Capítulo 57

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Dipper 

Había conocido al autor de los diarios, ¡Yey!

Me había dicho que no confiara en Bill, en mi dorito, ¡No, yey!

¡Agh! Realmente no se que pensar. —pensé mirando detenidamente el piso.

—¡¡Dipper!! —se quejó mi hermana en mi oído devolviendome de vuelta a la realidad. —Te traje aquí para que te despertarás de una vez por todas, pero incluso en el centro comercial sigues en las nubes. —me regañó molesta con sus dos amigas a su lado.

Desde que mi tío Ford llegó siempre me advierte de Bill e incluso dice que se ha estado metiendo en sus sueños.

Eso en verdad me molesta, la última vez que lo vi fue hace tres semanas, dijo que iría a la dimensión de su hermano aún así… ¿Tiene tiempo para mortificar a mi tío, pero no para visitarme?

—¡Dipper! ¡Siquiera me estás escuchando! —me regaño de nuevo.

—¡Ahg! Mabel, lo siento, ¿sí? —solté fastidiado.

A pesar de querer dejar de pensar, no puedo, ese estúpido dorito.

Al sentir algo chocar contra mi mente, supe que Bill intentaba entrar a la dimensión.

La primera vez me asusté, pero al sentir como volvía a tocar como si de una puerta se tratara, tuve que concentrarme para abrir esa "puerta" a esta dimensión.

—Lo siento, Mabel tengo que irme. —dije antes de correr fuera del centro comercial, sin esperar una respuesta.

Seguí esa dirección que tanto mi mente como mi corazón me indicaba, no pude llegar muy lejos debido a mi poca resistencia empecé a respirar de forma agitada, me sostuve en mis rodillas.

—¿Quieres un poco de agua? —escuché una voz delante mío, poniendo la botella en mi línea de visión.

Aún con la respiración entrecortada mire hacia arriba encontrando a ese tonto demonio rubio… con ojos ¿plateados?

—¿Tengo los ojos plateados? —me preguntó impresionado dando un paso hacia atrás.

Asentí al ver el desconcierto en su mirada. —¿De verdad eres Bill? —pregunté cauteloso.

—Oh, vamos Pinetree, ¿Quién sería si no fuera yo? —me dijo con diversión.

Al notar que efectivamente es mi dorito, enderece mi postura y le di un "fuerte" golpe en el pecho.

—¿Eso por qué fue? —me preguntó consternado.

—Por tener tiempo para hostigar a mi tío pero no para visitarme. —gruñí con molestia.

—¿Qué? —me preguntó confundido. —He estado en la dimensión de mi hermano, no he venido acá y no sacrificaría mi magia para entrar en su sueño, además creo recordar que tiene una estúpida placa en su cabeza. —me respondió irritado, sus ojos cambiaron rápidamente a color miel con uno que otro destello rojo.

Entonces… ¿No fue él? —pensé para mí mismo, sintiendo algo brotar en mi interior.

—Hey, Pinetree, ¿Eso que huelo son celos? —me preguntó de repente divertido con una gran sonrisa acercándose su rostro al mío, el color de sus ojos cambiando a plateado de golpe.

—¿Tus ojos por que cambian de color? —pregunté interesado queriendo cambiar de tema.

—¿Eh? ¿Volvieron a cambiar? —me preguntó desconcertado retrocediendo.

—Ahora son mitad plateado y mitad rosado. —dije asombrado viendo como el rosado empezaba a dominar.

—S-Solo toma tu agua. —me dijo molesto dándome la botella antes de empezar a caminar rápido lejos de mi.

Contrato: UniónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora