el poder de una madre por su cria

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-!hola, roset!.

-buenas tardes joven maestro.

-saves dónde está mi hermana?.

-hoy su profesor vino a darle una lección así que deben de estar en el tercer cuarto del segundo piso a la derecha .

-gracias!.

Corri lo más rápido que pude, quería que mi hermana viera lo que podía acer con la espada, porque práctique muchooo.

Se que mi hermana estará feliz y talvez me prepare caramelos o talvez está vez si me enseñe el pueblo.

Sin mirar atrás subí las escaleras y llege al cuarto, como estoy acostumbrado no toque y solo entre de golpe.

-¡¡¡Hermana,Hermana ,Hermana tienes que ver lo que puedo hacer!!!.

-¡Que clase de escándalo es este, es que acaso crían bestias aquí!.

Al entrar no estaba mi hermana, sino un señor raro y alargado Hera muy gracioso asi que casi me rio.

-pufff.
-perdon.

Rápidamente coloque mis manos en mi boca para no molestar a al señor largo.

-de que te estás riendo bestia?.

-es que el señor parece un palo.

-!como te treves ¡.

Cuando el señor palo dijo eso me tomo de mi cabello y me lo halo muy fuerte, me dolía mucho.

-!!Hayyyy, me duele mucho, porfavor bajarme¡¡.

-!!!no hasta que aprendas modales,me escuchaste inmundo, no te atrevas a volver a burlarte de mi, no sabes quién soy¡¡¡.

-!!!fue sin querer¡¡¡.

Quería morder lo o golpearlo pero mi hermana me dijo que no debo ser descuidado con eso y podría meterme en problemas y si lo hago hermana se enojaría y no quiero ver a hermana molesta.

-!!!por favor vajeme me duele¡¡¡

-¡¡asi que no pretendes respetar!!.

Derrepente mi cara dolió, el señor palo pe dió un golpe fuerte en la cara, no lo pude aguantar y de mis ojitos salieron lágrimas, me dolía mucho.

-¡¡¡waaaaaa, quiero a mi hermanaaaa, hermanaaaaaaaa, yo no hice nada malooo!!.

Según los caballeros los hombres no lloran, pero me duele mucho y mis ojitos no dejaban de soltar lágrimas.

-¡¡haag ya cállate!!.

Ahora me costaba un poco respirar, el señor palo malo me tapo la boca, luego la puerta se abrió y pude ver a mi hermana.

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Mis ojos no podían creer lo que estaban viendo.

Weroum se encontraba siendo agarrado del cabello por el maestro, mientras le tapaba la boca y lloraba mucho.

Esto me hizo crecer una ira enorme en todo mi cuerpo y mi adrenalina subio.

Rápidamente golpe la mano del maestro provocando que soltará a Weroum, rápidamente lo agarre y el se aferró a mi cuello sollozando.

-her-her-hermanaaa, yo-yo fui bueno, no hice nada maaalo.

Rápidamente le pase la mano por cabello donde le dolía y le susurré al oído.

-ya lo se, Weroum es un niño bueno, no te preocupes que hermana te ayudará.

-pero aquí está la otra vulgar, es que es normal que los vulgares se atraigan.

Todavía llorando mares senté a Weroum en unas de las sillas del estudio, bajo la mirada molesta del maestro al cual ignore.

Ahora creo que entiendo de dónde sacan las fuerzas las madres porque rápidamente me gire hacia el duque con una mirada que decía peligro en todas las formas, saque un cuchillo pequeño, parecido a uno de mesa pero muy afilado .

-ho-hoye , que piensas hacer con eso?.

Conjure un hechizo de lianas y traje una silla detrás de el, lo cente con fuerza y lo ate de todas las extremidades, todo le dolía y se comenzaba a asfixiar.

~ ¡¡¡¡CÓMO TE ATREVES A TOCAR CON TUS ASQUEROSAS MANOS A MI HERMANO!!!.

-y-y-yo, solo..

~¡¡¡TU PUEDES SER UN NOBLE, PERO LA PRÓXIMA VEZ TE MATARE CON MIS PROPIAS MANOS!!.

Tome el cuchillo y le apuñale la mano de lado a lado, en ambas manos, intento gritar de dolor pero con las enredaderas evite que hiciera ruido, lo tome de una pierna y lo saqué por la ventana.

Rápidamente me gire hacia Weroum y lo tome en brazos y lo lleve a nuestra avitación, lo coloque sobre la cama y lo escondí entre mi pecho.

-lo siento mucho.... Yo devi llegar antes.

- no fue tu culpa, fue culpa del palo malo y...mía , perdón no quería molestar a hermana.

El casi volvía llorar así que rápidamente lo detuve.

-claro que no es tu culpa y nunca me molestaría con Tigo , su quisieras podrías matar una persona y decir que fui yo, pero no lo hagas , y no me molestaría.

-pero...

-si te vuelve a pasar, aún así  siempre te protegeré, golpearlo, aruñalo y hasta muerdelo y no te preocupes porque tú grandiosa y poderosa hermana te resguarda.

-ahora muéstrame esa mejilla .

-si

Rápidamente conjure un hechizo para eliminar la inflamación y reducir el dolor , ahora que Lucius no se encontraba podía usar su estudio y leer libros de magia mucho más avanzada .

Pase mi mano por su cabello atado de una coleta baja, para calmar su dolor, pasamos así un rato hasta que se quedó dormido y yo junto a el.

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Esto era de suponer, pero no esperaba que fuese tan rápido, tres días después el maestro fue a quejarse con el duque y me mandaron a llamar, el contó sobre un niño que había en ese lugar y pidieron que lo llevará también, esto se pondrá feo.

-hermana, ya me bañeee.

- ve aquí.

Con un aire caliente seque su pelo que por naturaleza es lacio, parecían hilos de oro , le coloque la mejor camisa que tenía, junto con unos tirantes, una cinta negra y unos pantalones largos a juego, peine su cabello en una cola baja muy poco recogida y se encontraba listo.

-tan hermoso como siempre.

-hermana, ¿quí en veremos hoy?.

-te acuerdas que te conté cómo llegaste con Migo?.

-sii.

-pues veremos al duque, nuestro padre.

-y.... Tengo que llamarlo padre?.

-no si no quieres, puede ser solo duque, así lo llamo yo.

-valeee.

-bien , dame las manos y vámonos.

Creo que esto será mas difícil para mí que para Weroum, el que nunca había salido de nuestra mansión, estaba emocionado con todo loque observaba, cosas brillantes, oro por todos lados.

Los sirvientes no dejaban de mirarnos, parece que nuevamente se avían olvidado de mi, pero sobretodo a Weroum, por su parentesco con la duquesa y el duque, esto lo incómodo y dejo su emoción inicial por miedo y empezó a acercarse más a mi.

-no tengas miedo, son simplemente sirvientas que no te pueden hacer nada, tú eres tan fuerte como un dragón.

-si, soy valiente.

Y porfin, frente a la puerta del duque.

Rencarne como_ ¡¡¡ ¿Sabes que? al diablo con los clichés! Haré lo que yo quieraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora