To be so lonely || Bill Weasley.

INVISIBLE STRING.

Me había prometido a mí misma que este verano me relajaría pero en realidad me la estaba pasando día y noche practicando con Theodore hechizos de defensa a petición de mi padre, según el debíamos estar siempre preparados. Tenía el presentimiento de que algo le ocurría, no era normal que mi padre nos enseñara tantas cosas que jamás habíamos imaginado conocer en Hogwarts.

En mis ratos libres me la vivía en la biblioteca, solo había pasado una semana y ya casi terminaba los libros nuevos que mi padre había traído de su viaje por Francia: según el solo estaba ahí por negocios, pero algo me decía que algo más estaba ocurriendo. 

El mismo día que llegamos le conteste a Bill su carta, se disculpó por que no pudo regresar a Hogwarts esos días pero me aseguro que estaríamos en contacto estas vacaciones. Ahí mismo Bill me conto que no regresaría a Egipto como lo tenía planeado, dijo que cuando nos viéramos en persona podríamos hablar de eso. Me emocionaba pensar en el pelirrojo y en que probablemente lo podría ver este verano, pero tampoco entendía porque había decidido renunciar al empleo de sus sueños. 

Mi padre nos había otorgado permiso para ir un rato al Callejón Diagon, iríamos con Pansy y Blaise. Antes de bajar por las escaleras de mármol de mi hogar, escuche que mi padre le decía a mi hermano que por ninguna razón nos acercáramos al Callejón Knockturn pero fue muy específico cuando dijo que nos mantuviéramos alejados de Borgin & Burkes: eso solo aumento mi curiosidad.

Nos encontramos con la pelinegra y el moreno justo afuera de Ollivanders, la hermosa madre de Blaise le había encargado unas plumas de pavo real de la tienda y fue nuestro punto de reunión. Teníamos una semana sin vernos y Pansy ya tenía como tres mil chismes que contarme, aun así apreciaba mucho a mi amiga. Podía aceptar que fuera un poco inmadura o hueca, pero sentía que eso hacia que nuestra amistad fluyera: ¿Se imaginan a dos Reginas Nott? Sería desastroso.

Nos sentamos a tomar un helado en Florean Fortescue, como era el inicio del verano el callejón estaba muy lleno por lo que decidimos sentarnos dentro del establecimiento en las últimas mesas. Fui la última en recibir su helado de limón, sabía delicioso pero deje la boca abierta cuando vi pasar a Bill por la ventana caminando a paso relajado: Internamente sonreí y me contuve de gritar de emoción, desde el día en la enfermería no lo había visto.

-Chicos... creo que perdí mi pulsera... la que me regalo mi padre la navidad pasada, tal vez está en Ollivanders-Me pare rápidamente como si estuviera buscando algo, pero sabía que ese día ni siquiera me había puesto accesorios.

-Bueno vamos- Blaise hizo el ademan de pararse pero rápidamente lo detuve.

-No hace falta, solo iré un minuto. Adelántense a ver las escobas- Les sonreí insistente y pude ver como mi hermano junto con Blaise asentía, pero Pansy me miraba intrigada.

Salí lo más rápido que pude casi tirando la bola de helado por la que había hecho una fila de casi quince minutos, pero logré mirar esa cabellera pelirroja que iba suelta y moviéndose con el poco viento que hacía. Camine lo más rápido y sigilosa que pude, una vez que lo alcance le toque dos veces en el hombro.

-¡REG! ¡MI CIELO!- Me estrecho en sus brazos provocando que mis pies se despegaran del suelo, pero se separó rápido tomando mi mano y llevándome a un lugar un poco menos transitado después de que me había cargado justo en medio del callejón principal con medio mundo mágico a nuestro alrededor.

-Weasley... te eche de menos- Tome su cara entre mis manos mirando esos ojos celestes que tanto extrañaba, Bill se acercó a mi cara agachándose un poco y me dio un tierno beso en los labios. Se apartó abrazándome nuevamente con desesperación y beso mi frente.

-Casi olvido tu aroma- Inhalo el olor a canela de mi cabello, yo solo sonreí nerviosa- ¿Qué haces aquí sola Regina?, es peligroso- Vi como el segundo de los Weasleys miraba para todos lados como si tratará de cuidarme de algo.

-¡Oye! Ya casi tengo 17- Atrapo rápidamente mis labios entre los suyos y reí aun en su boca- Estoy con Theo y unos amigos, estábamos comiendo helado.

Me tomo entre sus brazos y me estrecho fuertemente, ya había perdido la cuenta de los abrazos que me había dado en estos minutos pero parecía que al igual que yo no quería que nos soltáramos nunca: encontrarlo en este lugar justo en este preciso momento me parecía encantador, como si estuviéramos conectados a un hilo invisible. 

-Perdón por no contestar la carta, he tenido unos días de locos... regrese a Londres- Una sonrisa se postro en mis labios y me pare de puntitas para poder alcanzar sus labios: me sentía feliz saber que estábamos un poco más cerca- Te lo iba a contar pero en Gringotts me están explotando, tome un trabajo de oficina.

-Entonces anda y ve, luego hablamos por carta o..-Bill me interrumpió hablando rápido. 

-No no no, ellos pueden esperar un poco más: los he hecho ganar mucho oro como para que no me puedan regalar cinco minutos más con la chica de mis sueños- Me ruborice al instante por su ''confesión''.

-¿La chica de tus sueños? Mmmm supongo que debe ser hermosa- Pase mis brazos por su cuello haciéndolo emitir una sonora carcajada, Bill puso sus manos alrededor de mi cintura haciéndome estremecer.

-Y sensual, graciosa, inteligente, un poco pequeña- Hizo referencia a mi estatura y solo lo empuje un poco- Pero en serio Nott, eres la chica de mis sueños- Atrape sus labios con los míos y me reí aún en su boca.

Se despidió de mí con la promesa de que pronto respondería mi carta y que me debía una cita, todo por el asunto de tenerme acorralada en un callejón sucio pero a mí me pareció lo más gratificante de mi salida. Extrañaba tanto verlo.

Busque a los chicos en la tienda especializada en artículos de quidditch, teníamos que cambiar de escobas y Theo había ido a elegir el modelo más reciente para jugar en nuestro hogar. Blaise también había aprovechado para comprar unos guantes, pronto tendríamos un juego amistoso en su casa junto con Malfoy, sus gorilas y Daphne Greengrass. Antes de que subiera a la planta alta a ver las novedades que había, sentí como alguien me tomaba fuertemente del brazo.

-¿Qué hacías con el pelirrojo ese?- Pansy me pregunto con la mandíbula apretada, casi lanzándome una maldición imperdonable: me había visto con Bill. 

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CHAN CHAN CHAN CHAN! ¿Qué pasará en el siguiente capitulo? Jajajaja, perdón: me emociono de más. Pueeeeees ya vi unas cuantas lecturas y me anime a subirles algo pequeño, tengo un par de capítulos más que editar pero lamentablemente mañana presento un examen IMPORTANTISIMO PARA MI!! Si alguien lee esto, por favor envíen sus mejores vibras :)  

Espero les guste esta historia <3