Como de costumbre, llegué al colegio con mis cosas dejándolas en el casillero, caminé hasta los vestidores de chicas para cambiarme ya que teníamos clase de educación física y el profesor odiaba que no fuéramos puntuales. Me sentía con ganas de empezar un nuevo día porque ayer gracias al cielo no había tenido ningún problema y había dejado todo claro. Ya no quería que me molestaran, lo único que quería era paz y tranquilidad.
- Hasta que al fin te encuentro...- dice Nick llegando a mi lado- anoche no sabía como comunicarme contigo, te trate de marcar pero al parecer no entraba la llamada.
- Lo apagué ¿por qué?
- Cameron y Timothee comenzaron a pelear y ya sabes...- dice y mira mi grupo- Oh, también te toca educación física, hoy practicaré para entrar al equipo de Basquetbol espero que me den la oportunidad de entrar.
- ¿Se golpearon?- pregunté.
- Como te decía...- mira mi grupo- tienes que rezar para que me quede.
- Si, si...- dije apartándolo un poco de mi vista- ¿Dónde está Cam?
- Dijo que llegaría tarde y si no, obvio va a faltar- dice sonriendo.
- ¿Tiene algún golpe?
- Uno que otro...- dice pensando- en el ojo creo, oh y también tiene la parte derecha del labio hinchada.
- ¿Tus padres no lo llevaron al hospital?
- ¿En serio crees que ellos harían eso?- dice riendo- mi mamá lo vio y le preguntó si alguna chica había hecho eso, como si fuera una broma y mi padre sólo le pregunto si había ganado la pelea.
- Que mal- dije mirando mi grupo- ¿puedes llamarlo y preguntarle si vendrá?
- ¿Para qué?
- Vamos Nick, te lo estoy pidiendo como un favor.
- Por qué no faltas a clases y vas a verlo.
- Mmm no...- respondí dudosa.
- Él lo haría por ti.
- Yo no haría tal estupidez.
- No traje mi celular- dice suspirando- así que elige faltar a clases o perder tu orgullo y llamarlo.
- Que buen amigo- dije rodando los ojos.
- Sólo te estoy ayudando a elegir- dice riendo.
- ¿Cómo estaré segura de que realmente él va estar en casa?
- Sólo ve...- sonríe.
- No puedo...
(....)
Cincuenta minutos después estaba en la puerta de la casa de Cameron dándome el valor suficiente como para tocar el timbre o tocar la puerta. Me había escapado gracias a Nick que no dejaba de insistir en que me escapará y viniera a su casa. Mis dedos estaban a un milímetro de tocar el timbre cuando la puerta se abrió y la cara de Cam se asomó. Una sonrisa enmarcaba su rostro un poco hinchado por la pelea.
- Hey- dice.
- Otra vez...- dije cruzándome de brazos.
- Siento que no te he visto desde hace años...- dice sonriendo.
- ¿Cuáles tu afán por pelear con otros chicos?
- ¿Quieres pasar? Estoy sólo.
- ¿Me puedes regalar un vaso con agua? Me vine caminando del colegio.
ESTÁS LEYENDO
La apuesta de los 100 días (Sin Editar)
Romance¿Qué pasaría si tus amigas y tú hicieran una apuesta para humillar a uno de los playboys de la preparatoria? Pues eso hice yo junto a mis amigas. Debo enamorarlo en cien días, pero yo no debo enamorarme. se rumorea que él es peligroso y a mi me gust...