12. Wind beneath my wings

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Disclaimer: Los Vengadores no me pertenecen. Son de Disney y de Marvel, solo la historia y los personajes que no reconozcan, son míos. 

NOTA: Negritas en ruso. 

Para Patty, gracias por creer en esta historia, ¡feliz cumpleaños!

«Por la noche leo y escucho cuentos de hadas, compensando así las insuficiencias de mi educación maldita. ¡Cuán encantadores son estos cuentos de hadas! Cada uno es un poema».

Alexander Pushkin.

Allysson estaba sumamente molesta, confundida y asustada. La niña no había tomado nada bien el embarazo de su madre, sintiéndose abandonada y desplazada a sus cinco años. Afortunadamente, tenía el apoyo de su hermano mayor, quien se encontraba en la misma situación.

—¡Le está haciendo daño a mi mamá!—anunciaba Nikolay, siendo abrazado por Tony Stark.

Natasha Romanoff-Rogers no había tenido un embarazo sencillo. Desde el tercer o cuarto mes de gestación, parecía que el bebé hacia todo lo posible para salir de su cuerpo. La doctora Cho había llegado a la conclusión de que era debido a la mezcla de sueros en el feto y en ella. Había terminado recluida en su cama, rogando porque su hija naciera sana. Estaba sola con sus dos hijos mayores cuando sintió las primeras contracciones, así que solamente pudo tomar el quinjet y manejar a la base.

—No pasa nada, Niko—decía Tony, viendo con preocupación a Sharon Carter, quien acunaba a Allysson—En menos de lo que piensan podrán ver a su madre y a su hermana.

Steve Rogers, el futuro padre, había pasado besando las cabezas de sus hijos antes de salir corriendo por los pasillos de la Base hasta donde Natasha gritaba su nombre.

—¡Shadon!—sollozó Allysson—¡Quiero a mi mamita!

—Vendrá pronto preciosa—consolaba la agente—Te lo prometo.

Para empeorar la situación, el parto comenzó a alargarse demasiado. La niña estaba localizada en una mala posición, así que a Natasha no le quedaba otra que pujar pues se negaba a tener una cesárea por miedo a que los sueros hicieran lo suyo y pudiese perder a su bebé. Fueron casi trece horas de parto, que terminaron en muchas lágrimas y una preciosa bebé pelirroja.

—¡ES MI CUMPLEAÑOS! ¡NO DE ELLA!—gritó Allysson cuando su padre salió a anunciar el nacimiento—¡NO QUIEYO QUE ESTÉ AQUÍ! ¡NO HOY!

Para empeorar la situación, Patrice Anne Rogers había llegado al mundo justo a la medianoche del día 31 de Octubre, coincidiendo con el cumpleaños de Allysson. Se suponía que la pequeña nacería un mes después, cerca del cumpleaños de Natasha, pero no había conseguido aguantar mas. Steve podía ver cómo su hija regresaba a la niña de antes con esas palabras.

—Ally, mi princesita—Steve la tomó en brazos—¿Por qué no vamos a ver a tu mamá y a tu hermanita?

La niña se cruzó de brazos, con las lágrimas corriendo libremente por sus mejillas.

—¡No quieyo verlas! ¡Quieyo mi fiesta! ¡Mi tío Tony me prometió fiesta!

—Cuándo tu mamá salga del hospital podremos celebrar, mi amor—dijo el Capitán América—Tendrás la fiesta que quieras, ¿ya habías decidido de qué?

—¡Yo quieyo que sea hoy!

Niko se limitó a tomar a su padre de la mano para entrar a la habitación. Él también tenía muchos sentimientos encontrados con respecto a su hermana, por lo que no estaba seguro de conocerla. Sentía que aquel bebé era otra responsabilidad para él, como le había impuesto el cuidado de Alinka cuando solamente era el experimento 939.

Luciérnagas: One Shots Proyecto Rebirth 939 || ROMANOGERSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora