THE TRUTH WILL OUT

Capítulo 41

A finales de mes llegó el primer fin de semana de Hogsmead y Haddy estaba un poco ansioso. Aunque no había nada acordado oficialmente, Severus sería uno de los profesores acompañantes y casualmente le había hecho saber a Draco que pensaba pasar la mayor parte del día encerrado en las Tres Escobas poniéndose al día con el marcado.

Incluso Haddy pudo reconocer esa invitación y, en consecuencia, había rechazado sus otras invitaciones; tanto sus amigos como Oliver y Marcus le habían preguntado si quería quedar, pero él se había negado alegando un compromiso previo. Cada uno de ellos le deseó suerte y Oliver bromeó diciendo que estaba deseando leer cómo le había ido en el profeta la próxima semana.

Así que ahora estaba de pie frente al espejo de Draco, dejando que su hermano lo peinara para un simple fin de semana en Hogsmeade. En estos momentos se estaba probando la tercera opción de traje mientras Draco lo observaba desde todos los ángulos. Al menos Lysander también estaba aquí, así que no se enfrentaba solo a esta tortura.

Habían decidido ir al pueblo en grupo; él mismo, Draco, Hermione, Lysander, Blaise y Pansy. Aunque todos sabían que se separarían poco después de llegar, al menos con un grupo más grande Haddy sabía que habría alguien con quien hablar en caso de que su no cita con Severus terminara en desastre.

A Draco le parecía absolutamente hilarante que Haddy pudiera enfrentarse a uno de los magos más poderosos del siglo sin sudar, pero que la idea de tomar una copa con alguien en un pub le hiciera caer en picado. Haddy estaba bastante seguro de que su hermano también se ponía nervioso al pasar tiempo a solas con Hermione, ahora que eran semioficiales, pero los años de entrenamiento de los sangre pura hacían que su máscara nunca decayera. Empezaba a ver el beneficio de la misma y juró practicar más para el futuro.

-Es que no sé Draco-, dijo Haddy, contemplando su reflejo, -sé que llevé el cuero la última vez que me vio, pero ¿estás seguro de que los vaqueros no son demasiado informales?-.

-Mírate, Haddy, al parecer has conseguido aprender algo sobre moda en estos últimos meses. Sin embargo te equivocas, son jeans negros y por lo tanto lo suficientemente casuales, esto se supone que es un encuentro casual recuerda, no es una cita oficial simplemente una oportunidad para que ustedes dos pasen algún tiempo juntos-.

-Lo sé, pero aún así quiero causar una buena impresión. Quiero que sepa que voy en serio-.

-Lo sé, por eso la camisa blanca y el chaleco, equilibra sin dejar de ser elegante, y esos vaqueros hacen que tu culo se vea muy bien. Quizá quieras ponerte también tu abrigo gris, hoy hace un poco de frío, y ponte tus Oxfords negros. Ahora, la ropa está hecha, es hora de tu pelo-.

Hadrian gimió y Lisandro se rió al parecer, ver la miseria de Haddy le distraía de sus propios nervios. Al menos todos estaban en barcos similares, excepto Pansy, que se había quejado de la falta de hombres elegibles en el colegio. Blaise y Draco se sintieron muy molestos por esa afirmación, pero Pansy se mantuvo firme; aunque eran guapos, ambos no eran ni de lejos lo suficientemente robustos para su gusto.

El insólito grupo de Gryffindors y Slytherins se dirigió al pueblo después de un rápido desayuno; rápido porque Draco había tardado el doble de tiempo en prepararse que en Haddy y Lys y por eso iban con retraso. Pansy ya se había adelantado a ellos y acabó desayunando en la mesa de Gryffindor con Hermione, que se había hartado de esperar a los chicos. Desde la fiesta, las viejas líneas de la casa se habían desmoronado rápidamente y Pansy había sido aceptada en general por los leones. Los detractores habituales habían murmurado en voz baja, pero el resto de la casa los ignoraba. Todo el mundo empezaba a darse cuenta de que los Weasley más jóvenes no estaban a la altura de la reputación de sus hermanos mayores y estaban perdiendo rápidamente el respeto que habían tenido antes.