Contrato: Unión

Capítulo 6

—¡Si! ¡Al fin lo tengo! —exclamé emocionado mirando el objetivo frente a mi. —Miren mi hermoso televisor. —afirmé con una gran sonrisa extendiendo mis manos al objeto.

—50 pulgadas, con miles de secretitos. —mostré una sonrisa misteriosa tomando el control. Entre en las opciones donde aparecieron algunos personajes ya conocidos. 

Bajé entre las opciones ya conocidas hasta dar con Tyrone Pines de la dimensión de Fight Falls, un símbolo de Pino color rojo apareció en la pantalla. 

Esto será divertido.

—Adelantemos un poco. —murmuré con una risa divertida antes de darle play.

Tres días después 
Tyrone 

—¿Estás seguro de hacer esto? —pregunté, no es que no confiara, pero vamos es un demonio nunca se sabe.

—Tranquilo, Red Pinetree. —dijo desinteresado Bill concentrado en su mano, desprendía un azul electrizante de forma tenue, seguro era porque hay demasiadas personas cerca.

—Será mejor que ganes porque voy a apostar todo mi dinero. —exclamó Stan demasiado serio como para ser él.

—No molesten tanto, esto no es nada. —respondió Phill desinteresado.

—Eso me recuerda, ¿No tienen un nombre para él? —preguntó Mabel curiosa. —Ya saben para la lucha.

—¿Qué tal "Pelos de Menstruación? —comentó divertido Bill mirando aún viendo su mano.

—Yo creo que sería un excelente nombre. —le siguió la burla la gemela.

—Podrían ponerle seriedad a esto. —gruñó el tío Stan.

—Oh, vamos tío sin importar el nombre, él ganará. —afirmó Mabel encogiéndose de hombres. —Además si tiene cabello de menstruación. —rió divertida.

—¡Eso es! —exclamó señalando a Phill.

—No me pondré ese nombre. —se quejó el demonio rojo. —Me agradabas, niño. —le reprochó. 

—Déjate de tonterías. —le replicó Tyrone rodando los ojos con fastidio. —Pero me da una idea para tu nombre "Blood", ¿Que tal? —preguntó emocionado.

—¿Blood? ¡Es estupendo! —exclamó animado abrazando al castaño.

—¡Hey! ¡Tampoco es para tanto! —le reprochó Tyrone, aún así le gustaba percibir ese extraño aroma.

—Para mi lo es, además me encanta tenerte así. —le susurró lamiendo su cuello.

El gemelo soltó un jadeo, su cuerpo se estremeció al sentir la húmeda y caliente lengua del contrario.

—Señoras y señores la pelea de hoy está a punto de empezar. —se escuchó por todo el lugar 

—Me encantaría seguir con esto, pero tengo una pelea pendiente. —susurró Phill directo al oído del otro, causando otro estremecimiento.

—Ni quien te quiera. —gruño molesto tratando de ahogar un jadeo, porque por mucho que se sintiera bien él se negaba a aceptarlo.

Phill se alejó divertido, con un gesto se despidió de todos.

Es un completo idiota.

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—Claro que es. —comente rodando los ojos. —Pero necesito saber que piensa. —dije sin poder evitar reír, me sentía como la vieja chismosa que vivía al lado de la casa de mi abuela, pero qué importa.