Slow Burn y algo más...
Una voleybolista y un futbolista conocidos en La Masía, mejores amigos desde pequeños, se aman desde siempre pero por miedo a arruinar su amistad trataron de frenar sus sentimientos ¿Tomarán coraje o serán reprimidos por siem...
Iri Dejé mis maletas y me apresuré a abrazarlo, no sé si podré describir lo mágico que fue. Lo extrañé tanto y me alivió que nada hubiera cambiado.
-Ya estás en casa Iri- Me dijo y yo asentí.
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Luego abracé a mi equipo, noté que me habían extrañado, el presidente se me acercó sonriente con una caja.
-Y D'Angelo? Que le pareció?- Me preguntó. -Una tortura, nunca más les hago caso- Solté y todos se rieron. -De verdad? A mí me pareció que encajaba muy bien en el equipo y el blanco definitivamente es su color- Dijo. -Si quiere echarme del club dígalo sin excusas pero no me mienta así- Respondí y él negó. -No, no, al contrario, la extrañamos, y para que vea que es verdad le otorgamos lo que le pertenece- Finalizó y me entregó la caja, cuando la abrí pude ver mi camiseta, el hermoso número 5 dorado y el D'Angelo arriba. -Estos si son mis colores- Dije contenta.
Fui a comer con mis amigas, Pablo y Pedri, volvimos a mi restaurante favorito en Barcelona, todo allí era hermoso.
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-Fue muy muy feo?- Preguntó Guada. -Sii, solo una parte fue linda- Dije tratando de contar esa partecita importante. -La cancha de entrenamiento era buena?- Se interesó Lu. -Horrible, no sé parece en nada a la nuestra.
Comimos muy tranquilos y luego tomamos helado, estuvimos toda la tarde boludeando, yendo de acá para allá, eso era lo que más extrañaba, mi familia. Pablo me abrazaba constantemente y no me soltaba, nos habíamos echado mucho de menos.
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Para coronar el gran día que estábamos pasando que mejor que salir de joda, lo que más amaba además del voley y Gavi: La rumba.
Estaba todo bien, disfrutábamos y reíamos todos juntos, Pablo odiaba bailar pero yo lo obligaba a hacerlo.
Gavi y yo nos quedamos solos en una esquina de la pista, mientras yo bailaba él me miraba sonriente, de repente se acercó a mí y sin vergüenza trató de besarme.
-No, no- Le dije y me alejé- No Gavi. -Vamos Iri, déjate llevar- Me dijo y se acercó más. -Pablo, que no!- Lo alejé mientras lo empujaba- Tengo novio Gavi, eso era lo único destacable de mi viaje a Madrid! -Que mierda? Porque no lo dijiste antes?!- Se indignó. -Quería decirlo pero estaban preocupados en el voley y lo feo que es el Real Madrid!- Me quejé- Por favor Pablo, no arruinemos esto.
Hacía unos meses comencé una relación con Marcos, un estudiante de primer año en Administración de empresas que estaba de viaje en Madrid. Era un catalán bueno pero un tanto posesivo, yo lo quería mucho pero habían veces que sus actitudes no me gustaban tanto.
Luego de contarle todo a Gavi él comprendió y las cosas siguieron encaminadas al disfrute. Exceptuando esa situación, todo fue inolvidable.
Cuando me desperté al otro día supe que algo muy malo había sucedido y yo no entendía nada.
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El peor ángulo para sacar una foto, si parecía que nos estábamos besando. Ahora estaba en un lío bastante grande con mi novio y conociendolo, no terminaría nada bien.
El también vive aquí en Barcelona y sabía que a la primera oportunidad que tuviera me buscaría solo para discutirme, por eso odiaba pelear con él, nunca me escuchaba.
--------- Se armó el lío porque el chisme prevalece chicuelas. Espero les guste este capítulo 🩷🩷🩷
