebía su zumo de calabaza.

-Ha habido otro par de ataques de dementores- anunció con un suspiro- Y han encontrado el cuerpo de Igor Karkaroff en una choza al norte con la Marca Tenebrosa sobre él.

Sentí la mirada de ambos hombres cuando deje caer el vaso de agua que apenas iba a tomar, mis ojos se abrieron ante aquella noticia. Trague saliva tratando de actuar normal, pero comenzaba a hiperventilar: ¿Cómo MIERDA HABIA SOÑADO CON ESO Y HABIA OCURRIDO?

- Bien, francamente, estoy sorprendido ya que sobrevivió un año luego de abandonar a los Mortífagos- Sirius confeso pero note como de inmediato se arrepintió de haber dicho tal cosa, mis dos padres habían estado en una situación muy similar: Uno murió y el otro seguía tratando de esconderse.

Escondí la cara entre mis manos apoyándome en la vieja mesa de madera, contando mis respiraciones pero no parecía poder controlarme. No quería llorar, ya había llorado lo suficiente: Lo que no entendía era porque había tenido esa visión.

-¿Pasa algo, Regina?- Remus preguntó en un susurro acercando su mano a mi pero negué.

-Lo siento Reg, no quise...-Sirius extendió su mano, buscando acercarse a mi.

-No es eso Sirius, es...- Suspire- No sé cómo explicar esto.

-¿Qué pasa?-Canuto dijo con atención.

-Yo hace días soñé con... con ese hombre, el director de Durmstrang, y él..-Trate de decir pero me quede sin palabras, agache la mirada fijándome en mis pies descalzos.

-¿El qué?- Remus calmadamente musito.

-Estaba muerto, Ya-Sabes-Quien lo mato- Conteste frunciendo el ceño.

Los dos hombres se miraron confundidos, tratando de entender lo que había dicho. Mi pecho subia y bajaba de la desesperación, estaba segura que esto era una crisis de ansiedad. Me intente parar para salir huyendo de ahí pero de pronto todo pareció moverse de lugar. Tarde unos minutos en controlar mi respiración y cuando lo logré, Sirius fue el primero en hablar.

-¿Esto es parecido a lo de la cámara?- El hombre de cabello castaño rizado preguntó acariciando mi cabello.

-No lo sé, supongo- Me encogí en hombros tratando de hacer un patrón en mi cabeza de lo que me estaba pasando pero no lograba entender nada.

-Creo que deberíamos investigar que está pasando- Sirius lucía preocupado, dejo su comida a un lado para acercarse a mí.

-No sé a dónde ir-Susurré.

-¿A dónde iras? Querrás decir a donde iremos, no te dejaré sola niña- Respondió el hombre.

-Sirius- Protesté pero me calló con un abrazo

-Creo que conozco a alguien que nos pueda ayudar, pero deben empacar... y rápido.- Remus Lupin se levantó de su asiento caminado hacia la puerta, miro sobre su hombro antes de decir- Iremos a Irlanda.

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