Luciérnagas: One Shots Proyecto Rebirth 939 || ROMANOGERS

3.Prima Ballerina (Zvezda)

Disclaimer: Los Vengadores son de Marvel y de Disney, no me pertenece. Solamente la historia y los personajes que no reconzcan son míos.

NOTA: Negritas en ruso.

Para Patty.

Prima ballerina ( "primera bailarina") o Étoile ( "estrella") es el título con el que se denomina a una bailarina que por su particular excelencia, talento, disciplina y pasión desempeña los principales roles dentro de una compañía de ballet

Era un día bastante movido en la base de los Vengadores. Sam Wilson y María Hill habían llevado por primera vez a su hija a aquel lugar, así que todos sus compañeros se habían reunido para poder conocer a la niña. Debido a que Steve, Natasha, Clint y Wanda ya tenían hijos, pronto el campo de entrenamiento se había convertido en una pequeña fiesta infantil. María Hill no podía dejar de sonreír ante la ironía de ver a la Viuda Negra persiguiendo con alegría y libertad a dos niños que, meses antes, proclamaba odiar. Reconocía que ella misma había sido un poco dura con Ally cuando llegó, pero esa niña lograba ganarse los corazones de todos a su alrededor. Niko se despegó de Steve y Natasha en cuanto vio a sus amigos, los gemelos Maximoff, pero Allysson se mantuvo cerca de su madre, incluso cuando la invitaron a jugar. La mano derecha de Fury no pudo evitar observar con detenimiento a su ahijada, que se había quedado de pie, a unos pasos de Natasha, observando con detenimiento lo que su madre hacia. Negó con la cabeza, pensando que la chiquilla tenía planeada alguna travesura, pero a lo largo de la tarde se dio cuenta que no era así.

—Hill, ¿qué es lo que te pasa?—preguntó Natasha llegando a donde su amiga se encontraba sentada con su pequeña—Si sigues observando a Alya de esa manera le abrirás un agujero en el craneo.

La mano derecha de Hill bufó, sin poder creer a su amiga.

—Ser madre te ha hecho estar ciega, ¿o me equivoco?—rebatió.

Aquellas palabras solamente hicieron enojar a la Viuda Negra, que vio a su amiga con el entrecejo fruncido. Ella estaba segura de conocer muy bien a su hija y sabía que no le pasaba nada malo; Allysson estaba muy bien, alegre de estar en la fiesta con sus amigos, jugando con Cecilie que solo hacia pequeños sonidos de alegría al ver a su amiga.

—Deja la broma y dime que está pasando, Hill.

Al escuchar la dureza en la voz de la espía, María se dio cuenta que Natasha realmente no se estaba dando cuenta de la situación.

—Ally lleva todo el día observándote, Nat.

—Eso no es cierto, María—mencionó Natasha—Mi niña ha estado jugando con su hermano y sus amigos todo el día.

—De vez en cuando se detiene y te observa, se queda mucho rato viéndote fijamente y después vuelve a jugar. Pensé que había pasado algo entre ustedes, una discusión o que se había portado mal, pero ahora veo que no.

—No ha pasado nada, María—aseguró Natasha rápidamente. 

María Hill se encogió de hombros.

—Quizá solamente son cosas de niños.

—Debe ser eso—mencionó Natasha, aunque no estaba tan segura.

La espía pelirroja pasó el resto de la fiesta observando discretamente a su hija, dándose cuenta de que, en efecto, las palabras de su amiga eran ciertas. Alya jugaba por ratos, pero la mayor parte del tiempo se detenía, poniendo sus manos en sus mejillas y miraba fijamente a su madre, quien movía rápidamente la mirada para que su hija no descubriera que la estaba viendo.